El día sábado 30 de julio se desarrollo en el gimnasio del Liceo Carmela Carvajal de Prat de la ciudad de Osorno una Asamblea Ciudadana, la primera en su tipo, después de varias décadas de una prácticamente nula participación ciudadana, exceptuando las elecciones periódicas para elegir a nuestros «representantes». Quienes convocaban a esta actividad eran […]
El día sábado 30 de julio se desarrollo en el gimnasio del Liceo Carmela Carvajal de Prat de la ciudad de Osorno una Asamblea Ciudadana, la primera en su tipo, después de varias décadas de una prácticamente nula participación ciudadana, exceptuando las elecciones periódicas para elegir a nuestros «representantes». Quienes convocaban a esta actividad eran los estudiantes secundarios y universitarios y el tema central de la asamblea era discutir sobre que tipo de educación queremos para nuestra sociedad. Es entorno a esta actividad que me permito hacer algunas reflexiones.
En primer lugar quisiera recalcar la nula asistencia de quienes dicen representar nuestros intereses en los distintos cargos de nuestra organización política. No hubo presencia de concejales, de diputados, de senadores, ni representación del poder ejecutivo, así las cosas, queda claro el interés de dichas autoridades por los problemas reales que afectan a nuestra comunidad local y nacional. Cabe destacar la presencia de dirigentes vecinales y políticos pocos que por iniciativa propia asistieron y participaron en este instrumento democrático como lo son las asambleas ciudadanas.
En segundo lugar, es importante recalcar que la gran mayoría de oradores de dicha asamblea, además de proponer y evaluar lo que hasta ahora se ha avanzado (no hemos logrado nada aún en cuanto a refundar nuestro sistema educativo, sin embargo, hemos recuperado tiempo valioso en educación cívica), manifestaron abiertamente su absoluto rechazo a las actuales estructuras políticas más conocidas como partidos políticos. Estas anquilosadas estructuras de poder, están a la deriva y carecen de credibilidad ciudadana, lo que no significa que este movimiento ciudadano por la educación carezca de visión política, al contrario, se comienzan a abrir nuevas sendas que necesariamente demandan la refundación de las estructuras organizativas que ostentan el poder político en nuestro país, basadas en la representación miope, a veces favorable a los desfalcos de la patria y que carecen de altos niveles de participación como lo demanda un sistema democrático consolidado.
En tercer lugar diré que es evidente y necesaria la voz disidente, que no estuvo ausente en la asamblea ciudadana que comento. Evidente pues, hemos vivido un momento de involución democrática por alrededor de 40 años, periodo que coartó las libertades democráticas de las generaciones anteriores a la actual; el miedo político aún esta presente y los antivalores – como la competitividad, el individualismo y el egoísmo – que ha fomentado este sistema de organización política que tenemos, han calado hondo en nuestra sociedad, abiertamente escindida en clases sociales (neo apartheid). Necesaria, la disidencia, ya que no se pretende homogeneizar el pensamiento, mucho menos en una sociedad tan diversa como lo es chile. Y como dijo alguien en la diversidad esta la riqueza.
En cuarto lugar, es necesario consolidar este movimiento, más allá de los resultados que a corto plazo se puedan obtener, sean positivos o negativos a nuestras demandas ciudadanas. Se hace muy necesario, disputar el poder a las tradicionales fuerzas políticas que gobiernan nuestros destinos con intereses mezquinos. Urge la construcción de un frente político ciudadano apartidista (mientras los actuales partidos políticos no demuestren un compromiso real y de cara a los ciudadanos comunes y corrientes), con un programa que nazca de las bases sociales y se valide a si mismo, que nos represente en las próximas elecciones municipales como apronte a las elecciones verdaderamente importantes que son las parlamentarias y presidenciales del 2013. Se hace imprescindible la formación de líderes nacidos de la proclamación ciudadana.
En quinto lugar, quizás las expectativas estaban muy altas, de todos quienes asistimos a esta primera asamblea ciudadana, quizás hubo desorganización, quizás no se cumplieron las metas propuestas de antemano, no obstante, demostramos capacidad de autoconvocarnos y eso es sumamente importante, y por ello, se hace imprescindiblemente urgente volver a reunirse, dos, tres, cuatro y más veces si es necesario, para madurar nuestro proyecto político ciudadano aún en ciernes, y disputar el poder político que hasta ahora esta en manos de una minoría que no representa los verdaderos anhelos democráticos de la sociedad chilena. Avancemos desde las asambleas ciudadanas hacia el parlamento de Chile.
Por último, solo queda decir que Chile es un país riquísimo, uno de los lugares más privilegiados del planeta en cuanto a recursos naturales, tenemos más de 4000 km. de costa, recursos forestales prístinos que valen más in situ que talados, riquezas minerales variadas en el subsuelo. Los climas más variados están en Chile desde el desértico hasta el Polar. Sitios geológicos y glaciológicos únicos como lo es la Región de Los Lagos. Suelos cultivables para distintos tipos de productos agrícolas. Entonces ¿Como es posible que con todo esto en nuestro territorio tengamos un desarrollo humano tan bajo? ¿Qué paguemos por un sistema educativo que carece de visión de futuro? ¿Por qué recibimos un servicio en salud tan deficiente? Las mujeres y hombres jubilan de sus trabajos enfermos y empobrecidos. Acá hay algo que no cuadra y nuestros actuales «representantes» no han querido hacer nada para mejorar esta triste realidad. La historia es nuestra, el destino esta en nuestras manos, unidos lograremos ese chile lindo que anhelamos.
— Francisco Vargas Flores: Profesor de Educación Media
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