1. ¿Quién inventó la lucha de clases entre opresores y oprimidos? Nadie; lo que hizo Marx fue explicarla, analizar su importancia en la historia y demostrar que es determinante para entender los cambios sociales. Señaló que ningún cambio político, económico, social, en el mundo se puede dar sin la presencia determinante de los intereses de […]
1. ¿Quién inventó la lucha de clases entre opresores y oprimidos? Nadie; lo que hizo Marx fue explicarla, analizar su importancia en la historia y demostrar que es determinante para entender los cambios sociales. Señaló que ningún cambio político, económico, social, en el mundo se puede dar sin la presencia determinante de los intereses de clase: siempre y en todas partes se registra una minoría adueñándose y defendiendo el poder conquistado por la fuerza, y una inmensa mayoría de la población luchando contra ese poder que los explota, oprime, manipula y no los deja vivir en paz. La lucha de clases entre la clase dominante y dominada es irreconciliable, aunque en el interior de cada clase sólo se manifieste contradicciones conciliables.
2. El imperialismo de los EEUU ha difundido en el mundo su idea de «choque de civilizaciones» para eliminar el concepto de lucha de clases; quiere demostrar que la «modernidad burguesa» -ahora dominante en el mundo- es la «civilización genuina y humana» y que quienes no quieren ingresar al modelo «civilizatorio», o lo rechazan, es porque pertenecen a la «barbarie», es decir, a algo parecido al salvajismo. Pero desde aquí hemos respondido: ¿Es civilización mantener al 80 por ciento de la humanidad en la miseria y opresión? ¿Así se llama bombardear e invadir países y pueblos? ¿Es civilizado despreciar de manera racista a los pueblos africanos, asiáticos, americanos por querer conservar la vieja cultura que les dio mejor vida que la «civilización»?
3. El «civilizado» Obama, gobierno pelele (como todos) de los multimillonarios imperialistas de la Reserva Federal (FED) -que creímos que por ser negro iba a acabar con las discriminación racial, ha gobernado como yanqui blanco- está preocupado porque no marchó en París junto a otros líderes asesinos como el francés Hollande, la alemana Merkel, el israelí, Netanyahu y otros líderes autores de genocidios sin fin. ¿Puede ignorarse acaso el colonialismo francés en Argelia y África, la segunda guerra impulsada por la Alemania de Hitler o las masacres de Israel contra el pueblo palestino? Las grandes marchas contra el atentado al periódico derechista fascista «Charlie» fueron encabezadas los fabricantes y compradores de armas del mundo.
4. Todos los gobiernos, los empresarios y medios de información han lanzado el grito al cielo condenando a los terroristas islámicos como si no pertenecieran al mismo pueblo francés desde hace muchas décadas, incluso siglos. ¿No son acaso -por sus orígenes, si pobreza y el color de su piel, los más miserables, despreciados, vigilados, discriminados, encarcelados y asesinados de siempre? ¿Acaso no ha pasado o pasa lo mismo con los negros de EEUU, España, Inglaterra y otros países donde esos miserables de origen esclavo se les trata de igual manera? Por el contrario, el periodicucho fascista (Charlie) ha aprovechado su enorme publicidad para publicar «tres millones de ejemplares». ¿De qué viven los medios si no son mantenidos por el imperio de EEUU?
5. En mí siempre ha sido nítida la lucha de clases internacional. En las décadas de los 50, 60, 70, cuando aún existía el llamado «bloque socialista» (aunque de socialista nada tuvo) representaba algo así como un contrapeso que los yanquis tomaban en cuenta. Nunca se construyó ningún socialismo, pero representaba una competencia y presión para que el imperio no lanzara todas sus garras contra los países sometidos. El desplome de la URSS, China y el «bloque» hizo que los yanquis a partir de los 90 se sientan los únicos amos del mundo «autorizados» para hacer lo que les plazca. Confieso que desde la polémica chino-soviética y la posterior muerte de Mao, obtuve plena conciencia que en Rusia sólo hubo capitalismo de Estado y en China a partir de 1977.
6. El imperialismo mundial -representado por todos los gobiernos apuntalados por EEUU- ha aprovechado este golpe a la prensa derechista para manifestar su fuerza en las calles y provocar miedo entre los luchadores sociales en todo el globo. Están rearmando a sus fuerzas militares, están produciendo millones de armas y han continuado construyendo cercos contra países y regiones clasificándolos como «Eje del mal». En su mira inmediata y directa está Siria, Irán, Irak, China y algún otro país que busque alguna alianza. La competencia en los mercados representada por los BRICS, la guerra del petróleo, así como otras pequeñas organizaciones antimperialistas que han surgido en Suramérica, le causa dolor de cabeza al imperio.
7. ¿De qué pueden quejarse un gobierno o un Estado si ellos son la violencia encarnada? Desde que nacieron inventaron la violencia para someter al 90 por ciento de la población que protestaba; ¿puede entonces explicarse cómo puede dominar un Estado absolutamente minoritario sin hacer uso de la violencia total? A los trabajadores nunca se les puede acusar de violencia porque ellos lo único que han hecho en la historia del universo es defenderse y protestar contra sus miserables condiciones de vida. En México los padres de familia de los 43 muchachos desaparecidos han buscado revisar los cuarteles militares y de policías; los reciben con alambrados, rejas, perros, gases lacrimógenos; ¿Qué deben hacer? Ir a lloriquear a su casa o defenderse con dignidad.
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