A 6 años de la revuelta popular de octubre, debemos de forma consciente prepararnos integralmente para salir nuevamente a las calles y esta vez lograr nuestras demandas. Este 18 de octubre las y los invitamos a protestar a las 18:00 horas en el Metro Universidad de Chile (Santiago centro). Las y los esperamos.
A 6 años del alzamiento popular de octubre, revuelta que nos demostró cómo los poderosos tiemblan ante la acción y el grito ensordecedor de justicia y rebelión de las y los pobres en su profunda ansia de cambios, y cuando de forma colectiva salimos a las calles a exigir nuestros derechos históricamente negados por los dueños del poder y la riqueza.
Si bien fuimos millones las y los que estuvimos en las calles en marchas, protestas, barricadas, asambleas, saqueos y ollas comunes, vemos que las condiciones de vida de las grandes mayorías populares no han cambiado, por el contrario, el pacto de dominación de la gran burguesía, los terratenientes y el bloque en el poder, a través de la propuesta de asamblea constituyente, del gobierno de Boric, Vallejo, Tohá, Jara, Marcel y compañía, de alguna forma lograron contener el rugido del pueblo que se volcó a luchar por su emancipación ese 18 de octubre, el acuerdo por la paz y la nueva constitución fue el paragua que las clases dominantes usaron para desviar y someter a un reflujo relativo al pueblo y sus justas luchas.
Sin embargo, no podemos olvidar los profundos aprendizajes históricos que la clase trabajadora y el pueblo volcados a la lucha desarrollaron; la energía transformadora que como un volcán en erupción sirvió para acorralar al poder; la valentía y el arrojo de cientos de miles, la solidaridad y el amor de la clase, son parte del acervo reciente de las y los empobrecidos para próximos combates. Pues bien sabemos que las condiciones para nuevas rebeliones están dadas: las demandas no han sido resueltas, sino más bien se han profundizado y se ve una relativa alza en la lucha de clases. La crisis imperialista, junto con la precarización del trabajo y la vida golpean con crudeza a millones de trabajadores y trabajadoras y sus familias, mientras la rabia contenida se acumula al interior de los hogares.
Hoy, en un nuevo escenario político – social, donde nuestro pueblo vive un proceso de reanimación en la lucha de clases, las y los poderosos buscan a toda costa cerrar el ciclo de lucha a su favor. De hecho, las elecciones son parte de esta estrategia. Nosotros y nosotras, las y los clasistas y populares, quienes luchamos por la emancipación del género humano, bien sabemos que la minoría en el poder solo buscan encauzar de forma institucional nuestras necesidades y empantanar nuestras luchas tanto reivindicativas como políticas. En las urnas no tenemos nada que ganar, pues para migajas no estamos y no seremos parte del circo de quienes nos dominan.
Estas últimas semanas hemos visto cómo una vez más se siguen desalojando a miles de pobladoras y pobladores, y a la vez a miles tomándose las calles luchando por la vivienda, exigiendo la aparición de Julia Chuñil y en solidaridad con la heroica resistencia Palestina. Sin contar la estafa multimillonaria de la corporación eléctrica Enel que cobró durante meses a la población sencilla el doble del IPC en las cuentas de la luz. Es por esto, que las tareas de la coyuntura pasan por rearmarnos política, ideológica y organizativamente, impulsar la construcción de organización y la lucha en los distintos niveles y sectores de nuestro pueblo; persistir en la articulación entre los sectores clasistas y populares, avanzando hacia la elaboración de un plan de lucha conjunta por las demandas y derechos sociales populares, y la construcción de un programa que permita hacerle frente al Estado empresarial y sus políticas de hambre y miseria.
Hoy sigue más vigente que nunca la lucha por vivienda y barrios dignos, por salud al servicio de la clase trabajadora, por acabar con el código laboral patronal, el subcontrato y la explotación, por sepultar la educación de mercado, por frenar las alzas de los alimentos y servicios básicos, por conseguir la libertad incondicional de todas y todos los presos por luchar.
A 6 años de la revuelta popular de octubre, debemos de forma consciente prepararnos integralmente para salir nuevamente a las calles y esta vez lograr nuestras demandas. Este 18 de octubre las y los invitamos a protestar a las 18:00 horas en el Metro Universidad de Chile (Santiago centro). Las y los esperamos.
¡A retomar las calles con organización y protesta popular!
Coordinación Clasista y Popular