El secretario general de la Federación Sindical Mundial, Georges Mavrikos, visitó este martes 10 de julio Madrid para reunirse con las centrales sindicales afiliadas a la FSM de todo el estado. En rueda de prensa posterior contestó a los medios presentes sobre los contenidos de esta reunión. «Hablar cara a cara con los amigos y […]
«Hablar cara a cara con los amigos y afiliados a la FSM y debatir sobre la necesidad de defender los derechos de la clase trabajadora en España», fue la respuesta de Mavrikos a la razón de su presencia en Madrid. «La clase obrera en España se encuentra ante un gran peligro en estos momentos en los que la patronal y los sindicatos CCOO y UGT han vuelto a firmar un nuevo Pacto Social», insistió el dirigente de origen griego que unos momentos antes había depositado una ofrenda en el monumento a las Brigadas Internacionales en la Ciudad Universitaria de la capital. También explicó que su viaje a Madrid respondía al deseo de informar a toda la afiliación de las actividades de la FSM en todo el mundo en 2018.
A la pregunta de si el sindicalismo de clase tiene cabida y puede competir con el sindicalismo de la concertación y el pacto social, el dirigente griego contestó que «todos los sindicatos afiliados a la FSM tienen una superioridad ideológica que se basa en su lucha antiimperialista, anticapitalista, internacionalista y de solidaridad, y estos principios se encuentran por encima de la burocracia, el arribismo y el elitismo sobre el que trabajan centrales sindicales como las que acaban de firmar con la patronal el último Pacto Social». Era la razón por la que «soy optimista ya que el futuro pertenece a los sindicatos de clase y no al sindicalismo de colaboración, del consenso y del pacto social».
En ese sentido, el señor Mavrikos también recordó que la historia sindical contemporánea muestra, si examinamos los logros del siglo XX para la clase obrera, que «todos ellos son fruto de las luchas de los trabajadores y trabajadoras, es decir, de la lucha de clases, y que todo lo perdido es el resultado del pacto social». Y volvió a insistir en que se mostraba optimista en el proceso de unidad de las organizaciones sindicales en el estado.
El secretario general de la FSM fue preguntado por ese proceso de unidad de las organizaciones afiliadas y sobre las dificultades que, en su opinión, entrañaba ese proceso. «Cada organización afiliada a la FSM tiene su propia peculiaridad, que nosotros respetamos, pero tras las conversaciones con ellas hemos detectado que la mayor dificultad en un futuro de unidad se encuentra en compaginarlo el derecho de autodeterminación». La FSM, continuó el líder sindical, «desde siempre ha respetado la facultad de cada pueblo a su derecho a decidir, una política que va contra los planes que desean fragmentar a los pueblos y todos nuestros miembros y amigos tienen muy claro ese concepto vinculado a su percepción de clase. Y bajo estos dos elementos podemos unirnos para defender los derechos de los trabajadores y trabajadoras para mejorar las condiciones de vida y ampliar el horizonte en la lucha de clases y contra la explotación del hombre por el hombre».
Georges Mavrikos, que por la tarde fue recibido en recepción por la alcaldesa de la ciudad, Manuela Carmena, finalizó la rueda de prensa celebrada en el local de la organización Alternativa Sindical de Trabajadores, recordando que «tenemos todas la misma estrategia, estamos presentes en las fábricas, en las oficinas, en el campo… y entre nuestras filas se encuentra lo mas honrado y lo más vivo del movimiento social».
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