Este jueves, el presidente colombiano Álvaro Uribe, anunció el tan ansiado despeje de los municipios de Pradera y Florida para permitir el canje humanitario de políticos y militares en poder de las FARC. El gobierno colombiano anunció este jueves que despejará dos municipios al suroeste del país, para permitir el canje de políticos y militares […]
Este jueves, el presidente colombiano Álvaro Uribe, anunció el tan ansiado despeje de los municipios de Pradera y Florida para permitir el canje humanitario de políticos y militares en poder de las FARC.
El gobierno colombiano anunció este jueves que despejará dos municipios al suroeste del país, para permitir el canje de políticos y militares en poder de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), por guerrilleros presos.
Según reporte del corresponsal de TeleSUR en Bogota, Fredy Muñoz, el anuncio fue hecho por el propio presidente Álvaro Uribe, quien dijo que su gobierno está dispuesto a despejar dos municipios colombianos.
Días antes, la guerrilla de las FARC publicó videos de políticos en su poder, que pedían la desmilitarización de Pradera y Florida para negociar su liberación, a cambio de rebeldes.
El anuncio hecho por Uribe significa un cambio radical en su política de cero negociaciones con grupos insurgentes.
»Debe ser una zona de encuentro que pruebe a nacionales y a la comunidad internacional que existe buena fe para la paz», dijo Uribe.
Todos los martes desde hace cuatro años, Marleny Orjuela y demás familiares de secuestrados, han mantenido vigentes las consignas por el acuerdo, en el llamado corazón de la democracia colombiana.
Este anuncio del Gobierno lo ha recibido, según sus palabras, con moderado optimismo. »Positivos estamos, pero con mucha tranquilidad, manejando este momento, porque sabemos que nuestros familiares en la selva deben estar diciendo que ellos creen plenamente en el acuerdo humanitario cuando estén abrazando cada uno a sus familias», dijo Orjuela.
En ese sentido, añadió que «para nosotros es claro y queremos eso si que las dos partes, Gobierno y guerrilla se sienten allá en la mesa, en Pradera y Florida y antes de diciembre del 2006 estemos abrazando vivos y libres a nuestros familiares».
Lo más complejo de este proceso que se inicia será el operativo militar de despeje. Definirlo será lo primero y para esto el Gobierno sigue contando con el mismo comisionado de paz Luis Carlos Restrepo, desechando la propuesta hecha por el ex presidente Ernesto Samper a la comisión de paz del congreso, de nombrar uno especial para este caso.
»El comisionado de paz es el interlocutor normal, válido. En manos de él está cualquier negociación, vamos a ver qué dice la guerrilla y después procederemos a ver cómo fijamos los procedimientos», señaló Juan Manuel Santos, ministro de Defensa colombiano.
Las FARC por su parte, en sus últimos comunicados han condicionado este acercamiento a un encuentro directo con el gobierno, sin intermediaros, del cual salgan las reglas que regirán el canje.