El domingo 20 de septiembre dos caravanas bajaron por los valles de El Tránsito y San Félix con el fin de juntarnos en la Plaza de Alto del Carmen a celebrar merecidamente la clausura definitiva del Proyecto Pascua Lama. Las comunidades del Valle del Huasco sufrimos injustamente esta condena durante más de 20 años y […]
El domingo 20 de septiembre dos caravanas bajaron por los valles de El Tránsito y San Félix con el fin de juntarnos en la Plaza de Alto del Carmen a celebrar merecidamente la clausura definitiva del Proyecto Pascua Lama. Las comunidades del Valle del Huasco sufrimos injustamente esta condena durante más de 20 años y ahora por fin podemos pensar en cómo ir reparando el daño y la destrucción dejada por Barrick, tanto en nuestro tejido social como en los ecosistemas.
Al momento de reunirnos, la alegría y la emoción era a ratos difícil de contener puesto que son muchos años y tres generaciones las que están involucradas en esta hazaña. Sin embargo, no podemos dejar de mencionar la indebida intervención policial, que comenzó a hostigarnos desde el inicio de la manifestación, deteniendo la caravana dos veces en el Valle de El Tránsito y una vez en San Félix; y luego nuevamente en Alto del Carmen, intentando negar nuestro derecho a reunirnos con los debidos resguardos sanitarios que nosotros ya habíamos tomado (disposición sanitaria que nos rige actualmente, distanciamiento físico y mascarillas). En todas esas ocasiones, mintieron sobre los motivos de la detención, pasaron un parte por razones nimias, asustaron a algunos adultos mayores que decidieron regresar y anotaron los datos de algunos conductores en una abierta intención de amedrentar. Una vez más, queda claro cuáles son los intereses que defienden; ciertamente no los derechos de la ciudadanía que quiere manifestar su alegría por haber recibido, por fin, justicia.
Pese a todo eso y sin duda porque los sobrepasamos con nuestra alegría y decisión, después de algunos diálogos la policía entró en razón y pudimos continuar nuestra ruidosa y animada manifestación frente a la plaza. Con gritos, cánticos, banderas blanquiverdes al viento, abrazos y arengas, nos pusimos en la escalinata y frente al hermoso mural que se mantiene desde 2005 como testigo silencioso de lo que siempre hemos querido para este Valle: Proteger la Vida y la Creación.
Fueron muchos los testimonios que se dieron a viva voz y en las distintas transmisiones en vivo que hicimos por redes sociales, y emociona sobre todo la presencia de niños y niñas. Todos y todas quienes nos reunimos el domingo, sin importar el género, la edad y la procedencia, coincidimos en la alegría de haber dado una lucha justa y valedera, donde, como dijo una vecina: “ha imperado el valor de la conciencia y no de la ambición”, deseando que “ojalá sean más lo que se sumen a esta causa porque es la única forma de sobrevivir en la Tierra. Si bien esta celebración quedará para la historia, como dijo otro vecino: “no podemos olvidar que esto no termina aquí y que seguimos en pie, para que se una más gente a la defensa de este Valle, por los glaciares y por la vida”.
En definitiva, una de las lecciones que se deben sacar de todo esto es que nunca más se dejé de escuchar a las comunidades ante estos megaproyectos que son en sí inviables. Que no tengan que pasar otros 20 años para ponerle fin a la megaminería y a todos los proyectos que amenazan las nacientes de las aguas, comprendiendo que el AGUA SIEMPRE VALDRÁ MÁS QUE EL ORO. Del mismo modo, confirmamos que el poder está en el pueblo organizado, por lo que felices podemos gritar ahora más que nunca: ¡SÍ SE PUEDE!, ¡SI SE PUDO!
Video celebración: https://www.youtube.com/watch?v=FcJLGxUlOfc&feature=youtu.be y https://www.youtube.com/watch?v=XKVYl3reuk0&feature=youtu.be
Contacto: [email protected]