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Discurso del presidente del Partido Comunista, Guillermo Teillier, con motivo del 95º aniversario de su fundación

«Saludamos la creciente intensidad de las luchas de los trabajadores»

Fuentes: Rebelión

Compañero embajador de Cuba. Representantes de las embajadas de Rusia, China, Vietnam. Compañero Primer Secretario del Partido Comunista de Bolivia. Compañero representante del Partido Comunista Argentino. Diputados y senadores que nos acompañan. Dirigentes de partidos del Juntos Podemos Más y de la Concertación presentes. Estimados compañeros y compañeras dirigentes sindicales y sociales Compañeras y compañeros: […]


Compañero embajador de Cuba. Representantes de las embajadas de Rusia, China, Vietnam. Compañero Primer Secretario del Partido Comunista de Bolivia. Compañero representante del Partido Comunista Argentino. Diputados y senadores que nos acompañan. Dirigentes de partidos del Juntos Podemos Más y de la Concertación presentes.

Estimados compañeros y compañeras dirigentes sindicales y sociales

Compañeras y compañeros:

Nos juntamos en este magnifico acto en el Teatro Caupolicán, con la presencia de miles de nuestros militantes, adherentes y amigas y amigos, acuciados por una situación política expectante respecto de la cual tenemos la obligación de actuar con unidad y con un alto grado de decisión.

Celebramos los 95 años de la fundación de nuestro partido. Luis Emilio Recabarren, Gladys Marín y tantos otros que han forjado nuestro camino de lucha, nos incitan a seguir adelante en la senda trazada en nuestro XXIII Congreso Nacional, en el transcurso del cual nos propusimos abrir camino a una alternativa al neoliberalismo, con vistas a conquistar un gobierno democrático, nacional y de justicia social.

Aquí estamos de nuevo, dispuestos y a la ofensiva, decididos a entregar lo mejor de cada uno de nosotros junto al pueblo, que espera mucho más de nosotros.

No habrá mayores cambios en la situación política de nuestro país si no nos decidimos a incidir con fuerza en los acontecimientos sociales y políticos, que demuestran que el sistema hace agua por todos lados.

En la búsqueda de una solución, al fracaso que están significando las políticas económicas ante las expectativas de solución a sus problemas que tienen millones de chilenos, surgen contradicciones entre los dos bandos que se disputan el poder, casi sin contrapeso. Disputa de poder entre la derecha y la concertación que se agudizará aún más con la cercanía de los próximos eventos electorales.

Es una disputa en los marcos de la aplicación de un modelo neoliberal, que se demuestra cada vez más ineficaz en la solución de los problemas de la mayoría de los chilenos y que no llevará a cambios profundos, pues se expresa mediante una transición a la democracia restringida, que no es más que la suma de privilegios económicos y de todo orden, para unos pocos.

Privilegios para explotar al máximo a los trabajadores, privilegios para llevarse enormes utilidades fuera del país, a costa del agotamiento de nuestras riquezas básicas, privilegios para lucrar con los fondos previsionales, con la salud, con la educación, con el transporte metropolitano, privilegios para despojar al pueblo mapuche de sus derechos.

No habrá soluciones profundas en Chile si se mantiene la situación de exclusión de la mayoría y de privilegios de las grandes transnacionales, por sobre los derechos de los trabajadores y del pueblo.

No es posible seguir aceptando que las transnacionales sigan sacando del país más de 26 mil millones de dólares en utilidades e intereses al año, esta suma equivale al PIB de Bolivia y Paraguay juntos y alcanzaría para duplicar los sueldos y salarios de 4 millones y medio de trabajadores chilenos, en un año, a un promedio de 350 mil pesos mensuales.

Las transnacionales privilegiadas son las del cobre, las que sumados los años 2006 y 2007, se llevarán 24 mil millones de dólares en utilidades

Ya no es sostenible ni desde el punto de vista social, ni económico, ni moral, una política de Estado basada principalmente en el despojo de nuestras riquezas básicas, en especial de nuestro cobre, mientras 80 mil trabajadores mineros del subcontrato son explotados de manera irracional y muchas zonas de nuestro país se mantienen en una situación de atraso profundo y millones de los habitantes de nuestro país no tienen garantizados sus derechos sociales esenciales.

Exigimos un nuevo trato para la explotación de nuestra riqueza minera, que privilegie el derecho de nuestro pueblo a gozar plenamente de su usufructo, tal cual lo plantea como un derecho humano esencial, la carta de las Naciones Unidas.

Llamamos a levantar un gran acuerdo nacional que ponga en el centro la recuperación del cobre para los chilenos, como pilar fundamental para nuestro desarrollo como nación.

Desde el mismo punto de vista, tampoco es sostenible el deterioro creciente de los ingresos del conjunto de los trabajadores. El gobierno y los sectores del gran empresariado se ufanan del crecimiento del PIB. Crecimiento loable, pero como crece? El PIB es la suma global de las remuneraciones de los trabajadores más las ganancias globales de las empresas. Hasta el año 2003 los salarios constituían el 43% del PIB, este porcentaje ha ido bajando hasta situarse el año 2006 en un 34,9%. Esto significa que los trabajadores han perdido 6,3 puntos porcentuales, lo que equivale a más de 9 mil millones de dólares que han dejado de percibir como salarios en los 3 últimos años y que han pasado a incrementar las utilidades de las grandes empresas.

Ante esta situación, reafirmamos plenamente nuestra política de revolución democrática y sus contenidos acordados en nuestro XXIII Congreso Nacional.

Y por ello, en la Conferencia Nacional que acabamos de realizar como mandato de ese Congreso, hemos concluido en la necesidad de poner aún más de relieve y reimpulsar el viraje en nuestra política, la que realizaremos con mucho más decisión y exigencia sobre la base de las demandas, la lucha y la unidad de las organizaciones sociales, en especial de los trabajadores, sector mayoritario de nuestra sociedad y principal fuerza en la creación de condiciones para transformaciones profundas, políticas, sociales y económicas.

La negociación colectiva de los trabajadores forestales de la provincia de Arauco, que le ha entregado al pueblo de Chile el símbolo de la voluntad inclaudicable de no renunciar a sus derechos, en el nombre de Rodrigo Cisternas, víctima de la criminal represión antisindical, es un paso decisivo en el camino de la reconquista de la unidad y la lucha como la principal herramienta para avanzar hacia mejores condiciones de vida.

(Compañeras y compañeros: ha llegado hasta el Caupolicán y se encuentra presente en el acto la madre de Rodrigo Cisterna, le pido a ustedes le demostremos todo nuestro cariño y fraternidad a la madre de Rodrigo Cisternas).

Estos trabajadores han resuelto una serie de antiguas demandas y lograron un alto porcentaje de aumento salarial. Y lo más trascendente, han impuesto en los hechos la negociación colectiva por rama o sector que se encuentra actualmente prohibida. Los trabajadores habrían tenido que negociar por separado, como hasta antes de este movimiento, con cada una de las 86 empresas que contratan trabajadores para el holding Bosques Arauco, pero ahora se vieron obligados a sentarse en la mesa de negociación los verdaderos dueños del negocio.

Ha sido una derrota para los que como Fernando Leniz, ministro de Pinochet, se ufanaban de haber aplastado al movimiento sindical. Ahora tocan las campanas a rebato ante el «peligro» del despertar de los trabajadores.

Ha llegado la hora de exigir al gobierno y al parlamento la reforma del sistema laboral, aprobando como un derecho irrenunciable la negociación por sector y el derecho a huelga.

Estamos seguros que otras organizaciones sindicales seguirán este camino de negociación por sobre la injusta ley laboral: las de los sindicatos de CCU – de Cristal Chile – de AGROSUPER – de PETROX – los trabajadores de supermercados y malls – los trabajadores de la industria del salmón – y – por cierto, los aguerridos trabajadores del subcontrato de CODELCO.

Por qué tenemos que aceptar a ojos cerrados que los grandes consorcios se fusionen sin problemas, como Fallabela y DyS en la búsqueda de más utilidades en base a los mismos salarios de hambre. Por qué aceptar que los supermercados le cierren los espacios a las ferias libres y al pequeño comercio, sin que por el contrario se legisle para que los trabajadores tengan la posibilidad de hacer prevalecer sus derechos.

No podemos dejar de saludar y solidarizar desde esta tribuna con los trabajadores que se encuentran en conflicto en estos días, en primer lugar a los del subcontrato del cobre que se organizan y continúan en su lucha.

Saludamos a los trabajadores del SENAME que se movilizan por mejores condiciones de vida y contra los efectos de la reciente Ley de responsabilidad Penal que obliga a tener encarcelados por un mínimo de 2 años a los menores, desde los 14 años cuando cometen un delito.¿Donde los van a meter?, ¿como los van a rehabilitar?, ¿cuántos miles de jóvenes necesita el sistema mantener en la cárcel para ocultar una lacra social que crece a ojos vista producto de la injusta distribución y la falta de oportunidades? Exigimos en este punto que el Estado chileno cumpla con los tratados internacionales sobre los derechos de los niños.

Saludamos a los trabajadores recolectores de basura de la región metropolitana que unidos defienden sus derechos. Como bien lo dice su consigna, ellos cumplen la ingrata labor de retirar la basura en difíciles condiciones, pero no forman parte de la basura. Eso es luchar por la dignidad humana.

En su mayoría, también, son trabajadores o sus familias, quienes con su lucha han logrado importantes conquistas. Me refiero a los deudores hipotecarios de viviendas.

Y no podemos soslayar el paquete de medidas obtenidas por las PYMES, por medio de sus propias formas de movilización, que esperamos se traduzca en trabajo digno para miles de trabajadores.

De norte a sur y de sur a norte, saludamos a todos los que luchan, por sacar del estancamiento a las regiones, a los de Arica y Punta Arenas de los límites extremos, a Lota y Vallenar de la extrema pobreza. A los que defienden la naturaleza y el medio ambiente. A los que exigen hospitales, escuelas, vivienda digna. A los que exigen el respeto a los derechos de la diversidad en sus diferentes aspectos. A los que luchan por un salario mínimo digno, que la CUT ha planteado sea de 180 mil pesos.

Hasta la pelea más remota o pequeña da cuenta de que nuestro pueblo se pone de pié y de que podemos acrecentar nuestra esperanza de que vienen cambios profundos.

Cada uno de los puntos, sobre los cuales los comunistas exigimos cumplimiento a partir de la segunda vuelta presidencial, mantiene su trascendencia nacional y estamos seguros que han tenido una alta incidencia en este despertar de la lucha, en este nuevo estado de ánimo. A ellos se agregan los puntos que plantea el parlamento social político y aquellos que impone la lucha de distintos sectores sociales.

La lucha contra la exclusión ha ido ganando día a día más adeptos. La aprobación del proyecto de reforma parcial del sistema electoral constituiría un primer paso de gran importancia.

Después de mucho tiempo se ha logrado concitar la voluntad y la unanimidad de la concertación para aprobar este proyecto. Sin embargo, como sabemos, sus votos no alcanzan para lograr el quórum calificado que establece la constitución. Se requieren votos de la derecha. Hasta ahora, RN, que aparecía proclive a la reforma, en los hechos, con su negativa a otorgar el derecho a voto de los chilenos en el exterior, no ha cumplido su palabra, exigiendo algo imposible, que el millón de chilenos vengan a inscribirse a Chile.

Esta conducta de incumplimiento de promesas, que incluye al presidenciable Sebastián Piñera, hace incierta la aprobación de la reforma electoral que debiera votarse en los próximos días o semanas. No sería raro que se busquen chivas fraudulentas para no cumplir la palabra empeñada.

Tal posibilidad ha estado desde un principio en nuestros cálculos. La diferencia hoy es que la bandera de la lucha contra la exclusión se ha ido transformando en una expresión mayoritaria del país y los que opten por mantenerla deberán pagar un costo político con consecuencias electorales.

Los comunistas, que somos, junto a otros conglomerados políticos y sociales, un importante sector excluido, hemos luchado siempre, sin descansar ni un instante, por la democracia, el progreso, la justicia social y el bienestar de los chilenos. Constituimos uno de los movimientos sociales y políticos más consecuentes en la lucha obrera y popular durante el siglo XX y los inicios de este siglo. Como tal, hemos contribuido sustantivamente al desarrollo del país. Las fuerzas del sistema que bloqueen los cambios y nieguen los derechos que corresponden a los sectores excluidos, estarán otorgando mayor legitimidad a la protesta y confrontación directa, que sobrepasa la institucionalidad, como único camino para resolver los cambios democráticos.

Debemos prepararnos para ir masivamente a Valparaíso en los días que se discuta la reforma electoral, hay que desnudar ante el país a los que están por mantener la exclusión.

Esta no es sólo la lucha por alcanzar representación en el parlamento, ni es sólo la lucha por terminar con la exclusión de los comunistas, como ha quedado demostrado con nuestro rechazo claro y tajante a la propuesta de personeros de la concertación para que nuestro Partido se hiciera cargo del Instituto Nacional de los Derechos Humanos, considerando esto como una forma de terminar con la exclusión.

Decimos no a esta propuesta, por muy bien intencionada que este, porque luchamos contra la exclusión de todos los excluidos, porque en lo fundamental somos un partido de oposición y porque nuestra decisión es dar la batalla hasta lograr nuestro propósito y de por medio no caben oportunismos ni arreglines.

En los próximos días entregaremos al gobierno una propuesta de proyecto para hacer factible el referéndum mediante el cual se consulte a la ciudadanía sobre si es necesario o no terminar con la exclusión y esperamos que la mayoría del Congreso la haga suya y la apruebe porque se necesita sólo mayoría simple.

Hasta ahora hemos dado una gran batalla contra la exclusión, a lo largo del país, contando con el apoyo de organizaciones sociales y miles de sus dirigentes, de todas las vertientes del pensamiento político, de centenares de intelectuales y artistas, encabezados por los del sello DICAP y los más reconocidos del país.

Se han sumado alcaldes, concejales, parlamentarios, pequeños y medianos empresarios, deportistas, estudiantes, personas de la tercera edad y muchos otros que además han entregado su firma junto a muchos miles de personas que lo hacen sin vacilar. No vamos a cejar en este propósito democratizador. Es una pelea de la cual, estamos seguros, a la larga o a la corta, saldremos victoriosos.

Valoramos que en el mensaje presidencial del 21 de Mayo se haya reafirmado la necesidad de terminar con la exclusión. Este término -exclusión- indudablemente, está ligado a la reforma parcial del sistema electoral.

Y queremos aclarar, por si alguien no lo tiene claro y piensa que por esta valoración o convergencia respecto de la Reforma Electoral, nuestro partido hipoteca su independencia, que se equivoca medio a medio.

Hemos criticado el vacío enorme del mensaje respecto a los derechos de los trabajadores. Lo más rescatable y ojalá se cumpla es lo que se prometió sobre el derecho de las trabajadoras de establecer que a «igual trabajo, igual salario.»

No se dijo una palabra sobre la represión reiterada de las fuerzas policiales contra los trabajadores cuando están en conflicto. Y no sólo a los trabajadores, también contra los estudiantes, los pueblos originarios, los pobladores. Nosotros pensamos y exigimos que Carabineros no siga siendo instrumento de este tipo de represión. Y aún está pendiente la determinación de las responsabilidades políticas respecto de la muerte de Rodrigo Cisternas, las cuales no dejaremos de exigir.

En relación con el Transantiago, nuestra posición es clara, el Gobierno no debe seguir sometiendo a los santiaguinos a un sistema de transporte que se ha constituido en algo muy negativo para sus vidas. El camino de solución es la intervención pronta y mucho más directa del Estado. Un sistema de transportes estatal es lo único que puede solucionar de manera integral el transporte de pasajeros. Se ha dado un paso al proponer que el Metro se extienda con un sistema de superficie, exigimos que esto se ponga en práctica desde ahora mismo.

Insistimos en que la falta de participación de los usuarios esta en la base de los errores de diseño e implementación del Transantiago, las autoridades no escuchan el clamor de la gente, por ello seguiremos adelante en el camino de la organización de los usuarios. Saludamos a las Juventudes Comunistas por su importante contribución a esa organización y a esa lucha.

En Educación, efectivamente se le ha inyectado una gran cantidad de fondos al sistema de educación básica y media, lo que es positivo y responde a las exigencias y movilización de los estudiantes secundarios. Sin embargo, se mantiene el sistema de administración municipal que, la verdad, hasta ahora ha sido incapaz de entregarle al país un sistema de educación que realmente garantice su calidad. Basta mirar los resultados de la prueba SIMCE para ver que allí donde estudian los sectores más desposeídos de nuestro país -más del 50%- es donde están los mayores problemas y algo tiene que ver en esto la administración municipal. Esos 650 millones de dólares podrían tener muy poca eficacia y una porción importante transformarse en lucro para los privados, ya que la LOCE sigue prácticamente igual.

El asunto es como se va a distribuir y gastar estos aportes del Estado. Un diario, que ahora se dedica muy seguido a hacer encuestas, nos quiere hacer creer que la mayoría de los chilenos piensa que estos fondos para educación debiera administrarlos la Alianza por Chile, sería como dejar al gato cuidando la carnicería.

Los que si debieran opinar, destinar y co administrar son los padres y apoderados, los estudiantes, los profesores.

En el mismo mensaje se aseguró que el próximo año se van a empezar a pagar 75 mil pesos como una pensión básica universal. Ya casi todos los cálculos dicen que con los recursos que el Estado destina a fondos previsionales, podría pagarse 100 mil pesos mensuales como mínimo. Aún no se toman en cuenta los planteamientos que han hecho los trabajadores: que las empresas también aporten a los fondos previsionales. Es preocupante que se esté autorizando la inversión del 45% de los ahorros de toda una vida de los trabajadores sin un resguardo claro ante los peligros de la especulación financiera.

Nosotros hemos propuesto invertir estos fondos y otros, como los excedentes que resultan del alto precio del cobre, en un plan de desarrollo productivo nacional, sustentado en un plan de aseguramiento estratégico de energía que aún no existe y que mientras más se demora, más consecuencias negativas tendrá para el país. Es más, estando de acuerdo con la rebaja al 0.5 del superávit estructural, planteamos se lleve a CERO y liberar así otros 800 millones de dólares que tanta falta hacer para salud, vivienda, trabajo y educación.

Se ha anunciado el pronto envío de un proyecto para acoger en nuestra legislación el artículo 69 de la OIT que reconoce a los pueblos originarios como parte de un Estado plurinacional y no sólo multicultural como se dice en el mensaje. Hay que agregar a esto la necesidad de la pronta adopción de la Carta de la Asamblea General de las Naciones Unidas sobre los Derechos Humanos de los Pueblos Indígenas. Se necesita un avance decisivo en la entrega de tierras que restituya la antigua propiedad, en especial del pueblo mapuche y un plan urgente de desarrollo especial acorde a las características y necesidades de cada uno de nuestros pueblos.

En Derechos Humanos ha llegado la hora definitiva para que el Parlamento anule los efectos de la oprobiosa ley de amnistía dictada por Pinochet, tal cual lo exige la resolución de la Corte Interamericana de Derechos Humanos.

Estamos de acuerdo conque se instituya el día de los detenidos desaparecidos, pero hacemos hincapié en que todavía no se conoce el paradero de la mayoría de ellos y menos aún, se hace justicia. Jamás aceptaremos la impunidad, menos ahora que hemos conocido la desgarradora verdad sobre las atrocidades que con tanta cobardía cometieron los agentes de la dictadura contra más de 90 de nuestros compañeros detenidos desaparecidos, sólo el año 76, el mismo período en el que hicieron desaparecer a las direcciones encabezadas por Víctor Díaz y Fernando Ortiz y que fueron exterminadas, en un centro de genocidio especial, del que nadie salió vivo, ubicado en Avda. Simón Bolívar, después de torturarlos de manera inhumana. No es factible relatar tales sucesos sin que se desgarre el alma. Por ello las consignas «ni perdón, ni olvido, verdad y justicia» prevalecerán hasta que derrotemos la impunidad y logremos establecer la conciencia de que nunca más se vuelvan a cometer tales crímenes terroristas en nuestra Patria.

Le vamos a solicitar, de manera especial, a la Presidenta de la República, que estos lugares de genocidio y crímenes de lesa humanidad se entreguen a los familiares de las personas allí asesinadas, entre ellos el de Avda. Simón Bolívar, al que me referí y el de la calle Pedro Donoso donde fueron ejecutados los compañeros del Frente Patriótico, y que constituye el caso llamado de Corpus Christi, crimen cometido contra prisioneros desarmados, del que se cumplen 20 años en este mes de junio y que por cierto llamamos a participar de los actos que se harán en su recuerdo, por su alto compromiso con la lucha contra la tiranía.

Compañeras y compañeros:

En estos días se ha hecho mucho caudal por parte de sectores nacionales, coligados con la campaña anti venezolana del gobierno norteamericano, por la no renovación de la concesión de RCTV en la fecha en que esta caducaba, en respuesta a la campaña con que este canal alentó y colaboró con el golpe de estado contra el Presidente Hugo Chávez.

No se puede aducir que es un atropello a la libertad de prensa cuando el 80% de los medios de comunicación en ese país son privados, sin embargo por la CNN, que le ha dado un enorme espacio al tema, se habla de tensa situación en Venezuela, de que se suprime el derecho a la opción mediática. ¿Es acaso la opción entre el golpismo y la voluntad popular?

Nosotros bien conocemos del financiamiento norteamericano a medios de comunicación chilenos para alentar el golpe contra el presidente Salvador Allende. ¿Qué costo han pagado estos medios, que no sólo impulsaron el golpe, sino que con absurdas invenciones justificaron los crímenes de la dictadura? Han tenido que pasar más de 30 años para que, recién, el Colegio de Periodistas, mediante un juicio ético, suspendiera de la colegiatura a dos periodistas que participaron en montajes sobre supuestos enfrentamientos o fugas para encubrir masivos asesinatos de prisioneros políticos.

Afortunadamente en Venezuela el golpe fue derrotado por el pueblo y las propias F. Armadas ¡y se ha hecho justicia! Toda nuestra solidaridad con el pueblo y el gobierno venezolano.

En noviembre se realizará en nuestro país la cumbre Interamericana, hay una comisión organizadora conformada por un amplio espectro político y social que está preparando paralelamente la cumbre de la amistad de los pueblos, allí sabremos expresar masivamente nuestra solidaridad con los pueblos que luchan por su independencia y soberanía plenas, con Cuba socialista, con Venezuela, con Bolivia, con Nicaragua, con Ecuador.

Expresamos también nuestra solidaridad con el pueblo de Colombia que exige el fin de la injerencia militar norteamericana en ese país y que busca una salida política que ponga fin al estado de guerra y represión que imponen los sectores reaccionarios para impedir que se produzca el intercambio humanitario de prisioneros que proponen las FARC y que desea la mayoría de los colombianos.

Apoyamos la lucha del pueblo de Puerto Rico por su plena independencia de los Estados Unidos.

Tuvimos la oportunidad de fortalecer nuestros lazos de amistad, fraternidad y solidaridad mutuos con el Partido Comunista de Vietnam, con motivo de la visita de su Secretario General, compañero Nong Duc Manh, a Chile. Y a propósito, les cuento que ayer reapareció en la televisión cubana el compañero Fidel Castro, precisamente recibiendo al compañero Nong Duc. Una muy grata noticia.

Los compañeros representantes de los partidos comunistas de Bolivia y Argentina que nos acompañan cuentan con todo nuestro aprecio, que sabemos es mutuo.

En octubre nos haremos partícipes en el acto de conmemoración de los 40 años de la muerte del Che, desnudando la cruda e inclemente realidad que impone el bloqueo norteamericano al pueblo cubano, exigiendo la libertad de los 5 cubanos injustamente encarcelados en Estados Unidos, repudiando la excarcelación de Posada Carriles, el terrorista asesino protegido por Bush. Exigiendo el fin a la violación a los derechos humanos, que se cometen día a día en Guantánamo por orden de Bush.

En A.L. crece la tendencia a la integración en pro de la defensa y el mejor aprovechamiento de las materias primas que producen nuestros países, en especial los relacionados con los hidrocarburos y la bio diversidad.

Esto contrasta con la posición norteamericana que nos quiere tener a todos juntitos, pero para su propio beneficio. En el actual cuadro, por ejemplo, de crisis energética, resulta casi criminal no privilegiar relaciones con países hermanos y limítrofes que podrían abastecernos de gas, como ocurre con Bolivia o Venezuela.

No vemos la salida al mar de Bolivia como una moneda de cambio, sin embargo una actitud más abierta de nuestro país podría llevar a solucionar en gran medida el crítico tema del gas. Estamos por la salida al mar para el pueblo boliviano.

En diciembre se cumplen 100 años de la Matanza de la Escuela Santa María de Iquique, será una ocasión propicia para el encuentro de organizaciones sociales y políticas del Cono Sur, un encuentro pueblo a pueblo, en representación de los trabajadores chilenos, bolivianos, argentinos y peruanos, que murieron asesinados bajo la metralla de la infamia y del odio de clases de los poderosos. Como hijos de Recabarren no sólo estaremos allí presentes, sino que a través de todo el país trabajamos por recordar aquella fecha, enalteciendo a quienes, con su sangre, sembraron la semilla del movimiento obrero y trabajador.

Compañeras y compañeros:

En nuestra Conferencia Nacional que concluyó ayer y de cuyo espíritu he tratado de dar cuenta en este discurso, se acordó empezar nuestra preparación para las elecciones municipales del próximo año, empezar a nombrar los candidatos ahora, establecer las plataformas y los pactos con partidos e independientes.

Está claro que en el seno del Juntos Podemos Más hemos tenido, hasta ahora, diferencias con el Partido Humanista. No obstante ello, la resolución de la Conferencia es hacer los esfuerzos por recomponer esa posibilidad de pacto, abierto a independientes y dirigentes sociales, indudablemente respetando los matices tácticos que pueden darse, pero poniendo en el centro lo que une y la necesidad de avanzar con los objetivos trazados por el Juntos Podemos Más.

Si la Izquierda Cristiana, que ha decidido legalizarse como partido y en lo cual le deseamos pleno éxito, logra su cometido en los plazos legales, tendríamos un pacto aún más amplio y sólido de la izquierda y fuerzas progresistas. Este pacto electoral podría ayudar a recomponer una fuerza de izquierda que se exprese más allá de las coyunturas electorales.

Por otra parte, muchos militantes y también los periodistas nos preguntan si llevaremos candidato presidencial, ya que la derecha, con Piñera, está lanzada en esa campaña cuando aún faltan 3 años y hay varios pre presidenciables de la concertación. Nosotros pensamos que estamos en una etapa de lucha por solucionar los problemas de la gente, que son causados por el sistema que pretenden seguir aplicando estos candidatos. Nuestra fórmula es que llegado el momento, por cierto que tendremos un candidato del Partido para proponerlo a otras fuerzas aliadas, las que de conjunto elegiremos al candidato definitivo de la Izquierda.

Nos interesa dejar claro que no hemos dado vuelta la página respecto al JPM, como tampoco la daremos respecto del Parlamento Político Social, que es un organismo de distinto carácter, de convergencia, al que ha convocado la CUT, para abrir camino a determinadas demandas de los trabajadores.

No nos asustamos por las diferencias que son legítimas, si se dan en un plano de respeto y de no descalificación.

Una cosa enteramente distinta es la campaña anticomunista que ha comenzado a despuntar con fuerza en la medida que avanza la lucha social y nuestra política tiene mayor acogida. Una campaña de calumnias, grosera, de mentiras, de construcciones falsas, artera y hasta cobarde, porque se da muchas veces desde el anonimato.

Coinciden hasta en el lenguaje las insidias mercuriales, con las de grupúsculos que se visten con patente de izquierda revolucionaria, elevada al cubo. El Mercurio es más elegante, otros llegan hasta la amenaza de muerte. ¿Qué pretenden, amedrentarnos? Se equivocan medio a medio, porque el Partido rechaza esa campaña y nos encontrarán cada vez más unidos y dispuestos a seguir la lucha.

Frente a esta campaña, es enorme la satisfacción con que saludamos a los centenares de nuevos militantes que han ingresado a nuestro partido en los meses posteriores al XXIII Congreso. Un abrazo fraterno, también a los cientos de compañeros que por una u otra razón habían congelado su militancia, que hoy se reincorporan con entusiasmo y disposición.

Un saludo muy especial a los miles de militantes de nuestra Juventudes Comunistas que con su lucha expresan la política partidaria, enriqueciéndola día a día y que se encuentran desarrollando su Congreso Nacional, al cual como partido debemos prestar toda nuestra colaboración en todas las instancias.

Queridas compañeras y compañeros: quisiera terminar estas palabras con una reflexión y una invitación. En nuestros 95 años de vida, que se corresponden con casi la mitad de nuestra historia republicana, desde que Chile logró su independencia de la Corona Española, en la que nuestro partido ha ido dejando una impronta de su política y de su cultura, insoslayable e indesmentible, que no tiene visos de terminar, porque estamos más vivos y presentes que nunca en la memoria y en la lucha presente y futura de nuestro pueblo, uno de los más grandes momentos de nuestra histórica lucha por la democracia y el socialismo, fue cuando contribuimos a llevar a la presidencia de la República a Salvador Allende, el más grande estadista que ha tenido Chile.

El próximo año se cumplirán cien años del nacimiento de Salvador Allende. Nuestra invitación es para todos los que un día enarbolamos las banderas de la Patria junto a nuestro leal Presidente, estén donde estén hoy, para que traigamos al Chile presente su figura señera en aras de contribuir a la verdad histórica y otorgarle el sitial que se merece y hacer posible que las nuevas generaciones puedan nutrirse de su ejemplo.

Con Recabarren, con Gladys, con Neruda, con Víctor Jara, con todos nuestros mártires y combatientes, unidos y luchando, mil veces, venceremos.

¡VIVA EL PARTIDO COMUNISTA DE CHILE!