Estados Unidos anunció el lunes, a nueve días de la salida del poder del presidente Donald Trump, que volvió a incluir a Cuba en la lista negra de «Estados patrocinadores del terrorismo», de la cual había sido retirada por Barack Obama en 2015.
«Con esta medida, volveremos a responsabilizar al gobierno de Cuba y enviaremos un mensaje claro: el régimen de Castro debe poner fin a su apoyo al terrorismo internacional y la subversión de la justicia estadounidense», dijo el jefe de la diplomacia estadounidense, Mike Pompeo, en un comunicado.
El secretario de Estado, Mike Pompeo, anunció la decisión citando en particular que Cuba sigue albergando a refugiados estadounidenses y apoyando al líder venezolano Nicolás Maduro.
Es uno más de los movimientos de último minuto que está haciendo la administración Trump antes de que Biden asuma el cargo el 20 de enero.
Sacar a Cuba de la lista negra fue uno de los principales logros de política exterior del expresidente Barack Obama en su búsqueda de mejores relaciones con la nación del Caribe, un esfuerzo respaldado por Biden como su vicepresidente. Los lazos estaban prácticamente congelados desde de que Fidel Castro asumió el poder en 1959.
La decisión de la lista de terrorismo sigue a meses de revisión legal y algunos expertos del gobierno cuestionaron si estaba justificada, dijo una fuente a Reuters.
Se necesitarían largas deliberaciones legales para que el presidente electo Joe Biden pueda revocar la designación, según esa fuente
El republicano Trump ha tomado medidas drásticas contra Cuba desde su llegada al poder en 2017, endureciendo las restricciones a los viajes y a las remesas desde Estados Unidos e imponiendo sanciones a los envíos de petróleo venezolano a la isla.
La política de línea dura hacia Cuba de Trump fue popular entre la gran población cubano-americana del sur de la Florida, ayudándole a ganar el estado en noviembre, aunque perdió las elecciones contra el demócrata Biden, que fue el vicepresidente de Obama.
Biden dijo durante la campaña electoral que revertiría las políticas de Trump sobre Cuba que «han infligido daño al pueblo cubano y no han hecho nada para promover la democracia y los derechos humanos».
Declaración del Ministerio de Relaciones Exteriores de Cuba
El Ministerio de Relaciones Exteriores condena en los términos más firmes y absolutos la fraudulenta calificación de Cuba como Estado patrocinador del terrorismo, anunciada por el gobierno de los Estados Unidos en acto cínico e hipócrita.
Desde hace meses, se viene especulando sobre la posibilidad de incluir a Cuba en la lista unilateral del Departamento de Estado que califica a países, sin mandato o legitimidad alguna, carente de motivación genuina, referida al terrorismo y sus secuelas, y como instrumento de difamación para aplicar medidas económicas coercitivas contra naciones que se resistan a doblegarse a los caprichos del imperialismo estadounidense.
El anuncio formulado por el Secretario de Estado Michael Pompeo constituye un acto soberbio de un gobierno desprestigiado, deshonesto y en bancarrota moral. Se conoce, sin lugar a dudas, que la verdadera motivación de esta acción es imponer obstáculos adicionales a cualquier perspectiva de recuperación en las relaciones bilaterales entre Cuba y los Estados Unidos.
Cuba no es un Estado patrocinador del terrorismo, verdad reconocida por todos. La política oficial y conocida, y la conducta intachable de nuestro país, es el rechazo al terrorismo en todas sus formas y manifestaciones, en particular el terrorismo de Estado, por quienquiera, contra quienquiera y dondequiera que se cometa.
Cuba es un
estado víctima del terrorismo y nuestra población lo ha sufrido en
carne propia, al precio de 3 478 víctimas mortales y 2 099 personas con
discapacidad, por actos cometidos por el gobierno de los Estados Unidos o
perpetrados y patrocinados desde territorio de ese país con la
tolerancia de las autoridades oficiales. Los cubanos repudiamos con
desprecio toda maniobra dirigida a manipular un tema tan sensible, para
groseros propósitos de oportunismo político.
La Habana, 11 de enero de 2021