En la presentación que el escritor venezolano Edgar Borges realizó, en Oviedo, de su nuevo libro ¿Quién mató al doble de Edgar Allan Poe?, declaró que «el mercado de consumo está llegando a extremos de reducir al ser humano a la nada, a la simple y ridícula posición de ser algo menos que un humano: […]
En la presentación que el escritor venezolano Edgar Borges realizó, en Oviedo, de su nuevo libro ¿Quién mató al doble de Edgar Allan Poe?, declaró que «el mercado de consumo está llegando a extremos de reducir al ser humano a la nada, a la simple y ridícula posición de ser algo menos que un humano: un don nadie». El narrador, más que hablar de literatura, se mostró duramente crítico con el papel de muchos escritores en el panorama cultural internacional. Al respecto abogó por «el despertar de una nueva consciencia intelectual que cuestione la política de idiotez que impone la industria».
Edgar Borges (Caracas 1966) señaló que buena parte de los escritores han «aceptado el papel de modelos mediáticos de una industria que pide libros mediocres, libros de consuelo, libros de entretenimiento ligero, como si ahora ser escritor fuera sinónimo de ser domesticador de pueblos». El acto estuvo frecuentado por un grupo importante de lectores que se dieron cita para escuchar las palabras del escritor latinoamericano. «¿Quién mató al doble de Edgar Allan Poe?» es un viaje de ficción al tormento interior del celebrado autor estadounidense.
Edgar Borges decidió obviar, en su declaración, la importancia que considera tiene la ficción y la propia trama de su libro, para centrarse en el tema político, pues piensa que «vivimos un momento estelar para la lucha humana. O aceptamos el papel de idiotas o nos rebelamos. Sería necesario, más que utópico, lograr una rebelión de poetas». Como conclusión, Borges indicó que todo cuanto ocurre se debe al pacto milenario que han establecido iglesia y capitalismo, pues «la iglesia-según el escritor venezolano-y el capitalismo están crucificando a los pueblos del mundo».