El presidente de la Central Unitaria de Trabajadores de Chile, Arturo Martínez calificó a las empresas españolas como un «mal ejemplo de la inversión extranjera en el país» y que se han beneficiado con el Tratado de Libre Comercio con la Unión Europea. Martínez, realizó éstas declaraciones junto dirigentes sindicales de trabajadores de empresas españolas […]
El presidente de la Central Unitaria de Trabajadores de Chile, Arturo Martínez calificó a las empresas españolas como un «mal ejemplo de la inversión extranjera en el país» y que se han beneficiado con el Tratado de Libre Comercio con la Unión Europea. Martínez, realizó éstas declaraciones junto dirigentes sindicales de trabajadores de empresas españolas en Chile, como: Aguas Andinas, de subcontratistas como Eulen, de Callcenters, de los Bancos BBVA, Santander – Santiago, denunciaron las graves irregularidades laborales y sanitarias que ocurren en dichas compañías. Al respecto, el representante de la CUT, Arturo Martínez, aseveró que se iniciará un proceso de movilización ascendente, que comenzará este martes con la entrega de una carta denuncia al embajador español en nuestro país. Posteriormente se dirigirán en marcha hasta la sede de la cancillería donde expresarán en similar misiva, su «repudio a las compañías transnacionales europeas que a punta de abusos y despidos han incrementado sus utilidades en Chile.»
Entre las denuncias relatadas, está la de Francisco Manríquez, Presidente del Sindicato de Profesionales y Técnicos de Aguas Andinas, quien aseveró que desde la privatización de la empresa en la década de los 90, «se ha despedido a más del 40% del personal original, no se pagan las horas extraordinarias, no se respeta el descanso dominical, han eliminado beneficios importantes como el jardín infantil, casino, centros de recreación, entre otras facilidades que mantenía por años la ex propietaria estatal Emos». Similares expresiones tuvo el dirigente sindical del Banco BBVA, Nelson Lorca , quien señaló que «se ha despedido masivamente al personal cajero para contratar servicios de una expresa externa, la que mantiene a los trabajadores con salarios mínimos, a honorarios y sin ningún derecho laboral.» Agregó que «las millonarias utilidades acumuladas por la banca estos últimos años se justifican por la notable precarización en las condiciones de trabajo del personal, constantes exoneraciones y el sobre endeudamiento de los chilenos». Finalmente, Alberto Muñoz, vocero de los habitantes de Pudahuel, vecinos de la planta de tratamiento de aguas servidas La Farfana, aseveró que tras 20 meses de inaugurada la estructura dependiente de Aguas Andinas, los olores nauseabundos continúan emanando. Indicó que «pese a las acciones que han presentado ante la justicia y las explicaciones del gobierno, el problema sanitario aún no es resuelto. Lo que ha generado un severo daño para la salud, especialmente en niños y ancianos que viven en el sector.»
Los dirigentes sindicales y vecinales afectados por el proceder de las empresas españolas, junto con la CUT, reafirmaron dar comienzo a una serie de movilizaciones y acciones formales para terminar con los abusos producidos por grandes conglomerados europeos presentes en Chile. «Compañías que se han beneficiado enormemente por el Tratado de Libre Comercio, por la precaria legislación laboral chilena y la inoperancia de las instancias fiscalizadoras», afirmaron. Los representantes sindicales, precisaron que tal como ha ocurrido en países sudamericanos, la idea final es renacionalizar los servicios básicos, privatizados en su mayoría durante el período presidencial de Eduardo Frei Ruiz – Tagle.