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Mi respuesta al FPMR

«Saludamos todas y cada una de las luchas que se dan»

Fuentes: Rebelion

He resuelto la publicación de la presente movido por la necesidad de clarificar una serie de inexactitudes expuestas por el señor Jorge Galvez Iturra dirigente nacional del FPMR, en una carta que me enviara hace algunos días y que por decisión del Comité Ejecutivo de la CGT, fue enviada a todos aquellos con los que […]

He resuelto la publicación de la presente movido por la necesidad de clarificar una serie de inexactitudes expuestas por el señor Jorge Galvez Iturra dirigente nacional del FPMR, en una carta que me enviara hace algunos días y que por decisión del Comité Ejecutivo de la CGT, fue enviada a todos aquellos con los que nos vinculamos regularmente.

Gálvez inicia su misiva dando a conocer la molestia que han provocado en el FPMR algunos de los comentarios que regularmente se están emitiendo con mi nombre al pie de los mismos. Hasta se toma el tiempo para dar las fechas y el nombre de las actividades criticadas.

Sin embargo y como no expresa crítica a todos los artículos publicados, debo concluir que hay algunos que han llamado su atención y no le molestan. Esto es muy importante pues varios de esos artículos dan cuenta de actos de prepotencia, corrupción y desprecio a la clase trabajadora, actos que en los que están involucrados ‘dirigentes y asesores clasistas’ además de ‘defensores a ultranza de los derechos de los trabajadores’.

Quiero agradecer al FPMR su atención con este material y ojalá nos pudiera ayudar a difundirlo, habida cuenta de los pocos espacios con los que cuenta el pueblo para conocer hechos como los denunciados. Ojalá ninguno de los cuadros sindicales que conforman sus filas esté involucrado en hechos reñidos con la moral -no digamos revolucionaria para no ser tan ampulosos, sino solo sindical- aunque me imagino que de suceder algo así, serían drásticos en las sanciones.

 

En lo que respecta al artículo ‘Para una movilización efectiva’, Gálvez y sus compañeros consideraron solo lo que les permite fundamentar sus críticas y no se tomaron la molestia de analizarlo en su integridad. Lo digo con certeza y responsabilidad. Mienten cuando dicen que se llama a no participar.

También digo que mienten cuando afirman que parte de la CGT está trabajando en ‘su proceso de construcción’. Ya lo quisieran, pero no es así. La CGT trabaja en sus propios proyectos -que por lo demás fueron resueltos en encuentros amplios y abiertos- y si por ahí algún dirigente ha dicho que vuestra propuesta lo representa, sepa que jamás lo ha expresado en los encuentros de dirigentes que regularmente realizamos, lo que le resta valor a cualquier planteamiento.

 

Si vamos a criticar el quehacer de otros, seamos claros. No hemos sido nosotros los que tomamos el nombre de organizaciones para convocar a actividades sin consultarlas previamente, ni hemos convocado a actividades en los mismos lugares donde ya otros las habían resuelto. Esto lo hemos sufrido como organización y ha sido el FPMR junto a otras ‘organizaciones con un gran arraigo social’ los que han promovido tal actuar (manifestación de estudiantes 2006, actividad final por Santa María de Iquique, diciembre 2007).

 

Se equivoca el FPMR al juzgar a nuestra organización. Estamos muy lejos de ser soberbios, así como nos gratifica que sindicatos y trabajadores nos visiten para organizarse o estrechar lazos con nosotros, también nos satisface ver como se desarrolla la organización en otros lados. Nunca hemos descalificado a una organización. Pero -y se lo repito aunque le duela- una cosa es la organización real y otra muy diferente es la suma de siglas y consignas. Lamentablemente hoy aún es mas lo segundo que lo primero. Mientras siga siendo así, seguiremos diciendo lo que pensamos.

 

Nuestros materiales no llevan encendidas consignas, simplemente explican al trabajador como comenzar a sacudirse de la explotación. El primer objetivo, creemos, es devolver al trabajador la confianza en si mismo y mostrarle como hacer organización.

Cuando estén educados en sus derechos, con organizaciones activas y deban luchar por lo suyo, tendrán claro el camino a seguir y en tanto aumente su conciencia de clase (nuestra obligación es trabajar todos los día en ello), comprenderán que para la total dignificación es necesario un nuevo sistema social.

¿Por que debiéramos poner la carreta delante de los bueyes?

¿Solo por agradar al FPMR?

 

Respondo con franqueza su pregunta. Aún no hemos llamado a ninguna gran movilización y seguramente no hemos confrontado al sistema como al FPMR le agradaría. Pero hemos tenido a miles de trabajadores en huelga en la calle y tomándose aquellos lugares que se consideraban necesarios para lograr el objetivo, se han obtenido grandes victorias y sin duda mejoró la percepción de los trabajadores respecto de su fuerza propia y obviamente la confianza en su organización de base y la nacional. Así es que cuidado con el filo de su lengua -no vaya a terminar cortándose- no somos de estar en mullidos sillones mirando la tele, ni tomamos un taxi a la primera aparición de la represión. Somos organización sindical, activa, viva y en permanente crecimiento.

Nuestros dirigentes no necesitan colgarse de un emblema, ni de una bandera para llamar la atención, menos aún de la gloria pasada de referentes que jugaron un gran papel en la lucha contra la dictadura. Los dirigentes y los socios de la CGT están donde deben estar, no todos los que quisiéramos pero están y nos enorgullecemos de ellos. Probablemente no califiquemos hoy como revolucionarios según vuestro particular prisma, pero tenemos muy claro hacía donde vamos y lo que queremos.

 

Es bueno que sepa el FPMR que no miramos en menos el trabajo de nadie. Saludamos todas y cada una de las luchas que se dan, incluso las de quienes no comparten nuestros planteamientos (solo deben visitar nuestra pagina web para constatarlo). Hemos hecho de la solidaridad mas que un discurso una cuestión efectiva, y solo podría achacársenos que no convoquemos aún a todos los dirigentes y trabajadores que debiésemos. ¿Y no es acaso ese un mal de casi todas las estructuras sociales en estos tiempos?.

Concientes de las limitaciones seguimos trabajando en procura de nuestras metas, no nos comparamos con otros y ojalá incluso fuéramos los más débiles, pues eso indicaría que ya hay cientos de miles que se la están jugando y que falta menos para la meta que nos hemos propuesto. Siempre estaremos junto a los que buscan mejores horizontes.

Pero no nos pidan que nos pongamos la venda ni que repitamos discursos preparados por otros.

La gran crisis del movimiento sindical tiene su origen justamente en el error de haber permitido que personas ajenas a los problemas reales y cotidianos de los trabajadores, definieran el que hacer de la organización sindical y la utilizaran para fines ajenos a los de la clase. Lo mismo puede aplicarse a las orgánicas sociales de todo tipo, poblacionales e incluso estudiantiles.

Aún hoy y pese a las malas experiencias vividas, todavía persisten algunos en querer ‘darle la línea’ al movimiento, ¿y que han logrado?. Pequeños avances que no van al fondo del problema, bonos en dinero que se van como la sal en el agua y diversas estructuras sindicales, que por alguna razón aún no logran cuajar una gran y única organización.

 

Hemos sido muy enérgicos en llamar la atención sobre esta deficiencia y lo seguiremos haciendo por que sin solucionarla en forma efectiva, no lograremos el avance popular al que todos aspiramos.

Sobran las razones que expliquen porque no estaremos en convocatorias a jornadas de protesta que hasta ahora, lamentablemente, están demostrando estar al margen del sentimiento popular. Acúsenos de lo que quiera, pero es bueno que sepa que piensan los trabajadores y los pobladores que están en los barrios cuando se producen las protestas. Miedo generalizado, destrucción del entorno, saqueos, obligación de pago de peaje, y un largo etcétera.

La gente está descontenta con el sistema, pero la impresión que tengo es que no se le están proponiendo alternativas de salida creíbles. La población no está dispuesta al mismo tipo de protesta que en tiempos de Pinochet y la verdad es que nos falta a todos un montón para sintonizar de verdad con sus necesidades.

De poco sirve seguir sacando cuentas alegres en función de las encuestas, lo concreto al final del día que la gente sigue eligiendo a los mismos porque nosotros, los que hablamos de renovar, de cambiar, de revolucionar no hemos tenido la capacidad de construir una propuesta y sacarla adelante con esas grandes mayorías silenciosas.

 

Hace algunos años nuestra organización sufrió un gran conflicto interno cuando algunos, creyendo ser los dueños de ella, ordenaron a sus militantes cambiar los dirigentes que ya no respondían ‘a las ordenes del Partido’. Pudimos hacer un gran escándalo y tener alguna figuración mediática, sin embargo dejamos que fueran las organizaciones de base las que resolvieran la situación. Queda suficientemente claro que no nos sometemos a los mandatos de nadie. De NADIE.

 

Es bueno que sepa el FPMR que la CGT seguirá con su itinerario, por lo demás acordado y ratificado en los diferentes encuentros sindicales que hemos realizado en estos años. Que no dependemos para nuestro trabajo de lo que pudieran pensar o no pensar ustedes.

En el sindicalismo organizado todos nos conocemos y sabemos cuanto pesamos. Seguiremos convencidos que el tiempo de los trabajadores se comenzará a anunciar cuando ellos comprendan la importante fuerza que son y resuelvan sus acciones pensando en el bienestar de la clase organizada y no si estas acciones van a dar mas o menos importancia a un referente político determinado.

Para eso, siempre estaremos dispuestos.

MANUEL AHUMADA LILLO – PRESIDENTE C.G.T.