Recomiendo:
0

Israel-USA: Terrorismo de estado, Acumulación originaria de Capital e Imperialismo

Fuentes: Rebelión

Esta es la noticia que ha conmovido e indignado a una gran parte de los seres humanos de este planeta: «El estado de Israel ataca los barcos que intentaban llevar 10 toneladas de alimentos a la franja de Gaza y mata a 9 activistas de esta misión de ayuda humanitaria». Una vez más, el estado […]

Esta es la noticia que ha conmovido e indignado a una gran parte de los seres humanos de este planeta:

«El estado de Israel ataca los barcos que intentaban llevar 10 toneladas de alimentos a la franja de Gaza y mata a 9 activistas de esta misión de ayuda humanitaria».

Una vez más, el estado de Israel, (con la complicidad y la ayuda de USA), enseña al mundo, que su política exterior es la del terrorismo de Estado.(1) ¿Cómo podría ser diferente si USA – ahora bajo la administración de Barak Obama – repetidamente, ha sido incapaz de condenar al gobierno de Israel por cometer este y otros crímenes de guerra contra la humanidad? Y por si fuera poco, Obama ha afirmado cínicamente que su gobierno trabajaría «para entender las circunstancias que rodean a la tragedia». Ni una sola palabra de condena al gobierno de Israel y mucho menos un intento de punición real a sus dirigentes criminales.

Mas bien, todo lo contrario: como ha sido probado y comprobado, USA (con el apoyo de la mayoría de sus senadores y congresistas conectados al complejo industrial militar y a los lobbies israelíes) ha sido el mayor responsable por legitimar la impunidad de Israel, pues siempre ha tratado de boicotear (y hasta ahora ha logrado) cualquier iniciativa para responsabilizar a Israel por sus atrocidades en contra de otros pueblos y otras naciones.

Entonces, ¿cómo esperar ahora una condena de la administración de Obama cuando USA ha sido el país que más ha utilizado el terrorismo de estado en su política en contra de otros pueblos y otras civilizaciones. Basta con observar las guerras de USA en contra de los pueblos de Irak, de Afganistán y Pakistán.

Así ¿qué esperan el pueblo de USA (el que se auto-proclama defensor de la vida y de los derechos humanos), sus instituciones, sus sindicatos y sus universidades para salir de su inacción y colectivamente (junto a pueblos de otros países) parar la complicidad, y responsabilizar al gobierno de Barak Obama, al gobierno de Benjamín Netanyahu y a la AIPAC (American Israel Public Affairs Committee, Comité de Asuntos Públicos Estados Unidos-Israel) por más una agresión en el Oriente Próximo?

¿Qué esperamos de la ONU y de su Consejo de Seguridad (que sabemos que están controlados por USA) cuando les pedimos buscar criterios y mecanismos para punir los crímenes de guerra que el gobierno de Israel ha perpetrado contra los derechos humanos en nombre de su seguridad? Una seguridad basada en la posesión y control de (por lo menos) 150 ojivas nucleares(2); una seguridad que trata de expandir su racismo manifiesto (pero nunca declarado) sobre los Palestinos y el Oriente Medio, estableciendo un sistema de apartheid (3) tal como el que fue usado por Sudáfrica contra Nelson Mandela y su población negra. Es esa política racista que explica la reciente noticia del periódico The Guardian donde se revela el secreto de que el Estado de Israel, vía Simon Peres (en aquel entonces, Ministro de la Defensa, hoy Presidente de Israel) ofreció, en 1975, vender al gobierno de Sudáfrica. armas nucleares para ser usadas contra la población negra (4).

¿Qué esperan los políticos de las naciones (dichas civilizadas) para salir de su cobardía y condenar los crímenes de guerra del Estado de Israel en el Oriente Medio? ¿Cómo es posible que este bando de políticos y autoridades (hipócritas), pidan sanciones en contra de Irán (en la búsqueda de lograr el uso de la energía nuclear para fines pacíficos), mientras pone una tapa ojo para fingir que no ve el terrorismo de estado de Israel y los Estados Unidos?

En este momento histórico, se hace necesario e imprescindible, no solamente mostrar nuestra indignación moral, sino salir de la inacción y participar de la protesta y resistencia política para condenar el bloqueo a Gaza, y condenar el bárbaro ataque de Israel a los activistas en aguas internacionales.

Por otro lado, también se hace necesario e imprescindible que salgamos de la enajenación y busquemos la comprensión que nos proporciona la Economía Política para esclarecer y articular el cómo y el porqué el proceso de crisis del sistema capitalista imperialista nos conduce irremediablemente al establecimiento del terrorismo de estado (o fascista o nazista).

Marx, en El Capital se nos ha explicado cómo se estableció el proceso histórico de la acumulación originaria de capital, a través de la cual, los productores directos fueron enajenados (a través de la violencia y de la guerra), de sus medios de producción y de su trabajo directo, estableciéndose en el mercado como trabajadores asalariados: una condición esencial para la constitución del sistema capitalista, de su clase dominante y de su Estado burgués naciente(5).

Así, para perpetuarse en el poder, tenían que continuar apropiándose de la riqueza humana no solamente a través de los nuevos métodos (extracción de plusvalor/ganancia) de la acumulación ampliada de Capital; sino que también a través de la apropiación de la riqueza ajena vía la acumulación originaria del Capital.

Como se sabe, más tarde, Lenin enriqueció y profundizó la explicación marxista enseñando cómo los países capitalistas más desarrollados avanzaban hacia una etapa denominada Imperialismo por su necesidad histórica de obtener materias primas baratas y nuevos consumidores para la realización de sus mercancías en los mercados externos. Así, el Imperialismo ha estado obligado a hacer el uso constante de la violencia y de la guerra para continuar asegurando la reproducción del Capital en una escala ampliada con la subsecuente ampliación de las tasas de ganancias y su largo dominio sobre las demás clases sociales, grupos humanos, naciones, etc.

En otras palabras, la acumulación capitalista imperialista ha usado sistemáticamente la invasión y la conquista (fascista y nazista) de los países mas débiles (Asia, Latinoamérica y África) para lograr sus objetivos; pero lo anterior no ha excluido del modelo capitalista la continuidad de la acumulación primitiva de Capital por parte de los países avanzados siempre y cuando sea necesario.

Esa es, en pinceladas rápidas, cómo podríamos caracterizar la situación y la posición actual del Imperialismo de USA y de Israel en contra del Oriente Próximo, en contraposición a los intereses de los pueblos y seres humanos de Palestina, Afganistán y Pakistán. Por detrás del discurso defensivo (la coartada de que Israel necesita asegurar su seguridad nacional atacando a los pueblos vecinos), se esconde la política terrorista de invasión y colonización sistemática de Israel sobre los territorios palestinos. En pocas palabras, el estado de Israel invade y expropia la tierra, el agua, y los bienes materiales de los palestinos, apropiándose de esa riqueza social, para la continuidad de su acumulación y la centralización de Capital.

Así la guerra, los asentamientos, el pillaje y el robo perpetrado por la geopolítica de expansión territorial de Israel y USA en contra de los pueblos de Oriente Medio se constituye como más una onda de expansión del proceso de la acumulación originaria combinada con la acumulación imperialista de Capital,

En resumen, la necesidad de expresar públicamente nuestra indignación moral y nuestra protesta política en contra del terrorismo de Estado de Israel y USA, se constituye, hoy y siempre, en acciones de protesta y de resistencia ineludibles; pero también lo es, la urgente necesidad de tomar consciencia de que no habrá una solución permanente, integral y definitiva para el problema del terrorismo de Estado de USA e Israel y sus crímenes contra la humanidad, sin la transformación radical del modo de producción y reproducción capitalista en un nuevo y superior modo de producción y reproducción de la sociedad humana; un modo opuesto y contrario al sistema capitalista vigente.

1) Ver el artículo «EEUU es un Estado terrorista, según su propia definición»: Noam Chomsky habla en Nueva York sobre el poder de Washington y sus consecuencias mundiales por David Brooks y Jim Cason
 para el periódico La Jornada, 18/11/04

2) Ver el artículo «Jimmy Carter rompe el silencio: Israel tiene por lo menos 150 armas nucleares» por Aporrea.org del 26/05/08 (http://www.aporrea.org/internacionales/n114675.html)

3) Ver «Jimmy Carter: Israel’s Apartheid.» Video de la entrevista a MSNBC a propósito de su nuevo libro sobre la segregación racial de los judíos sobre los palestinos:

http://www.in.com/videos/watchvideo-jimmy-carter-israels-apartheid-4979639.html

4) Ver «Israel ofreció vender armas nucleares a Sudáfrica» Documentos secretos de la era del apartheid: la primera evidencia oficial de las armas nucleares israelíes por

Chris McGreal para The Guardian

(http://www.rebelion.org/noticia.php?id=106528)

(5) Ver Karl Marx. El capital: crítica de la economía política. Edición y traducción de Manuel Sacristán. Barcelona: Grijalbo, 1976.

6) Ver Vladimir I. Lenin. El Imperialismo, Fase Superior del Capitalismo. Buenos Aires: Quadrata, 2004.

Rebelión ha publicado este artículo con el permiso del autor mediante una licencia de Creative Commons, respetando su libertad para publicarlo en otras fuentes.