En la sede de la Procuradora General de Asturias (Oviedo), numerosas organizaciones se dieron cita este 19 de marzo para acompañar las iniciativas diversas en curso, para proteger, animar y desarrollar un proceso de paz en Colombia, que tiene su base en los deseos expresados multitud de veces por organizaciones sociales colombianas, y ahora también, […]
En la sede de la Procuradora General de Asturias (Oviedo), numerosas organizaciones se dieron cita este 19 de marzo para acompañar las iniciativas diversas en curso, para proteger, animar y desarrollar un proceso de paz en Colombia, que tiene su base en los deseos expresados multitud de veces por organizaciones sociales colombianas, y ahora también, en las conversaciones que se desarrollan en La Habana entre una de las guerrillas y el gobierno.
Ana Andrés Ablanedo, a nombre de la Plataforma Estatal por la Paz y los DDHH en Colombia (que agrupa a 40 organizaciones del estado español), explicó las intenciones del «conversatorio», recordó los dos antecedentes asturianos de encuentros realizados en 2006 y 2010, con el auspicio de la Axencia Asturiana de Cooperación, y animó a seguir ruta, asturiana, en este proceso complejo y necesario.
«Bienvenidos/-as a esta Ruta Asturiana por la Paz, a este acompañamiento al proceso de conversaciones para la PAZ en Colombia.
Conversaciones que han sido acogidas con mucha esperanza y que conviene arropar, por eso la reunión hoy aquí, en esta tarde de DIÁLOGO.
Están hablando el Gobierno Colombiano y las FARC-EP en La Habana y están aportando también el movimiento social y popular en muchos encuentros regionales, departamentales y nacionales en Colombia.
Tenemos que lamentar profundamente que todo ello se esté dando en medio de una feroz arremetida contra los derechos elementales, contra la vida y la integridad de la población civil.
En Asturies, existen dos actividades anteriores a esta con el mismo propósito. La primera en 2006 en el Hotel España y la segunda en 2010 en el Ilustre Colegio de Abogados de Oviedo. De ambas salieron sendas declaraciones, Primera y Segunda Declaración de Oviedo en las que se reconocía la existencia de un conflicto armado en Colombia, las causas estructurales de su existencia, la progresiva degradación que estaba sufriendo y la necesidad de llegar a acuerdos para «humanizarlo» – si esta palabra cabe…- Se recogía la necesidad de promover y facilitar los intercambios y acuerdos humanitarios, el respeto al DIH y el llamado a poner fin al conflicto social y armado de forma dialogada.
Fueron numerosísimas las organizaciones que desde diferentes partes del Estado Español se sumaron a la convocatoria que estaba en ambos casos avalada por la Agencia Asturiana de Cooperación, la Consejería correspondiente y la colaboración de representantes del Ayuntamiento de Gijón, la Universidad de Oviedo, partidos políticos y muchas organizaciones sociales asturianas.
Las dos Declaraciones tuvieron amplia cobertura estatal y europea y para su elaboración pudimos contar con la presencia de personas delegadas de diferentes organizaciones y movimientos populares colombianos, su iglesia católica, un ex Alto Comisionado para la Paz, un ex Embajador de España en Colombia y amplia representación del exilio.
Asturies, como bien sabemos, posee una peculiaridad en este tema, en la defensa de los DDHH en Colombia y la pelea por conseguir la paz para ese país, la paz justa, nunca la paz de los cementerios.
Esa peculiaridad es el Programa Asturiano de Atención a Víctimas de Violación de los DDHH en Colombia, que ha puesto ante los ojos de instituciones, de organizaciones asturianas y de la población en general la extemadamente grave situación de injusticia y emergencia social del país y ha conseguido además reforzar, de manera unitaria la solidaridad de esta tierra.
Ese programa ya ha acogido a 85 personas. Dos de ellas fueron asesinadas a su regreso. Otras tres, fueron encarceladas largos meses, incluso varios años, sin condena, sin juicio, sin delito. Otras tres sufrieron atentados y otras tuvieron que salir al exilio, a Venezuela, Suiza, Francia, también a Asturies y otros lugares del Estado Español.
El programa tiene un componente de verificación que ya se ha materializado en 8 visitas sobre el terreno y que tiene la novena ya organizada para salir esta misma semana. Desde el 21 al 3 de abril una delegación asturiana andará por tierras colombianas.
De todos y todas las que estamos aquí seguramente no hay una sola persona que no haya conocido a alguno que los compañeros/-as refugiadas. Por ello, la obligación es un poco mayor, porque el CONOCIMIENTO NOS HACE RESPONSABLES, porque es IMPOSIBLE MIRAR HACIA OTRO LADO, como dice un cómic del dibujante Zapico que editamos desde la CONGDE.
Comentaros que la jornada de hoy, es iniciativa de la Plataforma Estatal – Estado Español- para la Paz y los DDHH en Colombia, que conformamos más de 40 organizaciones de diferentes territorios – Euskalherría, Asturies, País Valenciá, Catalunya, Canarias y Andalucía y que ha acordado hacer actos territoriales como este para volcar más tarde, acuerdos, resoluciones y resultados en dos jornadas estatales en Madrid – 12/13 de abril y Barcelona en mayo. Todo ello será puesto en conocimiento de organizaciones, movimiento popular, Gobierno e Insurgencia Colombiana.
Queremos agradecer el acompañamiento continuado a la Procuradora Asturiana María Antonia Fernández Felgueroso a quien hemos invitado a acompañarnos y que lamentablemente no puede acompañarnos por complicaciones en la agenda. En su lugar tenemos a José Antonio Álvarez a quien le paso la palabra a continuación.
Habíamos trasladado invitación a la Directora de la Agencia Asturiana de Cooperación, quién tras habérnosla aceptado, el viernes disculpó su ausencia.
Comencemos entonces, desde la Rebeldía que nos da la Razón, la Dignidad de las víctimas, de defensores/as y luchadoras por la Paz y la Justicia Social esta RUTA ASTURIANA POR LA PAZ EN COLOMBIA enviando desde aquí a la Delegación institucional y empresarial que encabeza el Presidente de Asturias Javier Fernández en viaje por Colombia, la solicitud de que traslade al Presidente Juan Manuel Santos, en esa reunión que, al parecer, han previsto, todas las inquietudes y exigencias que desde los y las asturianas venimos haciéndole para el respeto a los DDHH y la solución política negociada a la guerra en Colombia»
José Antonio Álvarez, en representación de la Procuradoría General de Asturias, leyó el texto de la Procuradora de Asturias, en apoyo a la iniciativa.
Palabras de la Procuradora General
Sede de la Institución .
19 de Marzo de 2013 – 18 horas.
Os damos la bienvenida a esta casa cuando estáis a punto de comenzar una importante misión relacionada con la verificación de los derechos humanos en Colombia.
Nos gustaría acompañaros en este viaje porque parece que por primera vez en décadas, se abre un proceso de acercamiento de posturas entre el Gobierno del país y las FARC. Las conversaciones de paz abiertas en Cuba con el auspicio de este país, Noruega, Chile y Venezuela, puede ser un primer paso para poner punto final a casi 50 años de violencia que se han cebado, como siempre, con la sociedad civil, con los colectivos campesinos, con los más pobres y vulnerables. Deseamos que vuestra ruta para la paz llegue a buen término y pronto podamos ver luz al final de este largo túnel.
Quiero además agradecer el compromiso y la dedicación que Soldepaz Pachakuti ha desarrollado durante estos años en temas de solidaridad y cooperación internacional. Esta actitud abierta entronca con una cultura solidaria asturiana que ya conocí de primera mano desde la Fundación Municipal de Servicios Sociales de Gijón y desde la Presidencia del Consejo Municipal de Cooperación y Solidaridad Internacional.
Vuestra preocupación e implicación con los problemas de quienes están tan lejos y a la vez sufren tanto, ha sido siempre un acicate para las administraciones, tendentes por lo general a ocuparse sólo de los asuntos cercanos y dejar en segundo plano los lejanos. El papel de ONGs como la vuestra ha sido y es fundamental para dignificar la acción política, actuando en muchas ocasiones como la conciencia de quienes tienen en su mano la posibilidad de tomar decisiones o asignar recursos que pueden paliar injusticias o ayudar a que vuestros colectivos tengan capacidad para tener una presencia activa y real en los países en conflicto donde tantas veces se vulneran los derechos fundamentales.
Corren ahora malos tiempos para la solidaridad, el internacionalismo y la preocupación institucional por los lejanos.
La sociedad civil también se ha replegado ante los constantes recortes en sus condiciones de vida y una sensación general de que lo mejor que se puede hacer es estar en guardia y no arriesgar. Más ocupados en salvar bancos que en salvar personas, estamos retrocediendo en derechos fundamentales que nos afectan a nosotros, aunque este retroceso es mucho más dramático para los países que tradicionalmente han contado con nuestro apoyo moral y material.
En esta tesitura es aún más importante que nunca el papel dinamizador de organizaciones como la vuestra, capaces de seguir al pie del cañón, siempre en disposición de estar cerca de los más débiles y sin dejarse abatir o arrastrar por el tono general de nuestra sociedad.
En esta lucha siempre vais a contar con nuestro apoyo.
Muchas gracias».
Paz Andrés, catedrática de Derecho Internacional de la UniOvi, presentó y moderó la intervención de contexto de José Manuel Martín Medem
José Manuel Martín Medem, periodista, excorresponsal de RTVE en Bogotá, autor de varios libros, entre ellos Colombia feroz.
Se proyectó también la canción No a la Guerra, de Hoyo Colorao.
http://www.youtube.com/watch?
Martín Medem, además de profundo conocedor de la realidad colombiana, ha estado hace pocos días en Cuba y ha podido tener entrevistas con la delegación de las FARC, y conocer el «clima» de las conversaciones.
Comenzó recordando las anteriores conversaciones en el Caguán, consideradas como una artimaña de Pastrana, para ganar las elecciones primero, y para detener-entretener a la guerrilla por un tiempo, mientras se implantaba el Plan Colombia y se rearmaban poderosamente el ejército colombiano.
Señaló que el presidente Santos, como representante directo de la oligarquía potente de Colombia, tiene condiciones idóneas para negociar, si es que la oligarquía tuviera visos de ceder en algo su estricto control económico del país, y que ha lanzado su política de «prosperidad democrática» que tendría sustento en una paz posible con las insurgencias.
Si Marulanda viviera, dijo Medem, tal vez no se estuviera hablando en La Habana, pues el veterano comandante guerrillero siempre defendió la negociación en territorio colombiano, y sus sucesores aseguran que, ese era su deseo, pero el gobierno se ha negado en redondo, y ha sido decisiva la influencia e intermediación del gobierno venezolano y protagonismo de Chávez.
Las conversaciones actuales son un reconocimiento implícito a la beligerancia, las FARC plantean que de haber acuerdo después tendría que haber una Comisión Internacional para verificar, al igual que en otros procesos, como el de Irlanda.
Y juega en contra del éxito de la negociación el que Santos y su gente estén más atentos al juego electoral, a la reelección, que manejarían a su antojo, colocando un tiempo justo para llegar a acuerdos.
Martín Medem señaló que Cuba se ha convertido en la capital de Latinoaméricana: preside la CELAC, se celebran allí las conversaciones de paz entre guerrilla y gobierno, lo cual es un asunto de trascendencia continental, y ha sido el lugar donde se trató de luchar contra la enfermedad que acabó con la vida del presidente Chávez.
Medem explicó algunos de los pormenores de lo que se está hablando, con especial acento en la tierra, despojada masivamente durante la guerra sucia, ahora, antes, y mucho antes de que existieran las guerrillas, porque los paramilitares son muy anteriores y se prolongan hasta el presente, con una intensidad de represión que se evidencia cada día en persecuciones, asesinatos, desapariciones…
Recordó que además de la tierra, como punto neurálgico del conflicto, las FARC por primera vez en la historia de todas las negociaciones del mundo, han planteado la democratización de la comunicación, lo que muestra su interés en favorecer la democratización del país, pues sus propuestas en la mesa tienen ese sentido y no el de conseguir la revolución en una mesa.
Que los oligarcas estén en sintonía de conceder, dispuestos a entregar tierras y favorecer la democratización del país.. es lo que Martín Medem pone en duda, dada la avarienta historia de estas familias poderosas que controlan el país desde siempre.
El gobierno ha querido «aislar» la negociación en Cuba, lo cual no han conseguido y las miles de víctimas del conflicto están expectantes, preocupadas, proponiendo una paz que se haga sin crímenes de estado.
Texto de la Declaración de la Ruta Asturiana por la Paz de Colombia, firmado por 21 organizaciones sociales:
«Quienes suscribimos la presente declaración compartimos y acompañamos la esperanza de millones de colombianos-as que quieren la paz y la justicia social
Las negociaciones iniciadas en La Habana hace pocos meses, entre el gobierno de Juan Manuel Santos y la guerrilla de las FARC, son el mejor camino cuando ya se han transitado cincuenta años de conflicto armado interno. Es el camino que le pedimos al gobierno colombiano abra también para el ELN y el EPL.
En Asturias conocimos el impacto del conflicto armado en los derechos humanos a través de los testimonios de 91 personas acogidas al Programa Asturiano de Atención a Víctimas de Violación de DDHH (sindicalistas, dirigentes campesinos e indígenas y defensores-as de los derechos humanos perseguidas, amenazadas de muerte en los últimos doce años) y por las constataciones directas en las nueve visitas asturianas a Colombia para la verificación del estado de los DDHH.
Es un hecho la escalada de la violencia contra la población civil en las áreas donde además de guerra hay conflicto social, por eso acompañamos el reclamo de las organizaciones de derechos humanos a las partes en la mesa, para que se esfuercen en acordar un cese al fuego bilateral y de hostilidades, una tregua indefinida.
La certeza de que construir la paz y la justicia social es un reto para todos y todas, reclama la necesidad de que se habiliten espacios para que se garantice la participación de las organizaciones sociales en las negociaciones y en el desarrollo posterior de los acuerdos en forma de programas que eliminen la exclusión, la desigualdad, la impunidad.
Dadas esas causas objetivas del conflicto, se pude asegurar que la paz de Colombia será estable si se nutre de la agenda de paz construida durante décadas por los movimientos sociales y en particular por los campesinos, indígenas, negros, ambientalistas, sindicalistas, defensores-as de derechos humanos, y pedimos el cese de su estigmatización y represión, y garantías para su labor que en democracia es legítima.
Solicitamos concertar un ACUERDO ESPECIAL DE APLICACION INMEDIATA, como lo contempla el DIH. Se trata de acatar las normas humanitarias por todas las partes, fuerzas regulares e insurgencias, mientras persistan las hostilidades, aliviando los sufrimientos de la población civil y de los propios combatientes.
Pedimos al gobierno colombiano un tratamiento acorde a los derechos humanos y al DIH para cerca de diez mil prisioneros por delitos políticos como rebelión.
Lamentamos que el gobierno de España desde la ruptura de los últimos diálogos con la insurgencia hace más de una década, sólo se interese por los negocios de algunas empresas en Colombia y no por la situación de los derechos humanos. Le exigimos que apoye de manera pública y decidida los esfuerzos para darle una solución pacífica, negociada al largo conflicto armado interno que padece ese país.
Declaramos que desde Asturias acompañamos al pueblo colombiano en sus legítimas aspiraciones de paz y justicia social y que estaremos a su lado en el Encuentro para la Paz de los dias 12 y 13 de abril en Madrid, y en las demás iniciativas y esfuerzos comunes para tejer la paz en Colombia .
Oviedo, 19 de marzo/2013″.
Fuente: http://www.pachakuti.org/textos/hemeroteca/2013/ruta-ast-paz-colombia.html