Los integrantes españoles de la Misión Internacional de Observación sobre Ejecuciones Extrajudiciales e Impunidad en Colombia, Mauricio Valiente y Enrique Santiago, denunciaron este martes que las fuerzas militares de ese país «ejecutan extrajudicialmente» a campesinos y luego los hacen pasar como «insurgentes dados de baja en combate». Las declaraciones de los europeos, quienes forman parte […]
Los integrantes españoles de la Misión Internacional de Observación sobre Ejecuciones Extrajudiciales e Impunidad en Colombia, Mauricio Valiente y Enrique Santiago, denunciaron este martes que las fuerzas militares de ese país «ejecutan extrajudicialmente» a campesinos y luego los hacen pasar como «insurgentes dados de baja en combate».
Las declaraciones de los europeos, quienes forman parte de un grupo de 13 especialistas, se produjeron durante un acto público en Madrid, donde explicaron que los uniformados «sean policías o militares», han desarrollado tácticas muy concretas y estudiadas para llevar a cabo los asesinatos, lo cual a su juicio provoca una «falta de transparencia».
Según el relato de los investigadores, en todas las ejecuciones se muestran patrones como la declaración de «muertos en combate» de los civiles, pues los actos se efectúan en zonas donde hay presencia de insurgentes.
Otra técnica aplicada por los agentes es la del levantamiento de los cadáveres por los mismos verdugos, luego de lo cual se procede a ocultar los cuerpos y las evidencias de su verdadera identidad. Como consecuencia, las familias de los campesinos muertos no pueden reconocer a sus allegados ni mandar peritos privados para la evaluación de las pruebas.
Además el estudio, que contrasta 132 testimonios sobre estos hechos con informes de las instituciones colombianas, critica que la Fiscalía colombiana «no reclama la competencia» para juzgar estos casos, con lo que se deja en «desamparo» a las familias que piden la la «participación de la Justicia» y al no obtenerla responden a menudo «con actos de venganza y criminalización».
«La Fiscalía en raras ocasiones plantea cuestiones de competencia», comentó Santiago, «por lo que no hay esclarecimiento de los hechos ni condena de los culpables».
Entre las posibles causas de estos graves hechos el estudio revela el pago de incentivos a las tropas a la hora de presentar resultados en las operaciones militares.
Junto a los activistas estuvo presente Wilson David Higuita, un representante de los campesinos de la Comunidad de Paz de San José de Apartadó, quien dijo que el Gobierno del presidente Álvaro Uribe quiere «exterminar» a su comunidad para que la comunidad internacional no vea la «situación de guerra» que vive Colombia, pues Uribe prefiere presentarlo como «un problema de narcotráfico».
Los integrantes de la misión viajaron a Colombia para estudiar las cerca de mil ejecuciones extrajudiciales que se han cometido en el país desde 2002.
Con su informe, la comisión de especialistas entregó una serie de recomendaciones a las autoridades de Bogotá para intentar frenar los homicidios.
Entre los consejos figuran la preservación de las evidencias, que el levantamiento de los cuerpos y registro de la escena del crímen esté siempre a cargo del Cuerpo Técnico de Investigaciones (CTI) y que se acuda un «juez de garantías».
Asesinan a joven comunista colombiano
Mientras, en otra ifnormación, Alirio Quiñonez, miembro de la juventud comunista de Colombia, fue asesinado en extrañas circunstancias el pasado 19 de enero.
El joven, se había exiliado en el venezolano estado Apure (suroeste), tras haber denunciado ante la Fiscalía Colombiana persecuciones por parte del Ejército de Colombia y los organismos de inteligencia.