De la incredulidad a la sorpresa. De lo inesperado a una nueva certeza. La clausura del Festival del Film de Locarno, la más pequeña de las grandes muestras cinematográficas internacionales, aportó un veredicto inapelable el segundo fin de semana de agosto: el reconocimiento a la pujanza del nuevo cine latinoamericano en plena expansión. Ocho de la veintena de distinciones otorgadas fueron para América Latina, a pesar que menos de un diez por ciento de films que participaban en la competencia internacional provenían de ese continente.
Leopardo de oro y mejor papel femenino
«Abrir puertas y ventanas» primer largo metraje de la joven realizadora argentina Milagros Mumenthaler ganó el «Pardo de Oro», la máxima distinción que otorga el concurso de un valor de más de 100 mil dólares estadounidenses. Y su primera actriz, María Canale, obtuvo el «Pardo de Plata» que reconoce la mejor actuación femenina de la competición oficial.
La co-producción argentino-helvética (Mumenthaler vivió toda su niñez y adolescencia en Suiza a partir de la llegada a este país en 1977 con sus padres, casi recién nacida) obtuvo también el premio otorgado por FIPRESCI, Federación Internacional de Críticos de Cine; una mención del Jurado Ecuménico y otra del Jurado que otorga un reconocimiento ecológico.
La película, que saldrá al circuito comercial en noviembre próximo, refleja la vida compleja de tres hermanas que viven en una casa de clase media argentina. Y que acaban de perder a su abuela, hasta entonces la columna vertebral de la familia, ante la ausencia de los padres de las jóvenes.
Mumenthaler se reconoció «asombrada ante el inesperado triunfo»; valoró el «esfuerzo de cuatro intensos años de trabajo»; reconoció el enorme apoyo de sus productores «que desde un primer momento creyeron totalmente en mi película», y subrayó la excelencia de la actuación de las tres jóvenes actrices que animan su film.
Y que juegan un papel esencial en «una película de personajes: las hermanas que luego un duelo deben pasar de la adolescencia al mundo adulto», explica.
Jóvenes promesas latinoamericanas recompensadas
«El Estudiante«, del realizador argentino Santiago Mitre, obtuvo el premio especial de Jurado en la categoría «Cineastas del Presente» que reconoce a jóvenes talentos. Lo que significa la compra asegurada de la película a un valor de casi 40 mil dólares estadounidenses y la proyección en Cine Club.
El film presenta la vida universitaria de un joven recién llegado del interior y su intensa vida militante, repleta de sueños, luchas institucionales y decepciones politiqueras.
Por su parte, el joven director chileno Sebastián Lelio, con su «Año del Tigre» , obtuvo el Premio al «Medio ambiente y la calidad de vida».
Una realización «ubicada entre la ficción y el documental», tal como la define su autor, elaborada con muy pocos recursos pocos días después del terrible terremoto que sufrió el sur chileno en enero del 2010.
El tema del «Año del Tigre» nació de una realidad histórica, cuando unos 800 presos sociales se fugaron de los centros de detención destruidos por los seísmos. A los pocos días, casi la mitad fueron re-capturados o regresaron voluntariamente a la cárcel.
«Mens Sana in Corpore Sano» del brasilero Juliano Dornelles, obtuvo una Mención Especial en la categoría «Pardos del Mañana» que busca identificar y promover futuras promesas.
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