Un estudiante universitario y un periodista cubanos integran el grupo internacional que viaja en un velero para participar en la Conferencia de las Naciones Unidas sobre el Clima.
Durante dos meses, 25 activistas de diferentes países surcarán el Atlántico con destino a Europa, para participar en la Conferencia de la Organización de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático, SB52. Entre la tripulación, navegarán dos cubanos.
Rubén Darío Herrera, de 22 años y fundador del capítulo cubano del movimiento Juventudes por el Clima (FFF), e Ismario Rodríguez, periodista del medio independiente Periodismo de Barrio fueron seleccionados entre casi 300 postulantes para participar en la travesía “Vela para la Acción Climática”.
La iniciativa busca que las voces ciudadanas puedan oírse en espacios de poder, y reclamar acciones inmediatas y efectivas ante la emergencia climática. El velero Regina Maris partió desde Cartagena de Indias, Colombia, el pasado 20 de febrero.
Los representantes de Cuba subirán a bordo el 26 de febrero, cuando el velero realice una parada en Jamaica.
Herrera quiere aprovechar la experiencia para conocer a otros jóvenes latinoamericanos que trabajan por una acción climática justa, sus experiencias para sobreponerse a los conflictos y dilemas climáticos y quizás replicar estas iniciativas en Cuba.
“Espero que me aporte conocimientos de políticas climáticas ligadas al accionar de la juventud y usar esto para impulsar proyectos aquí y… ¿quién sabe?… trabajar en conjunto con el gobierno en sus estrategias ambientales”, comentó el estudiante de lengua inglesa en la Universidad de La Habana.
Para Rodríguez, el mayor beneficio es conocer de primera mano cómo ocurren las negociaciones en Bonn, aunque también ve otras ventajas para el activismo en la isla caribeña.
“Después de suspendida la acción de FFF-Cuba en septiembre pasado, espero que permita revitalizar y darle visibilidad a un movimiento que genera desconfianzas y temores dentro de las autoridades, en un momento en que es tan necesario marchar y exigir medidas rápidas”, consideró el joven.
En septiembre de 2019, los integrantes del acápite cubano del movimiento internacional también conocido como Juventudes por el Clima, suspendieron la marcha convocada en apoyo a las manifestaciones globales por falta de la autorización que habían solicitado a las autoridades.
¿Por qué Cuba necesita del activismo ambiental?
La participación de representantes cubanos en proyectos como Vela para la Acción Climática tiene gran importancia para Darío Herrera, pues la isla ya está sufriendo los efectos de la crisis climática (subida del nivel del mar, erosión, riesgo para la biodiversidad, entre otros).
“Necesitamos a más jóvenes comprometidos con esta lucha: probablemente seamos la última generación que pueda tomar acción climática real y concreta. Cuba es un país en desarrollo así que una transformación de infraestructuras basadas en combustibles fósiles a cien por ciento energías renovables será un gran desafío”, aseguró.
El programa busca ser también una plataforma para compartir la visión de los más afectados por el cambio climático y debatir soluciones.
En el caso de Cuba, Herrera espera socializar las historias de las comunidades que han sido desplazadas a causa de la subida del nivel del mar, de las personas que han perdido sus hogares durante los últimos huracanes, las especies endémicas y la biodiversidad que corren riesgos a causa de la subida de la temperatura media global.
“Hay una iniciativa en progreso, la Tarea Vida -el plan estatal para el enfrentamiento al cambio climático-, que en mi opinión ha aportado beneficios pero también trajo nuevos problemas. Quisiera compartir esas experiencias y encontrar soluciones en conjunto”, opinó por su parte el periodista.
Motivaciones
Para Herrera, participar en la travesía no son unas vacaciones. “Hago esto porque creo que 2019 fue el año más ambicioso cuando se trata de la crisis climática (dejando de lado el desastre de la COP25). Estoy renunciando a un semestre de mi universidad porque realmente creo que el poder está en la gente”.
Y añadió que se siente “afortunado y agradecido de representar a un país donde aún hay mucho que hacer cuando se trata del medio ambiente, pero que bajo las difíciles circunstancias hacemos más que muchos otros”.
Para Rodríguez, participar en esta travesía también tiene sus costos. “Realmente fue un proceso complicado sobre todo porque la plaza que me otorgaron al principio era autofinanciada. Para un joven cubano es complicado tener los ingresos y cuentas bancarias necesarias para poder aplicar a un proyecto de este tipo”, contó.
En un segundo momento le brindaron la posibilidad de participar en el proyecto sin pagar el viaje en el velero lo que redujo los gastos.
“Es una tremenda oportunidad de aprender y sobre todo de entender que preocupa a otros jóvenes como yo”, dijo sobre sus motivaciones, quien también es director audiovisual de Periodismo de Barrio, un medio especializado en temas ambientales.
El periodista considera como un beneficio adicional tener “la oportunidad de documentar y registrar una iniciativa tan sui generis como esta, con mucho potencial para hacer notar las voces de activistas climáticos alrededor del mundo”.
Fuente: https://www.ipscuba.net/medio-ambiente/dos-jovenes-cubanos-navegaran-por-la-accion-climatica/