Como de costumbre, todas las mañanas sintonizo el dial para escuchar las noticias del día, cuando de pronto en una noticia extra de última hora se da a conocer la muerte del jefe guerrillero más conocido en el mundo partisano «El Mono Jojoy». Se me viene a la mente que cada que se le da […]
Como de costumbre, todas las mañanas sintonizo el dial para escuchar las noticias del día, cuando de pronto en una noticia extra de última hora se da a conocer la muerte del jefe guerrillero más conocido en el mundo partisano «El Mono Jojoy».
Se me viene a la mente que cada que se le da un golpe certero a las FARC, siempre se le ha dicho al incauto e ingenuo pueblo colombiano que por fin las FARC han sido «derrotadas», y que la prosperidad nos va a arropar (leche, miel vendrán a este sufrido pueblo colombiano).
Recordamos algunos hechos históricos donde las FARC han sido derrotadas:
Año de 1964, la retoma de las repúblicas independientes rio chiquito, el pato, guayabero y marquetalia en el «Plan Laso» (Latín American Security Operation) del gobierno norteamericano John Fitzgerald Kennedy, operativo que se realizó con 16 mil soldados por tierra y aire en estos pequeños caseríos para combatir una insurgencia insipiente que no llegaba ni siquiera a los cuarenta hombres, y estos a su vez armados con unas escopetas de fisto ¡por fin fueron derrotadas las FARC!. Basta no mas con leer una de las obras de el gran historiador Arturo Alape (Las siete muertes de «Tirofijo»).
Recordamos otro hecho histórico, La Operación Casa Verde, llamada oficialmente Operación Colombia, fue una operación militar perpetrada por las Fuerzas Militares de Colombia, siendo presidente César Gaviria Trujillo, contra los campamentos de Casa Verde de la guerrilla de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) el 9 de diciembre de 1990. Tropas de la Séptima Brigada del Ejército de Colombia atacaron el área que cubre el río Duda, quebrada las Mil, las estribaciones de la Cordillera Oriental en el municipio de La Uribe, con el fin de desmantelar el Estado Mayor y el Secretariado de las Farc.
Recordamos los hechos más recientes: la operación Cóndor, la operación Jaque, la operación Fenix y la última, la operación Sodoma, obteniendo como resultados la desaparición de algunos miembros del secretariado de las FARC, Raúl Reyes, El Mono Jojoy, El Negro Acacio, entre otros.
Esto nos bastaría para decir que por fin en Colombia obtendremos la tan anhelada prosperidad que tanto ha pregonado el régimen psicótico y paranoico que nos gobierna.
El día Jueves 23 de Septiembre todos los colombianos despertaron con la noticia «dado de baja el sanguinario de las FARC». Será una fecha histórica para Colombia donde por fin será el país de las mil maravillas, abriremos los grifos y estos a su vez en lugar de salir agua saldrán ríos de leche y miel, ya no habrán más niños inhalando pegantes en las ciudades, las cocinas de los hogares más pobres estarán repletas de alimentos, nuestros campos reverdecerán trigo, sorgo y soya y así alimentaran a los más de 7 millones de indigentes que antes de la muerte del mono jojoy se peleaban un alimento putrefacto con las ratas, la clase trabajadora ya no tendrá más salarios de hambre y miseria sino que por el contrario con la muerte de este «sanguinario» de las FARC sus salarios se quintuplicarán, los métodos «sanguinarios» que utilizaba este guerrillero serán reemplazados por los métodos sanguinarios del paramilitarismo y seguirán descuartizando con moto sierras pies, manos y cabezas de los campesinos y luchadores populares o tirarán sus cuerpos a las fauces de fieras y cocodrilos en sus reservas naturales. Estos métodos sanguinarios son más estéticos y perfectos que los que practicaba el Mono Jojoy.
Los vendedores ambulantes (dulceros, lustrabotas, verduleros, vendedores de calzoncillos y medias, prostitutas, mujeres cabeza de hogar, jornaleros explotados, comunidad Lesbianas, transgeneristas, bisexuales y transexuales) entre otros ya no sufrirán los métodos «sanguinarios» del mono jojoy, sino que por el contrario estos pasaran al redil de lo más estético y perfecto del terrorismo de estado, a partir de dicha muerte todos los sectores de las capas inferiores serán los nuevos ricos de este país.
Los estudiantes de los estratos más bajos de las universidades públicas del país no tendrán que envidiarles para nada a los estudiantes hijos de la aristocracia nacional que estudian en las universidades privadas, los 450 mil damnificados por el UPAC que perdieron sus viviendas se las devolverán en hermosas mansiones, los miserables que viven en casas de cartón y de lata serán reubicados en grandes ciudadelas paradisiacas.
A partir del 24 de Septiembre ya no existirán desplazados ni desempleados, los ignorantes y tarados del régimen van a empezar a decir desde ahora ¡por fin se acabó el terrorismo de las FARC! «Es mejor el terrorismo de estado» porque este si trae bienestar y prosperidad a los intereses de los cinco ricos de este país, ya no existirá más deuda externa, esta por el contrario desaparecerá por arte de magia. Y los 54 mil millones de dólares que le debíamos al Fondo Monetario Internacional serán distribuidos a cada uno de los colombianos y nos tocará una cifra de 2’178.000 pesos.
¡Ah!, tampoco volveremos a ver niños desnutridos ni lombricientos en nuestras costas pacifica y atlántica, estos a su vez serán alimentados con yogurt de frambuesa, quesos Parmalat, extrañando sus alimentos tradicionales (caldo de agua con cilantro y sal), ni volveremos a ver indígenas pidiendo limosna en las calles, ni jóvenes prostituyéndose por un mendrugo de pan, se acabarán también los paseos de la muerte de los hospitales públicos del país.
Los derechos de la salud, educación, trabajo y vivienda digna dejarán de ser una quimera y se volverán una realidad. Las prepagos de RCN perdón de Radio Casa de Nari Vicky Dávila y Claudia Gusanatti, se excitarán sin necesidad de que la yema de un dedo toque sus genitales y celebrarán desde la intimidad con Carlos Ardila Lule el «éxito» de la hidra nacional, y como Salomé seguirán pidiendo la cabeza en bandeja de plata de quienes se sigan rebelando contra el Estado.
Fernando Londoño Hoyos, José Obdulio Gaviria, Plinio Apuleyo Mendoza, Roy Barreras, Los Olguín Sardi, y otros áulicos de la derecha «más tierna y humanista» de América Latina se regocijarán en la ciudad de Gomorra que se salvó de la operación militar de éste jefe guerrillero, ya que la Sodoma quedó totalmente destruida, ¿Quién destruirá entonces la ciudad de Gomorra?.
Alfonso Cano y otros jefes guerrilleros de las FARC atendiendo el llamado del pichón de ministro de defensa Rodrigo Rivera en estos momentos vienen trotando desde el cañón de las hermosas hasta Bogotá para decirle a Juan Manuel Santos «¡Aquí estamos, por favor no nos mate, salve usted la patria!»
Los falsos positivos, las chuzadas del DAS, la corrupción, el clientelismo, la entrega de los recursos naturales a las multinacionales, desapariciones forzadas. Son los métodos sanguinarios que se deben de imponer, que los colombianos y colombianas que no entren a este festín serán condenados por el tribunal de la Colombia de las mil maravillas.
Prosperidad, paz y armonía vendrán ahora si a nuestro país, y que con la muerte de este «sanguinario» de las FARC ahora si podemos exigir más alza de impuestos, mas falsos positivos, más miserias, mas terrorismo de estado. Estos son los «métodos sanguinarios que se deben imponer», ya que los métodos sanguinarios del Mono Jojoy no representaban los intereses de la clase dominante colombiana.
Los intelectuales, académicos, libres pensadores, defensores de derechos humanos, dirigentes de izquierda, serán reemplazados por los tarados, autistas, mediocres y bufones del sistema que son los que le sirven de arietes y cajas de resonancia a la «democracia más perfecta y humanista de América Latina».
Claudia Gusanatti y Fachito Santos deberán ser los próximos gobernantes de nuestra republiqueta del ubérrimo, el pensamiento de Bolívar será reemplazado por el pensamiento fascista de «Varito Vélez». Es lo único que nos faltaría para ser una republiqueta perfecta, siendo además el casino y el patio trasero de los norteamericanos.
Con la muerte del mono jojoy daremos la bienvenida y bendeciremos los métodos sanguinarios del estado, esos si son perfectos para los medios de comunicación que están al servicio de la clase política colombiana.
¡Viva la paz de los reinos de los infiernos, porque la paz de los reinos de los cielos se hace cada día más distante para los colombianos!
Por último para curarse en salud, quien escribe este artículo deja en claro que los verdaderos protagonistas de la guerra son los hijos del pueblo excluido llámense policías rasos, soldados rasos o guerrilleros rasos. Por ello hago un llamado desde este escrito a que terminemos la guerra y pactemos la paz con justicia social, sin mentiras y sin engaños.
Despertemos de la anestesia y antídoto que nos imponen los medios de incomunicación (RCN y Caracol).
(*) Jhon Jairo Salinas es miembro de REDEPAZ Quindío.
Rebelión ha publicado este artículo con el permiso del autor mediante una licencia de Creative Commons, respetando su libertad para publicarlo en otras fuentes.