El pasado nueve de diciembre se oficializó el ingreso de la República Bolivariana de Venezuela al Mercosur. Se trata del quinto miembro de esta formidable integración economica, social y política que involucra las mayores economias latinoamericanas. Alli están Brasil, Argentina, Uruguay y Paraguay, como membros de pleno derecho, y Bolivia y Chie como invitados especiales; […]
El pasado nueve de diciembre se oficializó el ingreso de la República Bolivariana de Venezuela al Mercosur. Se trata del quinto miembro de esta formidable integración economica, social y política que involucra las mayores economias latinoamericanas. Alli están Brasil, Argentina, Uruguay y Paraguay, como membros de pleno derecho, y Bolivia y Chie como invitados especiales; que dan forma a un mercado de 270 millones de seres humanos y con una riqueza equivalente a los 100 mil millones dolares.
Venezuela aporta una de las mayores riquezas petroleras y energëticas del planeta, con una economía creciendo al 10%, un desempleo que cae abrumadoramente y una política social del Estado orientada a favorecer a las mayorias populares en las áreas de la salud, educación, protección social, empleo y plena participación de la ciudadanía en los asuntos del Estado.
Ahora viene la unificación aduanera y arancelaria para facilitar el libre flujo de bienes, servicios y personas. Igual debe ocurrir la conformación del Parlamento del Sur, el principal acuerdo de la XXIX reunion realizada en Montevideo por los presidentes de las naciones que hacen parte del Mercado del Sur.
Su incorporación ocurre en momentos en que los Estados Unidos impulsa un política de dominación colonial de las naciones latinoamericanas a traves del ALCA y los Tratados de Libre Comercio, uno de los cuales acaba de ser firmado por el gobierno peruano, a espaldas de su pueblo y en las peores condiciones de vasallaje.
Mediante el Area de Libre Comercio y el Plan Colombia, la potencia imperialista gringa pretende extender sus tentáculos de sujeción y explotación sobre los pueblos de América Latina.
En el caso de Venezuela, el desafio es mayor porque la Casa Blanca y su agresivo gobierno pretenden aplastar las grandes transformaciones revolucionarias que impulsa el Presidente Hugo Chavez, durante los últimos siete años.
La revolución bolivariana se ha convertido, merced a sus políticas transformadoras, en la mayor esperanza de nuestros pueblos.
El ingreso de Venezuela al Mercosur plantea un desafio al bloque dominante oligarquico y fascista que gobierna en Colombia y realiza una feroz guerra contra el movimiento guerrillero campesino que lidera las FARC, apoyado en los aportes del Plan Colombia, que ya se acercan a los 7000 millones de dólares.
El Plan Colombia y el gobierno de Uribe Velez han sido convertidos por el imperialismo yanqui en la punta de lanza de la conspiración internacional contra la revolución bolivariana.
Parte de lo cual es la próxima firma de un Tratado de Libre Comercio entre el Estado Colombiano y la administración de George W. Bush, en las peores condiciones para la economia colombiana. Miles de empresas, importantes sectores de la agricultura, nuestra rica biodiversidad, el mercado de los medicamentos y la produccción cultural autoctona, seran lesionadas de marea absoluta por este convenio que oficializa el vasallaje de la clase dominante ante los poderes imperialistas.
El TLC de Colombia con USA es una abierta agresión a los políticas de independencia, soberania y socialismo que promueve la revolución bolivariana.
Pero dado que el comercio binacional colombo-venezolano alcanza cifras multimillonarias, de casi 3000 millones de dólares, bastante superior al que se realiza con los Estados Unidos,; a que Venezuela es el mercado más importante de Colombia para productos manufacturados (25% del total) y que recientemente se han firmado convenios para la construcción de gasoductos y oleoductos venezolanos que atraviesan a Colombia, por un valor cercanos a los mil millones de dólares, importantes lideres empresariales y conglomerdos economicos han abierto un amplio debate sobre las implicaciones del ingreso de Venezuela en el Mercosur, en esta importante relación economica entre las dos naciones.
Lo que esta claro para muchos es que si el señor Uribe Velez impone a la brava el TLC con los Estados Unidos, tal como lo ha repetido en muchas ocasiones y lo exige la Embajada imperialista, es muy probable que para la defensa de los intereses nacionales y populares de Venezuela, el gobierno del Presidente Hugo Chavez se vea en la obligación de congelar la dinámica relación comercial existente en estos momentos.
Venezuela corre un grave peligro si mantiene abiertos los flujos economicos con un gobierno vasallo de los Estados Unidos, como es el de Uribe Velez, un revuelto de narcotráfico, paramilitares y multinacionales.
Para los intereses de la vecina nacion resulta más positivo aprovechar las ventajas que le ofrece el Mercosur y sus poderosas economias en condiciones de complementariedad y solidaridad. Es el mensaje que se desprende de su ingreso a esta dinámica integración economica.