Recomiendo:
0

Los trabajadores acusan a la gerencia del Banco de Chile de las fusiones bancarias

Fuentes: Rebelión

Como se ha anunciado desde hace meses, se apronta la fusión entre el Citigroup, de capitales norteamericanos, con el Banco Chile, perteneciente al grupo Luksic, uno de los conglomerados económicos más poderosos de Chile. Según el Director del Centro de Estudios Nacionales de Desarrollo Alternativo, el economista y ex presidente del Banco Central, Hugo Fazio, […]


Como se ha anunciado desde hace meses, se apronta la fusión entre el Citigroup, de capitales norteamericanos, con el Banco Chile, perteneciente al grupo Luksic, uno de los conglomerados económicos más poderosos de Chile.

Según el Director del Centro de Estudios Nacionales de Desarrollo Alternativo, el economista y ex presidente del Banco Central, Hugo Fazio, «el objetivo principal de la fusión, mirado desde el Grupo Luksic, no está en Chile, sino en el mundo. Aquí, a mi juicio, el Banco Chile se mete en un mal momento, porque se asocia con el Citigroup en un período en que esa empresa está «en la picota», cuestionada por el manejo especulativo que ha hecho en torno a la llamada crisis de la burbuja inmobiliaria. En estas circunstancias, el Citigroup es un «muy malo paraguas»; uno que está permeado por todas partes.»

Las fusiones bancarias corresponden a modalidades de concentración del capital que emplean las grandes corporaciones transnacionales para aumentar sus ganancias a costa de la destrucción de fuerzas productivas, precarización del empleo y despidos. Sólo en Chile, el conjunto de la banca obtuvo entre enero y octubre de 2007 la friolera de $ 384 mil millones de pesos. La reunión de capitales entre el conglomerado Citigroup y el Grupo Luksic consolidan aún más la relación estructural entre la burguesía nativa y la imperialista en Chile

TRABAJADORES DENUNCIAN

El Sindicato Nacional Nº 1 de Trabajadores del Banco de Chile, por su parte, denunció la actitud «negligente, arbitraria y autoritaria» del Gerente General de la institución, Fernando Cañas, quien ante la solicitud de información de los empleados sobre el proceso de fusión y las eventuales «desvinculaciones laborales» que provocará, señaló que el banco no entregará ninguna noticia al respecto.

En este sentido, el alto ejecutivo, indicó que la empresa está en espera de que se obtengan las autorizaciones respectivas de la FED (Banco Central norteamericano) y la Superintendencia de Bancos e Instituciones Financieras chilena. Cañas insistió en que, una vez aprobadas las autorizaciones, la administración dará a conocer a todo el personal, la 2da. y 3ra. línea ejecutiva y el Plan de Desvinculación, los cuales «ya se encuentran definidos».

GERENCIA PASA POR SOBRE NORMAS LEGALES

El Sindicato Nº 1 del Banco Chile presentó el 10 de octubre pasado una propuesta sobre los posibles despidos. Sin embargo, Fernando Cañas manifestó que el plan de desvinculación está terminado, que no tiene relación con la propuesta de los trabajadores, sino que se estructuró de acuerdo a un análisis realizado por Recursos Humanos sobre las condiciones que ofrece el mercado a los empleados despedidos por un proceso de fusión. Respecto de este ámbito, Cañas fue enfático en indicar que el plan determinado «no es negociable, ya está definido, es inapelable y no será modificado.» Ante esa respuesta, los dirigentes del Sindicato decidieron retirarse en forma inmediata de la reunión.

Mario Mayer, Presidente del Sindicato, señaló que «la actitud de Fernando Cañas se aleja del respeto mínimo a los trabajadores, y no se condice con el artículo 314 del Código del Trabajo, que dice que la empresa y los trabajadores, sin sujeción a normas de procedimiento ni restricciones y en cualquier época, pueden pactar condiciones comunes de trabajo y remuneraciones por un tiempo determinado. También la Gerencia se pasa por alto el reglamento interno del banco en su artículo 43, el cual determina como un derecho de los trabajadores reclamar cuando la respuesta de la empresa no es satisfactoria o atente contra principios básicos de justicia.»

Mayer agregó que el tema tiene ribetes económicos y éticos, considerando que «Fernando Cañas, de acuerdo al diario La Tercera del 22 de abril de este año, es uno de los sillones mejor pagados del Banco Chile, con $ 591,7 millones de pesos anuales, es decir, nuestro Gerente General gana 101 veces más que lo que recibe el promedio de los socios del Sindicato.»

Asimismo, el presidente de la organización de los empleados de la institución bancaria se manifestó preocupadísimo en relación a la cantidad de trabajadores que serán afectados por el proceso de despidos ante la eventual fusión; respecto de las nuevas exigencias de productividad planificadas; y de la perspectiva con que la administración enfrentará la próxima negociación colectiva de 2008.

Andrés Figueroa Cornejo (Polo de Trabajadores por el Socialismo)