Recomiendo:
0

El crecimiento del apoyo al candidato presidencial de la Izquierda augura que habrá segunda vuelta en enero

Tomás Hirsch: nuevos lenguajes para una izquierda de hoy

Fuentes: Crónica Digital

Una de la fortalezas más relevantes de la campaña presidencial de Tomás Hirsch es su extraordinaria capacidad de comunicar radicalidad y hondo contendido transformador a través de un lenguaje amable y convocante. El actual pololeo que nuestro candidato tiene con amplias audiencias del público, más allá del contenido y las evidentes manipulaciones que los grandes […]


Una de la fortalezas más relevantes de la campaña presidencial de Tomás Hirsch es su extraordinaria capacidad de comunicar radicalidad y hondo contendido transformador a través de un lenguaje amable y convocante.

El actual pololeo que nuestro candidato tiene con amplias audiencias del público, más allá del contenido y las evidentes manipulaciones que los grandes medios de comunicación realizan, es parte de una verdad incontrarrestable: estamos ante un liderazgo que cumple una potente máxima del sentido común: lo cortés no quita lo valiente.

Pero hay otro poderoso paradigma, más propio de la comunicación y sus recursos que Tomás maneja casi a la perfección. El contenido y sus mensajes deben ir parejos a las formas y a su puesta en escena.

Texto y formato en coherencia para comunicar esperanza y alegría para obtener adhesión por el afecto; impecables formas argumentales unidas a un humor inteligente, siempre en búsqueda de empatía y diálogo.

Un rostro que marca seriedad y preocupación para denunciar las atrocidades del modelo y la complicidad de la derecha y el gobierno… una sonrisa final evocadora, que invita a la esperanza.

Se cumple así la función política y comunicacional de los líderes, denuncia, persuasión y convocatoria para la acción.

La presencia de Tomás en la escena política /comunicacional está marcada por otro aspecto que se ha hecho relevante en esta elección: los públicos hoy también evalúan coherencia y curriculum.

Parece que ya no bastar la pirotecnia publicitaria ni la estrategia de saturación territorial de imagen. Al menos una parte del guión político y marketinero de la concertación y la derecha está flaqueado.

No asegura la elección el ofertón, ni los rostros asociados a un preciosismo estético propio de la publicidad política. Un segmento relevante del público busca historia personal de coherencia entre los que se dijo y se hizo, credibilidad de la propuesta encarnada por alguien que tiene pasado.

Esta combinación está dando frutos y se trata por tanto de uno de los más relevantes avances de nuestra izquierda, esa que busca nuevos lenguajes sin perder en el camino un ápice de su horizonte transformador.

Esta campaña confirma que se puede mantener la radicalidad de la mirada y su carácter critico, utilizando nuevos y mejores formatos para una pedagogía política moderna y actualizada.

Hemos abierto un diálogo con nuevos y diversos sectores que nos han comenzado a mirar y que hasta hace muy poco tiempo o no escuchaban a nadie o simplemente estaban cautivos en el espejismo de la derecha y la Concertación.

Instalarse en el sentido común estético y comunicacional de las nuevas audiencias que piden claridad y denuncia, sin perder la ternura y la evocación de un pais posible para hoy, es un trabajo largo, pero no menos urgente.

La Franja televisiva del Juntos Podemos evidencia que todavía falta mucho camino por recorrer. Nos cuesta todavía encontrar un lenguaje audiovisual que entienda que comunicar nuestro proyecto no es lo mismo que comunicar entre nosotros mismos, todavía falta elaborar un lenguaje para hablar con las mayorías desde códigos modernos y los usos que el mundo audiovisual hoy tnos provee tan gnerosamentde.

Una parte relevante de Chile, que reciente este modelo, se ha puesto en marcha hacia la búsqueda de nuevos sentidos para la política. Todo indica que Tomas Hisch va en su misma dirección.

Una primera cita ocurrirá en diciembre, lo que ocurra después correrá por cuenta del Podemos.

Para quienes hemos estado en esta larga construcción que es el Podemos, hay otra certeza en esta campaña: los procesos nunca son lineales y más allá de los oscuros, los claros del camino están en todas partes.

Habrá que aprender de lo mucho bueno que hay en tantas partes, y si se trata de virtudes vasta mirar a un Tomas Hirsch que suma cada dia más y más, con la convicción serena de los que tenemos esperanza.

– Iván Cabezas es periodista, académico de la Universidad Bolivariana, dirigente de la Izquierda Cristiana y miembro del consejo editorial de Crónica Digital.