La Fundación Lazos de Dignidad COMUNICA a la opinión pública nacional e internacional, organismos defensores de derechos humanos y medios de comunicación, que las prisioneras en la Complejo Penitenciario de Picaleña (Ibagué-Tolima), mediante comunicación telefónica, nos informaron los siguientes: HECHOS 1. Desde el 8 de agosto de 2012, 34 prisioneras en la Complejo Penitenciario de […]
La Fundación Lazos de Dignidad COMUNICA a la opinión pública nacional e internacional, organismos defensores de derechos humanos y medios de comunicación, que las prisioneras en la Complejo Penitenciario de Picaleña (Ibagué-Tolima), mediante comunicación telefónica, nos informaron los siguientes:
HECHOS
1. Desde el 8 de agosto de 2012, 34 prisioneras en la Complejo Penitenciario de Picaleña (Ibagué-Tolima), se sumaron a la Jornada Nacional de Protesta Carcelaria mediante la declaratoria de Huelga de Hambre.
2. A la fecha, las huelguistas han cumplido 4 días sin ingerir alimentos, situación que ha deteriorado el estado de salud de las mismas, padeciendo fuertes mareos, nauseas, dolor estomacal, contracciones y debilidad en la movilidad.
3. De acuerdo a la información suministrada por voceras de las prisioneras, el INPEC no ha ofrecido la atención médica adecuada a las huelguistas y ha omitido el deber de atender sus justas peticiones enfocadas a solucionar la grave problemática que padecen en materia de salud, alimentación, comunicación, intimidad, visitas, distanciamiento, familiar, hacinamiento, entre otras.
ALERTAMOS QUE:
En 3 de los 21 establecimientos de reclusión donde se adelanta la Jornada Nacional de Protesta se encuentran en huelga de hambre alrededor de 11.000 prisioneros y prisioneras (COIBA Anexo Femenino de Picaleña, ERON Picota de Bogotá y Reclusión de Mujer El Buen Pastor de Bogotá), quienes han sido ignorados/as por el Estado Colombiano, permaneciendo sin solución sus justas peticiones, por lo que preocupa a nuestra fundación la vida, el estado de salud y la seguridad de los y las huelguistas.
Son más de 96 horas que los y las prisioneras han cumplido sin ingerir alimentos, situación que puede generar graves enfermedades, daños irreversibles y hasta la muerte, sin embargo, a pesar de estar el Estado Colombiano obligado a velar por la vida y demás derechos de las y los prisioneros en el marco de la relación de especial sujeción, a la fecha las autoridades competentes han hecho caso omiso a la declaratoria masiva de huelga de hambre y a la jornada de protesta nacional carcelaria adelantada contra la grave crisis humanitaria y las violaciones sistemáticas a los derechos humanos en las prisiones colombianas, con el agravante de estar incurriendo en omisión a su deber de ofrecer la atención medica del caso a los y las huelguitas.
Los y las prisioneras en huelga de hambre en cualquier momento pueden presentar complicaciones como:
· Enfermedad ulcero-péptica
· Hipotensión arterial ortoestática
· insuficiencia cardíaca, disminución del volumen circulatorio, taquicardia
· Insomnio fisiológico
· Disminución de la capacidad de defensa del sistema inmune,
· Atrofia de los músculos respiratorios
· Disminución de la masa cardíaca
· Trastornos endocrinos
· Daño permanente en órganos vitales bien sea por autodigestión o por fallas en otros órganos o glándulas (fallas renales)
Por lo anterior, RESPONSABILIZAMOS al Estado Colombiano por las violaciones a los derechos a la vida, salud e integridad personal que por omisión al deber de protección se consumen contra los y las prisioneras declaradas en huelga de hambre en marco de la Jornada Nacional de Protesta Carcelaria.
En virtud de la labor que desarrollamos en la defensa de los derechos humanos de la población reclusa formulamos las siguientes:
PETICIONES
1. Que el equipo médico del Comité Internacional de la Cruz Roja en aplicación del principio Fundamental de Humanidad con CARÁCTER URGENTE preste auxilio sin discriminación a los 11.000 prisioneros y prisioneras declarados/as en huelga de hambre en el COIBA Anexo Femenino de Picaleña, ERON Picota de Bogotá y Reclusión de Mujer El Buen Pastor de Bogotá, a fin de proteger la vida y la salud de los huelguistas y asegurarles el menor daño posible.
2. Que el Gobierno Nacional decrete la Emergencia Carcelaria en Colombia y se instale una Mesa Nacional de Concertación con participación de voceros de los y las prisioneras, a fin responder su pliego de petición y dar solución a la grave crisis humanitaria y de derechos humanos declarada por la Corte Constitucional desde el año 1998 como un estado de cosas inconstitucionales.