El gobierno de Lenín Moreno, aprovechando vilmente la pandemia profundizó la crisis, a través, de políticas económicas, aprobación de leyes y decretos que canalizaron las imposiciones del FMI, las alianzas para gobernar con los sectores empresariales y financieros, así como, la protección a los corruptos y evasores de impuestos.
La Confederación de Nacionalidades Indígenas del Ecuador, CONAIE, al cumplirse el primer aniversario del Levantamiento Indígena Popular y del Paro Nacional de octubre de 2019, en conmemoración de todos los luchadores sociales, las víctimas de la violencia estatal entre heridos, mutilados y familiares de fallecidos, declara a OCTUBRE COMO “MES DE LA RESISTENCIA INDÍGENA Y POPULAR”, ratifica el compromiso por la exigencia de verdad, justicia y reparación.
Recordamos cómo el movimiento indígena y el pueblo ecuatoriano en su conjunto se movilizó en un solo puño, hicimos temblar al poder, guiamos con claridad la agenda de resistencia y demandas para enfrentar las leyes y decretos que afectaban a la sociedad ecuatoriana, medidas como el decreto 883 que hubieran deteriorado las condiciones de vida y existencia de los sectores populares más vulnerables del país. Sin embargo, el gobierno de Lenín Moreno, aprovechando vilmente la pandemia profundizó la crisis, a través, de políticas económicas, aprobación de leyes y decretos que canalizaron las imposiciones del FMI, las alianzas para gobernar con los sectores empresariales y financieros, así como, la protección a los corruptos y evasores de impuestos, creó una pandemia de corrupción, sobreprecios y ajustes neoliberales.
Desde marzo, mientras en las comunas, comunidades, pueblos, nacionalidades y barrios, ante el abandono del Estado, enfrentamos la pandemia desde la solidaridad, el gobierno y la Asamblea Nacional, a pretexto del confinamiento y la emergencia sanitaria, dieron golpes certeros al presupuesto de salud, educación y el bolsillo de la clase trabajadora y campesinos, ahondado la inestabilidad social, impulsando privatizaciones, precarización, flexibilización laboral, desempleo, despidos masivos, explotación laboral y despojo de nuestros recursos y territorios. El gobierno de Moreno y sus ministros son los responsables de esta crisis multidimensional, solo en los últimos meses, la aprobación de la mal llamada Ley de Apoyo Humanitario y la ley de Finanzas Públicas, antipopulares y antiobreras, demuestran la incapacidad e indolencia del gobierno.
Desde el año anterior el movimiento indígena y más de 500 organizaciones a nivel nacional presentamos propuestas fruto del diálogo y participación colectiva, es así que en julio 2020 desde el Parlamento de los Pueblos se presentó la propuesta denominada Minga por la Vida con alternativas reales para enfrentar la crisis, pero, el gobierno nuevamente hizo caso omiso, es por ello que nos queda ratificar la unidad de los sectores indígenas y populares, armando una plataforma de lucha fortalecida con una enorme conciencia sobre las demandas y la necesidad de la movilización permanente para exigir respeto a nuestros derechos vulnerados.
Las medidas económicas que motivaron octubre 2019, lo relacionado al decreto 883, siguen vigentes y se han agudizado, en julio 2020 finalmente el gobierno eliminó el subsidio a los combustibles con el sistema de bandas de precios para la gasolina extra, ecopaís y diésel. El Decreto 1158, firmado este 25 de septiembre, libera la importación de combustibles beneficiando a los monopolios del negocio de hidrocarburos y privatizando este sector estratégico, sin que represente aporte a las finanzas públicas, estas acciones ejecutadas por René Ortiz, Ministro de Energía y Recursos, y Richard Martínez, Ministro de Economía, demuestran cómo el gobierno nacional engañó al país al no cumplir las demandas y lo planteado en la mesa de diálogo televisado del año pasado. Por todos estos antecedentes insistimos en el rechazo a las medidas económicas que afecten al pueblo ecuatoriano, si el gobierno mantiene esta necedad los sectores organizados seguiremos en resistencia permanente como arma histórica de transformación, movilizados, ahora hay más sectores afectados, indignación y malestar social, por toda la profundización de la crisis, si hay otro octubre será más fuerte.
No quedará impune la política de violencia, represión, intimidación, persecución y criminalización con la que actuó el gobierno de Lenín Moreno y el abuso de autoridad ordenando la represión atroz sobre el pueblo, con responsabilidad directa de los ministros de Gobierno, María Paula Romo; y Defensa, Oswaldo Jarrín, por cometer delitos de lesa humanidad contra indígenas, campesinos, trabajadores, estudiantes, mujeres, niños y mayores.
Nuestra lucha va más allá de los procesos electorales, la unidad del movimiento indígena se ratifica en los procesos organizativos de nuestra estructura y las bases organizadas para viabilizar procesos y tomar decisiones colectivas, el paro de octubre 2019 es la bandera de lucha que le pertenece al pueblo, así convocamos a mantener la unidad de los sectores sociales por la defensa de nuestros territorios y derechos, la CONAIE seguirá en la resistencia inclaudicable.
En el marco del primer aniversario del Levantamiento de Octubre realizaremos varios eventos conmemorativos, así, los días 09 y 10 de octubre en la comunidad San Isidro, Pujilí (Cotopaxi) se llevará a cabo el evento conmemorativo “Octubre Rebelde» Inocencio Tucumbi, en 2 jornadas de solidaridad, lucha y conciencia por nuestros compañeros mutilados y asesinados por la violencia estatal. Junto a la Asociación de Víctimas del Paro Nacional “Inocencio Tucumbi”, el día lunes 12 de octubre en el Parque El Arbolito, realizaremos una ceremonia, concentración y movilización pacífica hacia la Fiscalía General del Estado, donde presentaremos una demanda contra el Estado por las graves vulneraciones a los derechos humanos producto de la brutal represión hacia el pueblo, en la exigencia de verdad, justicia y reparación.
¡Octubre rebelde sigue presente!
¡La lucha va porque va!
Por el Consejo de Gobierno, Jaime Vargas -PRESIDENTE DE LA CONAIE