Intelectuales, escritores, artistas, universitarios y trabajadores de la cultura argentinos e internacionales vemos con preocupación algunas medidas recientes de su gobierno y declaraciones por parte de sus funcionarios en materia de derechos humanos. Desde nuestro quehacer académico, artístico e intelectual, hemos compartido nuestra profunda admiración por la lucha incansable de organismos de derechos humanos por […]
Intelectuales, escritores, artistas, universitarios y trabajadores de la cultura argentinos e internacionales vemos con preocupación algunas medidas recientes de su gobierno y declaraciones por parte de sus funcionarios en materia de derechos humanos.
Desde nuestro quehacer académico, artístico e intelectual, hemos compartido nuestra profunda admiración por la lucha incansable de organismos de derechos humanos por dilucidar la verdad en torno a los crímenes de lesa humanidad cometidos en Argentina durante la última dictadura militar y los años inmediatamente previos y hemos acompañado sus esfuerzos por llevar adelante los correspondientes procesos judiciales. Asimismo, hemos apoyado las iniciativas de los gobiernos democráticos que, comprometidos con estos organismos, procuraron consolidar las políticas de verdad, memoria y justicia que, en nuestros días, se han convertido en pilares de nuestra democracia y motivo de reconocimiento a nivel internacional.
Es por ello que queremos manifestar nuestro total repudio ante las recientes declaraciones del actual Ministro de Cultura de la Ciudad de Buenos Aires, el Sr. Darío Lopérfido, quien en una charla pública el pasado lunes 25 de enero se ha referido a las desapariciones forzadas de personas en manos del terrorismo de estado, sosteniendo que el número de desaparecidos «fue una mentira que se construyó en una mesa para obtener subsidios que te daban» (sic). Consideramos estas declaraciones como un claro intento de banalizar y restar importancia a las atrocidades cometidas en esos años, como así también de arrojar un manto de descrédito sobre los organismos y las políticas de derechos humanos. Si de cifras se trata, el compromiso debería ser el de profundizar y expandir la investigación sobre cada uno de los delitos cometidos por el terrorismo de estado, determinando responsabilidades y complicidades, lo cual sólo se logra poniendo a disposición recursos y políticas. Además, en dicha entrevista, el Ministro se refirió a «un enfrentamiento entre dos bandas armadas», reflotando para nuestro asombro la peligrosa y perimida «teoría de los dos demonios» según la cual la violencia de las guerrillas de aquellos años resulta equiparable al exterminio sistemático de todo tipo de disidencia por parte del Estado.
Creemos que estas declaraciones significan un grave retroceso y una afrenta para todos aquellos que estamos comprometidos con las políticas de derechos humanos -un compromiso que bajo todo punto de vista desearíamos compartir con su actual Gobierno-, y da cuenta de una actitud especialmente inapropiada viniendo de un funcionario público. Como ciudadanos argentinos y extranjeros a quienes nos ligan fuertes vínculos con la cultura y la historia argentinas y con la producción cultural de la Ciudad de Buenos Aires, las múltiples instancias en que habitualmente participamos de políticas culturales públicas se ven gravemente afectadas por un posicionamiento como el del Sr. Lopérfido en su rol de ministro de cultura de dicha ciudad. Nuestra confianza y nuestro respeto por las iniciativas públicas del Gobierno de la Ciudad, y por extensión del Gobierno Federal, resultan lesionados por expresiones públicas como la del Ministro de Cultura, a quien ustedes avalan permitiendo que permanezca en su cargo.
Por medio de la presente, y de acuerdo con diversos sectores sociales con el mismo reclamo, exigimos la renuncia del Ministro de Cultura de la Ciudad de Buenos Aires, el Sr. Darío Lopérfido. El actual Secretario de Derechos Humanos, el Sr. Claudio Avruj, manifestó que su Gobierno «no comparte los dichos de Lopérfido» y «discutir el número de desaparecidos no colabora con la unión de los argentinos» (Diario La Nación, 29 de Enero de 2016). Consideramos que estas declaraciones son insuficientes cuando lo que está en juego son valores fundamentales para nuestra democracia y para nuestra convivencia democrática y republicana. El propósito de unir a los argentinos es absolutamente incongruente con la permanencia en el cargo de un funcionario que ha desmerecido parte de nuestro acervo como país y sembrado discordias dolorosas e innecesarias.
Desafortunadamente, observamos que las declaraciones del Sr. Lopérfido, aunque extremas y particularmente ofensivas, surgen en un contexto general en que el gobierno nacional viene dando, por acción u omisión, señales cada vez más alarmantes de una falta de compromiso con las políticas de verdad, memoria y justicia. Entre estos gestos contamos el que el Sr. Presidente no haya recibido a los organismos de derechos humanos en persona hasta el día de la fecha, lo cual lo convierte en el primer máximo mandatario de la democracia en no reunirse con ellos en las primeras semanas de gobierno. Nos preocupan asimismo los sostenidos despidos en áreas sensibles para los juicios de lesa humanidad, como el Programa Verdad y Justicia y el Centro Ulloa. Vimos con alarma que, por primera vez también, y antes de recibir a los organismos de derechos humanos, e l Secretario de Derechos Humanos, el Sr. Claudio Avruj, haya elegido reunirse con representantes del Centro de Estudios Legales sobre el Terrorismo y sus Víctimas (CELTYV), quienes reclaman la libertad de militares condenados por crímenes de lesa humanidad. Por último, nos preocupa la designación para el cargo de Jefe de Gabinete del Ministerio de Seguridad del Sr. Pablo Noceti, quien además de mantener vínculos con abogados de represores de la última dictadura militar, manifestó en 2003, mientras se reabrían las causas en todo el país, que los procesos eran la «legalización de una venganza, estructurada y diseñada en el poder político» (Diario Página 12, 25 de enero de 2016).
La democracia argentina se sostiene sobre el compromiso del «nunca más» al terrorismo de estado: desde allí se reafirman y se expanden muchas de las luchas de nuestra sociedad contra distintas formas de violencia, de abuso y de explotación. Ese «nunca más» de la democracia argentina ha sido y sigue siendo, además, una referencia para muchas luchas por los derechos humanos a nivel regional y global. Reclamamos una respuesta inequívoca de las autoridades nacionales y municipales ante los intento por debilitar y banalizar ese compromiso democrático.
Germán Garrido
New York University
Gabriel Giorgi
New York University
Cecilia Palmeiro
New York University – Buenos Aires / Universidad Tres de Febrero
Mariano López-Seoane
New York University – Buenos Aires / Universidad Tres de Febrero
Andrea Giunta
Universidad de Buenos Aires
Mariano Siskind
Harvard University
Néstor García Canclini
Universidad Autónoma Metropolitana de México
Roberto Jacoby
Artista
Walter Mignolo
Duke University
Francine Masiello
University of California, Berkeley
Arcadio Díaz Quiñones
Princeton University
Sergio Chejfec
Escritor
Graciela Montaldo
Columbia University
Gonzalo Aguilar
Universidad de Buenos Aires
Sandra Garabano
Universidad de Texas, El Paso
Florencia Garramuño
CONICET / Universidad de San Andrés
Leandro Katz
Escritor / Artista
Diamela Eltit
Escritora
Rossana Reguillo
Universidad Jesuita de Guadalajara
Margo Glantz
Escritora
Mario Bellatin
Escritor
Jorge Gumier Maier
Artista
Jens Andermann
Universidad de Zurich
María Pía López
Museo del Libro y de la Lengua
Natalia Brizuela
University of California, Berkeley
Valeria de los Ríos
Pontificia Universidad Católica de Chile
Juan José Cambre
Artista plástico
Paola Cortés Rocca
CONICET / Universidad Tres de Febrero
Fermín Rodríguez
CONICET / Universidad Tres de Febrero
Edgardo Dieleke
New York University – Buenos Aires / Universidad de San Andrés
Marta Dillon
Periodista
Fernanda Laguna
Escritora y artista
Cecilia Sosa
CONICET / Universidad Tres de Febrero
Luiz Ruffato
Escritor
Mauricio Lissovsky
Universidade Federal do Rio de Janeiro
María Soledad Boero
Universidad Nacional de Córdoba
Fernando Degiovanni
City University of New York
Francisco Garamona
Editor y escritor
Damián Fernández
Universidad de Chicago
Virginia Giannoni
Universidad Nacional de San Martín
Fernando Davis
Universidad de La Plata
Laura León Llerena
Northwestern University
Ruy Krieger
Artista
Juliana Laffitte
Artista
Matías Piñeiro
Director de cine
Mario Pellegrini
Editor
Esteban Buch
Ecole des Hautes Etudes en Sciences Sociales, Paris
José García-Romeu
Université de Toulon