1. En un artículo del 24 de febrero(1) anuncié que la oposición venezolana se preparaba «para desconocer al árbitro y producir una situación de caos en el país.» Tres días después, las fuerzas antichavistas realizan una marcha tratando de aproximarse al lugar donde se llevaba a cabo la reunión del Grupo de los 15(2) sabiendo […]
1. En un artículo del 24 de febrero(1) anuncié que la oposición venezolana se preparaba «para desconocer al árbitro y producir una situación de caos en el país.» Tres días después, las fuerzas antichavistas realizan una marcha tratando de aproximarse al lugar donde se llevaba a cabo la reunión del Grupo de los 15(2) sabiendo que estaba expresamente prohibido hacerlo. La Guardia Nacional los detiene pero pequeños grupos de exaltados empiezan a quemar cauchos y a provocar a las fuerzas del orden. La jornada termina con un saldo de 2 muertos y 21 heridos.
2. Al día siguiente los medios nacionales e internacionales, en una orquestada campaña, abren sus primeras planas con grandes titulares adjudicando la culpa de lo ocurrido al gobierno y a la Guardia Nacional. La oposición no logró llevar a cabo una gran movilización como lo esperaba, pero sí logró las imágenes de caos y de violencia que necesitaba para alimentar esa campaña.
3. Los brotes de violencia continúan durante cinco días. El humo de la quema de cauchos y los gases lacrimógenos invaden las elegantes casas de los barrios del Este de Caracas.
El Consejo Nacional Electoral en nuevo compás de espera
4. En medio de esta situación, la tarde del 2 de marzo, Carrasquero, presidente del CNE (árbitro electoral venezolano), revela que la oposición sólo cuenta con 1 millón 832 mil 493 firmas seguras de las 2 millones 452 mil 179 requeridas y que 816 mil 017 deben ir a revisión de acuerdo al reglamento por cuanto existen dudas acerca de la autenticidad de dichas firmas por presentar idéntica caligrafía. Eso quiere decir que la oposición debe lograr que 619 mil 686 personas vuelvan a presentarse en una de las 2 mil 700 mesas que se distribuirán por el país, para hacer constancia de que ellas sí firmaron.
5. Poco tiempo después los observadores de la OEA y el Centro Carter se pronuncian sobre lo planteado por el CNE y la situación en el país.
6. Según ellos el proceso de recolección de firmas ha tenido suficientes mecanismos de control tales como: 1) el uso de papel de seguridad en las planillas; 2) la inclusión los números seriales de las planillas en las actas; 3) la identificación plena del ciudadano mediante la solicitud de firma y huella se identidad; 4) la verificación física de las planillas, incluso los nombres de los ciudadanos con los datos del registro electoral permanente; 5) el examen de actas para verificar que las planillas estén debidamente relacionadas en la misma; y finalmente, 6) la presencia de testigos de ambos lados y de personal entrenado y designado por el CNE.
7. Reconocen también la buena voluntad del CNE al haber acogido sus recomendaciones y manifiestan su apoyo a «los esfuerzos del poder electoral para buscar garantías necesarias para los ciudadanos» que quisieran ir a revisar sus firmas, «exhortándolos a continuar en esa dirección.»
8. Pero, al mismo tiempo, deciden hacer públicas sus discrepancias en cuanto a la decisión del ente arbitral de pasar a revisión las planillas «planas», es decir, aquellas en que los datos han sido escritos por una misma mano en toda una planilla. Usan como argumento lo observado en sus recorridos por las mesas durante el «firmazo». Recuerdan haber visto casos en los que la persona de la mesa se ofrecía para escribir los datos del firmante y luego éste ponía su firma y su huella.
9. Consideran por ello que hay que «partir de la buena fe del ciudadano como principio universal» y que, por lo tanto, no se debe cuestionar todas esas firmas como lo estableció el ente electoral, sino sólo aquellas en que alguna persona expresamente pidiera ser excluida.
10. Lo que estos observadores internacionales no saben, porque nunca se ha hecho público, es que la sexta condición y uno de los elementos claves para garantizar la voluntad de los firmantes: la presencia de testigos de ambas partes durante todo el proceso de recolección de firmas, no se cumplió a cabalidad, tanto por inexperiencia de los testigos chavistas que no fueron suficientemente vigilantes de las maniobras fraudulentas opositoras, como por la frecuente ausencia de testigos partidarios del proceso en los recorridos que hacían las planillas itinerantes, es decir, aquellas que salían fuera del área en que estaban instaladas las mesas para hacer un recorrido por el barrio buscando firmas.
11. Habría sido evidentemente más fácil explicar por qué se duda de las planillas llamadas «planas» si el Comando Ayacucho, responsable político del proceso por parte del chavismo, hubiese reconocido una vez terminada la recolección de firmas estas debilidades.
12. La ausencia o incompetencia de los testigos chavistas, la posibilidad de que la oposición hubiese mantenido en su poder las planillas físicas durante alrededor de un mes, y la tradición de fraude de los partidos tradicionales cuyas dimensiones han sido pocas veces vistas en la historia de otros países, hacen absolutamente comprensible y deseable que todas esas firmas sean revisadas.
13. Al decidir esto el CNE no está dudando de la «buena fe» de los firmantes, de lo que se duda, y con razón, no es de la buena fe de los firmantes sino de la buena fe de los operadores políticos de la oposición acostumbrados por décadas a «fabricar voluntades.»
14. No cabe duda que al no tener en cuenta estos elementos y revelar sus discrepancias con las recientes decisiones del CNE de llevar a reparo las planillas «planas», la OEA y el Centro Carter han dado elementos a la oposición para desconocer al CNE y seguir poniendo obstáculos al proceso de validación de las firmas.
15. Habría que preguntarse por qué la oposición pone tantos problemas para ir a una ratificación de las firmas de las planillas planas si ha dicho reiteradamente que tiene más de 3 millones de firmas? La única explicación plausible es que no cuenta con el número necesario de firmas.
16. Actualmente el CNE está entrampado porque aún no hay acuerdo entre todas las partes en cuanto a cómo realizar el proceso de revisión de las firmas (el reparo). Por otra parte, envalentonado con estas declaraciones, un sector de la oposición está buscando directamente que el Tribunal Supremo de Justicia, la máxima instancia en este terreno, se pronuncie contra la decisión del CNE y considere válidas las firmas de las planillas planas. Si esto llegara a suceder la oposición contaría con las firmas necesarias para ir a réferendum revocatorio contra el presidente de la República.
17. Hay quienes sostienen que la mejor forma de salir del actual impasse que vive el país es que Chávez acepte el desafío de medirse en las urnas. Aunque todo hace pensar que saldría como triunfador de esta contienda electoral, el problema es que nadie puede asegurar que una oposición, que ha pasado sin escrúpulos por encima de las reglas del juego institucional cuando conviene a sus intereses, vaya a aceptar el veredicto del pueblo en tal referéndum si éste se muestra favorable al actual mandatario.
La violencia se revierte contra la oposición
18. Negativas en cuanto al proceso revocatorio, las declaraciones de los observadores de la OEA y Centro Carter fueron muy positivas en cuanto a que condenaron la violencia desatada en Venezuela y justificaron la participación de la Guardia Nacional en la mantención del orden público.
19. Jennifer McCoy, representante del Cetro Carter, rechazó «cualquier solución violenta» e hizo un llamado «a los ciudadanos, a los medios, a la fuerza pública para evitar la violencia y proteger la vida humana de todos los venezolanos». Fernando Jaramillo, observador de la OEA, por su parte, dijo al respecto textualmente: «los miembros de la GN están recibiendo órdenes y cumpliendo una misión, […] es difícil pensar que la GN o las fuerzas militares no puedan combatir la anarquía en un país, y por eso también hacemos un llamado a los ciudadanos como lo hicimos aquí que, con todo respeto por su derecho a protestar, consagrado en la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela, obviamente lo hagan de una forma pacífica, eso es lo más importante.»
20. La estrategia opositora de provocar focos de violencia para amplificar y difundir masivamente una imagen de caos e ingobernabilidad en el país que prepare el terreno para una potencial injerencia extranjera, sufre así un duro golpe.
21. Pero no solo los observadores internacionales rechazan la violencia, más rechazo aún provoca ésta en los habitantes de los barrios acomodados. Sus propios espacios sufren las consecuencias. La quema de cauchos, destrucción de semáforos y todo tipo de señalización, el corte de árboles y vuelco de basura para quemarlos y hacer barricadas, los gases lacrimógenos, todo ello produce un ambiente de guerra y desvastación. Cientos de millones de bolívares costará reparar los daños causados por los «grupúsculos foquistas» azuzados por alcaldes y líderes políticos opositores. Encuestas realizadas luego de los hechos de violencia reflejan que más del 80 % de la población de la capital rechaza este tipo de enfrentamientos.(3)
Los derechos humanos en el centro de la nueva campaña mediática
22. Frente al obvio fracaso en el intento por ganar fuerzas internas para su proyecto violentista, el comando político opositor decide entonces hacer un viraje en la campaña: evitar actos de violencia, manifestar pacíficamente en las calles e iniciar una nueva ofensiva mediática.
23. Con imágenes de las víctimas de la violencia que ellos mismos desataron, sintomáticamente ocurridas en lugares donde existían cámaras de televisión, se monta una muy bien orquestada campaña mundial contra el actual gobierno venezolano -uno de los gobiernos más democráticos y menos represivos del mundo- acusándosele de violador de los derechos humanos.
24. La renuncia de Milos Alcalay, embajador en la ONU(4), a su cargo el 4 de marzo acusando a las autoridades venezolanas de abuso de los derechos humanos, servirá de alimento a esta campaña.
25. La imagen filmada por el canal televisado de noticias Globovisión el primer día de las manifestaciones violentas, el 27 de febrero, de una mujer joven arrojada al suelo por la Guardia Nacional luego de haber marchando desarmada pero con paso firme hacia las primeras líneas de defensa de este cuerpo de orden interno, calza como un anillo al dedo a esos objetivos.
26. Lo que esos medios no transmiten es que la joven mujer golpeada es una karateca -basta mirar con atención su forma de andar y su forma de caer al suelo para darse cuenta de su entrenamiento en estas artes marciales- que recibió previamente instrucciones para avanzar y provocar a la Guardia Nacional. ¿Por qué Globovisión está precisamente a esa hora en ese lugar? ¿Por qué edita la imagen trasmitida inicialmente cortando aquella parte en que ella insulta y escupe en la cara a esos militares? ¿Por qué no dice que quienes respondieron a sus provocaciones fueron inexpertas mujeres de uniforme que cometieron el error de no controlarse frente a semejante provocación?
27. ¿Por qué no informan que uno de los muertos fue víctima de disparos de un arma casera (la llamada metra) usada por los provocadores a sueldo de la autoproclamada «oposición democrática?
28. ¿Por qué no dicen que 6 miembros de la Guardia Nacional fueron heridos de bala, uno en el rostro, otro en las piernas, tratando de preservar el orden en Venezuela?
29. ¿Por qué se acusa al gobierno de la detención de varios activistas políticos y no se informa que Carlos Melo, dirigente del partido Causa R, fue detenido cuando portaba dos fusiles automáticos livianos, conocidos como FAL, arma de guerra de exclusivo uso militar desechada ya por los ejércitos del primer mundo porque un cartucho de ese calibre es capaz de partir una persona en dos?
30. ¿Por qué no se difunde que se detectó mediante el uso de la técnica del ATD la presencia de pólvora en las manos de dos policías de Baruta (policía municipal de un alcalde opositor al gobierno de Chávez), testificándose así que fueron miembros de este cuerpo policial y no de la Guardia Nacional los que estuvieron manipulado armas de fuego contra los manifestantes?
31. ¿Por qué no se proyectan las imágenes del allanamiento a una casa particular donde se descubren uniformes militares y diferentes tipos de armas?
32. ¿Por qué silencia las imágenes de evidente brutalidad con la que provocadores a sueldo -así los testifican varios detenidos- destruyeron las sedes del Movimiento Quinta República y del Comando Ayacucho, ubicadas en la Avenida Libertador y Los Caobos respectivamente?
33. ¿Cómo pueden justificar que el propio alcalde antichavista de Chacao, municipio residencial de Caracas, aparezca tirando piedras en la avenida Libertador y cargando un arma de 9 mm en una marcha pacífica, cuando está prohibido nacional e internacionalmente asistir a las marchas con armas de fuego? ¿Cómo se explica que este personaje no haya tomado las medidas que le competen para impedir que la simbólica plaza Altamira -plaza en que suele reunirse la oposición- fuera arrasada destruyéndose avisos, semáforos, rejas, cercas?
34. ¿Por qué los medios no se han hecho eco de las declaraciones de Chávez y otros miembros de su gobierno donde han manifestado su disposición a investigar cualquier exceso en el uso de la fuerza pública contra los manifestantes?
35. ¿Por qué no se ha destacado que el presidente de la República y el ministro de Comunicaciones se han expresado públicamente valorando muy positivamente la importante movilización pacífica realizada por la derecha el viernes 5 de marzo donde tanto la Policía Metropolitana (compuesta por una mayoría antichavistas) como la Guardia Nacional se mantuvieron en sus respectivos puestos sin verse obligadas a intervenir?
36. Respuestas a estas preguntas debería tener la comunidad internacional antes de pronunciarse acerca de la situación de los derechos humanos en Venezuela. Es desolador ver cómo esta campaña está prendiendo en muchos países. A nuestro entender esto refleja el escaso distanciamiento crítico que connotados políticos y personalidades del mundo tienen frente a las informaciones difundidas por los medios. Cuesta imaginar que muchos de ellos hayan pasado tan fácilmente a formar parte del «rebaño perplejo» domesticado por los medios del que habla Chomsky en uno de sus libros.
14 de marzo 2004
Notas
1. Venezuela: la oposición se prepara para desconocer al árbitro y producir una situación de caos, http://www.rebelion.org/harnecker.htm , 24 febrero 2004.
2. Este grupo reúne a 19 países del Sur.
3. La encuesta fue ralizada por el North American Opinión Research, INC. Flash Gran Caracas, 1-2 marzo 2004. El 89 % de los encuestados no quiere que le bloqueen las vías de comunicación de residencia; un 59% está de acuerdo en uso de la FA.
4. Este señor apoyó a los golpistas en las jornadas del 11 y 12 de abril de 2002 y sólo por la benevolencia de Chávez se mantuvo en funciones.