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Un entrante: La precariedad social de Andalucía

Fuentes: Irísaz SC

Los datos no hablan por sí mismo, estos, tienen que ser interpretados, y de esto la política institucional sabe demasiado. Cuando se presentan datos desde las instituciones públicas, normalmente, se hace desde un discurso que sacude optimismo y con ilusión de crear buenas esperanzas en las personas. Pero quienes andamos con datos, sabemos que estos […]

Los datos no hablan por sí mismo, estos, tienen que ser interpretados, y de esto la política institucional sabe demasiado. Cuando se presentan datos desde las instituciones públicas, normalmente, se hace desde un discurso que sacude optimismo y con ilusión de crear buenas esperanzas en las personas. Pero quienes andamos con datos, sabemos que estos son cocinados según los intereses que se busquen, pero siempre respetando el rigor científico del tratamiento de estos. Al menos hay que creerlo.

Por esto, voy a proponer un entrante gastronómico condimentado con datos estadísticos que nos ofrecen instituciones públicas. Algunos de ellos, son presentados desde esa óptica positivista que genera optimismo y esperanza. Vamos a llamar a este entrentante: La precariedad social de Andalucía y le voy a invitar a degustarlo .

Materia prima del entrante

Según el informe «Contratación y calidad del empleo en Andalucía» elaborado por CCOO, el 20,4% de los contratos realizados en Andalucía durante 2016 son de menos de 7 días de contratación. En la última publicación de la Encuesta de Población Activa (EPA) del Instituto Nacional de Estadísticas (INE), en Andalucía hay una Tasa de Ocupación del 73,06% sobre una Tasa de actividad de 57,69%.

Supongamos ahora, más allá del número de personas que no reciben ningún tipo de remuneración del mercado de trabajo o retribución por parte de las administraciones públicas, que existe la posibilidad de establecer un indicador más o menos fiable que represente la Tasa de Precariedad Social en cualquier territorio observado, en este caso Andalucía.

Condimentos

Hagamos una fotografía especulativa sobre unos datos de Andalucía como unidad de observación:

Según la EPA en el primer trimestre de 2017

  • Tasa de Paro: 26,94%

  • Tasa de ocupación: 73,06%

  • Tasa de actividad: 57,69%

  • Tasa de Inactividad: 42,30%

Según informe de CCOO

  • Tendencia de la Tasa de contratos con menos de 7 días de contratación: 20,40%

  • Tendencia de la Tasa de contratos de 7 a 15 días de contratación: 6,30 %

  • Tendencia de la Tasa de contratos de 15 días a un mes de contratación: 13,10%

Cocinando

Ordenemos un poco estos datos. Si se quiere conocer cuál es el grado de impacto de los datos de duración de los contratos según CCOO en el mercado de trabajo, se debe aplicar estos porcentajes a la Tasa de Ocupación de la EPA, ya que son estas personas, las que al menos han trabajado una hora remunerada durante la semana de referencia de la entrevista sobre la encuesta de la EPA. De este modo, y parece que suficiente para el organismo estatal, es como el INE considera que una persona es ocupada; una hora trabajada remunerada no es considerada parada sino ocupada, una hora. Pero estamos suponiendo , sigamos.

Apliquemos la fórmula:

  • Tasa de contratos con menos de 7 días de contratación sobre la Tasa de ocupación: 27,92%

  • Tasa de contratos de 7 a 15 días de contratación sobre la Tasa de ocupación: 8,62%

  • Tasa de contratos de 15 días a un mes de contratación sobre la Tasa de ocupación: 17,93%

Según estos indicadores, el 54,47% de las personas ocupadas según la EPA, no trabaja más de un mes durante los tres meses de observación. Si este dato lo sumamos a la Tasa de Paro, obtenemos que las personas que no trabajan más de un mes representa el 81,41% de la población activa (lo vamos a representar de este modo, porque existe la posibilidad, de que quiénes están en la Tasa de Paro no han trabajado durante la última semana de referencia pero sí han podido trabajar en la segunda o en la octava semana anterior por ejemplo, y de este modo, no contabiliza en la Tasa de Ocupación).

Más condimentos y seguimos cocinando

Veamos otros datos:

Según registra la Agencia Tributaria del Gobierno del estado español, en Andalucía, el salario medio del sector de la agricultura es 4.303 euros por persona. Este sector, según la EPA, representa el 10,21% del tejido productivo de Andalucía. Si a este dato le sumamos la retribución media anual de las personas desempleadas, que según este mismo organismo estatal es de 3.891 euros por persona, se puede suponer, teniendo la creencia de que todas las personas desempleadas han cobrado el desempleo, que el 37,15% de la población activa de Andalucía no supera los 4.303 euros de media al año. Esto es vivir con un promedio de 358,58 euros al mes.

Después de esta fotografía social, recuerden, especulativa, no viene mal asociar estos datos con otros de algún aspecto importante de la sociedad, por ejemplo, el estado habitacional. En Andalucía, según la Estadística Registral Inmobiliaria (ERI) del Colegio de Registradores, la duración media de una hipoteca es de 280 meses de media. Durante estos meses, las personas hipotecadas pagan de media 97.208 euros de hipoteca, que sumándole los distintos tipos de intereses, presentan una media de 450 euros de mensualidad. En relación al precio medio del alquiler, en Andalucía, se estima unos 576 euros mensuales de media. Sí, 450 euros de mensualidad para una hipoteca y 576 para un alquiler, que por supuesto, las personas precarias que se encuentran en el 37,15% de la población activa que no cobra más de 358,58 euros al mes no podrá acceder a una vivienda, y si lo hicieron en algún otro momento con otras circunstancias económica personal, pues posiblemente, algunas de ellas estarán entre los 9.998 lanzamientos practicados (desahucios) que se registraron en Andalucía en el año 2016.

El resultado

Trataremos los valores absolutos en modo de síntesis, todo se ve más claro. En Andalucía, existe un grupo de cerca de tres millones de personas (2.919.400 aproximadamente) denominada conceptualmente por el INE «Población económicamente inactiva». Estas personas que se ocupan de su hogar, estudiantes, jubiladas o prejubiladas e incapacitadas para trabajar entre otras varias definiciones que ofrece el INE, posiblemente, la gran mayoría no superen esos 358,58 euros mensuales.

En esta Andalucía, hay más de tres millones de personas (3.240.700 aproximadamente) que no trabajan más de un mes durante tres meses, esto nos llevaría a una media anual de cuatro meses trabajados. En esta Andalucía, hay cerca de un millón y medio de personas ( 1.478.800 aproximadamente) que no ingresan más de 358,58 euros al mes y que no pueden acceder a un derecho constitucional como es el derecho a la vivienda digna. Simplemente, no pueden pagar su derecho.

Esta es la Andalucía se se oculta en los datos presentados triunfalmente por quienes gestionan las decisiones de la personas: un entrante con unos condimentos determinados pero que bien puede ser cocinado con muchísimos más que se encuentran en la alacena. Solo espero que las medias no tengan mala digestión, porque aveces estas hacen brotar de sus raíces hojas que se ocultan con intención.

Bibliografía y para ampliar información

Publicado originalmente en https://irisazsociedadcivil.wordpress.com/2017/05/29/un-entrante-la-precariedad-social-de-andalucia/

Rebelión ha publicado este artículo con el permiso del autor mediante una licencia de Creative Commons, respetando su libertad para publicarlo en otras fuentes.