En tres hoteles de la localidad de Cúcuta permanecen alrededor de 435 individuos venezolanos entre los cuales hay algunos desertores y militares dados de baja por hechos irregulares, quienes estarían financiados por la Agencia de las Naciones Unidas para los Refugiados (Acnur). Gobierno de Venezuela anuncia plan de cinco puntos para eventual diálogo con opositores. […]
En tres hoteles de la localidad de Cúcuta permanecen alrededor de 435 individuos venezolanos entre los cuales hay algunos desertores y militares dados de baja por hechos irregulares, quienes estarían financiados por la Agencia de las Naciones Unidas para los Refugiados (Acnur). Gobierno de Venezuela anuncia plan de cinco puntos para eventual diálogo con opositores.
Grupos irregulares de mercenarios y paramilitares se organizan hoy en el departamento colombiano de Norte de Santander con el objetivo de incursionar en Venezuela, denunció el protector del estado de Táchira, Freddy Bernal.
Bernal aseveró que en tres hoteles de la localidad de Cúcuta permanecen alrededor de 435 individuos venezolanos entre los cuales hay algunos desertores y militares dados de baja por hechos irregulares, quienes estarían financiados por la Agencia de las Naciones Unidas para los Refugiados (Acnur).
En entrevista a la cadena multinacional Telesur, el dirigente del Partido Socialista Unido de Venezuela destacó la importancia de que Acnur se pronuncien sobre si realmente tiene relaciones con esas personas, coordinadas por el general (retirado) Cliver Alcalá Cordones.
De acuerdo con información de inteligencia suministrada por fuentes dentro de la Policía Nacional de Colombia, esos grupos irregulares estarían direccionados para ejecutar acciones de incursión sobre territorio venezolano.
«Quiero advertir ante la comunidad internacional que se prepara una modalidad de guerra contra Venezuela dirigida a causar el caos interno mediante la incursión de paramilitares, mercenarios y algunos traidores», indicó Bernal, quien atribuyó al gobierno de Estados Unidos la responsabilidad de esos planes.
Aseveró que avanzan los preparativos para atacar objetivos civiles y militares en territorio venezolano con el fin de generar caos y desestabilización, en una fórmula de agresión que incluiría el asesinato selectivo de líderes políticos y funcionarios castrenses.
Manifestó además, que el gobierno de Colombia ampara a esos grupos paramilitares que constituyen la punta de lanza en la agresión contra Venezuela.
El protector del estado de Táchira aseguró que tras los hechos violentos reportados en fin de semana último en medio de una supuesta operación de ayuda humanitaria -denunciada por Caracas como intento de intervención-, la frontera con el vecino país se encuentra «absolutamente controlada» del lado venezolano.
Destacó además que la FANB tiene la capacidad para custodiar la línea limítrofe y preservar la paz en el territorio de Venezuela, con el apoyo del pueblo y la Milicia Nacional Bolivariana.
El representante de la nación sudamericana en la ONU, Samuel Moncada, denunció el jueves ante el Consejo de Seguridad maniobras Washington para inducir una «guerra indirecta y mercenaria» en el país mediante grupos irregularidades armados.
Moncada precisó que voceros de la administración de Donald Trump manipulan las cifras de supuestos desertores de la Fuerza Armada Nacional Bolivariana (FANB) con el objetivo de justificar la conformación de un denominado Ejército de Liberación de Venezuela en territorio colombiano.
«Los organizadores de este grupo armado criminal hacen alarde público en los medios de comunicación de Colombia con total impunidad», señaló el diplomático.
En diciembre del pasado año, el presidente Nicolás Maduro reveló que alrededor de 734 mercenarios se preparaban el territorio neogranadino.