El 14 de febrero tuvo lugar en Atlanta la Audiencia Oral ante el Onceno Circuito de la Corte de Apelaciones sobre el caso de los Cinco cubanos presos en Estados Unidos. El futuro del caso ahora depende de la decisión que adopte el pleno de los jueces. La audiencia constituyó el último paso previsto por […]
El 14 de febrero tuvo lugar en Atlanta la Audiencia Oral ante el Onceno Circuito de la Corte de Apelaciones sobre el caso de los Cinco cubanos presos en Estados Unidos. El futuro del caso ahora depende de la decisión que adopte el pleno de los jueces.
La audiencia constituyó el último paso previsto por la Corte en esta fase del proceso de apelación después que decidiera aceptar el 31 de octubre de 2005, la solicitud del Gobierno de reconsiderar el caso por la bancada de sus 12 jueces en activo, más la jueza Kravitch con pleno derecho a participar.
Esta decisión inusual fue tomada después de la intervención de la Secretaría de Justicia del Gobierno federal, lo que constituye una clara señal del tratamiento insólito de este caso.
A la defensa y a la Fiscalía les fue asignado un máximo de 20 minutos para exponer sus argumentos y los jueces realizaron preguntas a ambas partes a fin de evacuar dudas y hacer cuestionamientos a partir de los argumentos presentados previamente por escrito.
El aspecto central en que se basaron, tanto los argumentos de las partes como las preguntas de los jueces, fue la necesidad o no de conceder a los acusados otra sede que no fuera Miami para la celebración de su juicio.
El 9 de agosto de 2005, el panel de tres jueces encargado por el Onceno Circuito de examinar el caso, hizo pública su decisión sobre el caso determinando unánimemente revocar las condenas de los cinco cubanos y ordenar un nuevo juicio.
En su decisión de 93 páginas los magistrados reconocieron que «el prejuicio de la comunidad contra Cuba y su gobierno y la publicidad antes y durante el proceso legal, se combinaron para crear una situación en la que no era posible para los Cinco cubanos obtener un juicio justo».
Una vez concluida la audiencia y presentados los argumentos escritos, el pleno de la Corte no tiene plazo fijo para tomar su decisión.
A la vista asistieron un grupo de observadores internacionales, abogados y otras personalidades, entre las que figuraron Fabio Marcelli, de Italia, en representación de la Asociación Internacional de Abogados Demócratas, el Padre Geoff Bottoms de Inglaterra, el abogado Eberhard Schultz de Alemania, el abogado Carlos Zamorano de Argentina y el Diputado Kurt de Loor del Parlamento de Bélgica. Después de concluida la vista se realizó una conferencia de prensa organizada por el Comité de Solidaridad con los Cinco de Estados Unidos y posteriormente una actividad en el Spelman College de la ciudad de Atlanta.
Se impone esperar con cautela la decisión que tomará el panel. El Onceno Circuito en general no tiende a apoyar los argumentos de la defensa y es considerado como una corte sumamente conservadora.
En recientes intervenciones sobre el proceso de los Cinco el Presidente de la Asamblea Nacional del Poder Popular ha subrayado ante los medios cubanos que las violaciones en el caso de los Cinco comenzaron desde el propio día de la detención en 1998 «ya que nunca debió haber ningún juicio, ni siquiera debió haber habido una detención» y mencionó las violaciones de la 5ª, 6ª y 8ª Enmienda de la Constitución estadounidense.
«La lucha en el caso de los Cinco debe ir más allá de lograr un nuevo juicio y tiene que convertirse en una batalla por liberarlos inmediatamente, porque no sigan presos otro día más». Alarcón recordó las decisiones del Grupo de Trabajo sobre Detenciones Arbitrarias de la ONU que en mayo de este año, después de dos años de análisis del caso determinó que el proceso era ilegal, y cómo posteriormente en agosto 9 el panel de jueces de la Corte de Apelaciones de Atlanta anuló el fallo del Tribunal Federal de Miami. De esta manera ocho importantes expertos en dos foros diferentes han expresado su rechazo a las violaciones del proceso legal contra los Cinco y a las ilegales condenas que les fueron impuestas.
El Presidente de la Asamblea subrayó la necesidad de continuar luchando por convertir la causa de los Cinco en una campaña mundial contra esa injusticia, denunciar el amañado proceso y exigir su liberación inmediata.