Las elecciones de este año para la Federación de Estudiantes de la Universidad de Chile, Fech, será la elección más importante desde el fin de la dictadura en la Universidad, en esta elección se esta jugando mucho más que la conducción de la federación de estudiantes de esta Casa de Estudios. Lo que realmente esta […]
Las elecciones de este año para la Federación de Estudiantes de la Universidad de Chile, Fech, será la elección más importante desde el fin de la dictadura en la Universidad, en esta elección se esta jugando mucho más que la conducción de la federación de estudiantes de esta Casa de Estudios. Lo que realmente esta en juego es la forma de conducir los procesos de lucha social que inevitablemente tienen un fuerte componente político, y un tremendo impacto sobre los jóvenes, las familias y el tipo de sociedad en que vivimos, como es el caso con la política educacional que tiene este país.
Es necesario votar por los candidatos y colectivos que hasta ahora han puesto en primer lugar y se la han jugado por los intereses de los estudiantes y no por los dictados de la cúpulas de sus partidos, o que han sido funcionales a las negociaciones de los diputados de sus partidos, que buscan sacar ganancias políticas particulares de las negociaciones a espaldas de los estudiantes.
Ninguna confianza en la Concertación y el PC.
Por supuesto que no se puede tener ninguna confianza en los candidatos que responden a los partidos de la Concertación o el Partido Comunista que viene siendo (con matices) más o menos lo mismo, a ellos no les preocupa resolver los problemas de la educación en Chile, sino lo que puedan sacar para sus propios intereses partidarios, tratando de dar la impresión de que están encabezando y respaldando las luchas estudiantiles.
Los dirigentes de la Concertación preparan su caballo de Troya.
Echando a saco roto las promesas de los dirigentes parlamentarios de la Concertación, que no llegarían a acuerdos con el gobierno de Piñera sin los estudiantes. Ahora Frei declaró que no escucharan a los estudiantes, que ya pasó ese momento, y que tienen que asumir su responsabilidad, en la votación del presupuesto. La Concertación que gobernó durante 20 años, entre ellos con Frei como presidente, tiene responsabilidad directa en la profundización de la privatización y el lucro de la educación chilena.
El desastre del crédito con aval del estado, fue creado por un ministro de la Concertación, bajo el gobierno de Lagos, Bittar. Este mecanismo ha arrastrado a las familias y los jóvenes a una trampa de endeudamiento por décadas, en beneficio de los bancos, que no corren ningún riesgo, mientras las Universidades subieron casi al doble los aranceles, aprovechando la existencia del crédito avalado por el Estado, convirtiendo al sistema de educación superior chileno en que tiene los cobros más caros del planeta..
Fue Bachelet la que se las arregló para traicionar las promesas hechas a los estudiantes secundarios y al país. La lucha de los pingüinos en el 2006, fue desviada a Comisiones de Expertos y al parlamento, y una vez desmovilizados los estudiantes, no se llegó a ninguna solución.
En realidad en todos estos años la política educacional de la Concertación y de la derecha han sido lo mismo. La vida nos ha enseñado que no se puede tener ni la menor confianza en la Concertación, y sus políticos.
El PC actúa como apéndice de la Concertación.
Para el Partido Comunista controlar la Fech es de vital importancia, dado que esta federación es la que les da la mejor vitrina para su partido, sin lugar a duda esta federación es la más mediática e influyente que existe en Chile, por esto mismo es tan cotizada por estos partidos, que la aspiran para utilizarla en sus negociaciones entre aparatos.
Controlando esta federación y con una política equivocada (a veces conscientemente) se pueden retrasar las luchas sociales que están asomando con fuerza en Chile, de hecho la principal falencia de la actual conducción de las juventudes comunistas con Camila Vallejo a la cabeza ha sido la falta de asociación real y concreta con otros sectores sociales, como los trabajadores y pobladores que debieran ser parte de este conflicto, pero para que esto ocurra, debe existir una política que apunte a unificar las luchas.
Pero llegando a acuerdos con la Concertación finalmente estas pactando con la derecha y esto inevitablemente implica traicionar los intereses de los estudiantes, aunque te juren de rodillas que no habrá traición al movimiento estudiantil.
No se puede permitir que las superestructuras partidarias articulen y elaboren «soluciones» sin los principales actores de las luchas, que en este caso son los estudiantes, no podemos permitir que la Concertación y el PC sigan haciendo su «pega», conduciendo las luchas a un callejón sin salida.
Nos preocupa la división de los luchadores en las elecciones FECH.
Entre los estudiantes en lucha de la U. de Chile, hay decenas de colectivos y opiniones diversas, eso es legitimo y no podemos sino felicitarnos del dinamismo de la discusión política y de la vida asociativa de los estudiantes. Pero nos preocupa que tantas listas diferentes que representan a jóvenes luchadoras/es compitan por separado. Llamamos a los estudiantes a privilegiar la Unidad, para cerrar el paso al gobierno que juega al desgaste del movimiento, y a la Concertación y sus satélites de la JJCC, que en realidad buscan cambiar algo para que todo siga igual.
Nos preocupa que los colectivos en lucha, caigan en la lógica de disputa de aparatos, privilegiando sus intereses estrechos por sobre los del movimiento en su conjunto. Para ganar necesitamos mantenernos unidos y no transar.
La conducción de la Fech debe recaer en manos de los verdaderos actores de esta lucha, los estudiantes que se han negado a ser parte de negociaciones secretas a espaldas de los estudiantes, que solo buscan desviar las principales demandas de los universitarios, y de los otros sectores del movimiento estudiantil.
No hay que abandonar a nuestros compañeros de otras universidades, especialmente a aquellos en las Universidades privadas posteriores a 1981, que lucran despiadadamente con las ilusiones de estos jóvenes. La gratuidad debe incluirlos, y todas las universidades que lucran durante años contraviniendo descaradamente la ley, deben ser expropiadas y nacionalizadas.
No hay que olvidar que este movimiento trasciende al ámbito puramente universitario. La FECH tiene que mantener y consolidar la alianza con los estudiantes secundarios, y técnico profesionales. Juntos podemos ganar, para el bien nuestro y de toda la sociedad, separados somos débiles.
Educación pública y gratuita para todos.
La educación debe ser gratuita para todos los jóvenes y también para los trabajadores que quieran estudiar, capacitarse o calificarse, para mejorar sus condiciones de vida y la de sus familias.
Estamos en un impasse.
Después de tantos meses de movilizaciones, enfrentados a la cerrazón del gobierno, necesitamos nuevas estrategias. Tenemos que sumar nuestras movilizaciones a las de otros sectores del pueblo trabajador.
Nos parece muy importante recoger la idea que ha surgido en distintos sectores de llamar a un Congreso Social Nacional, en defensa de la Educación Pública, de la Salud, de la Vivienda, de las Pensiones. Todos derechos convertidos en mercancías que tenemos que recuperar.
Por un Congreso Social
Un Congreso Social, podría colocarse a la cabeza de una movilización popular poderosa capaz de derrotar al gobierno reaccionario de Piñera.
Los estudiantes debemos apuntar a formar una poderosa alianza para ganar esta o futuras luchas, los estudiantes tenemos en la clase trabajadora organizada a su mejor y único aliado para que sus demandas se concreten.
Junto con la lucha por una educación pública y gratuita, debemos apuntar a cambiar este podrido sistema, para terminar con el lucro, debemos apuntar a terminar con el capitalismo.
Socialismo Revolucionario.