Durante el último tiempo seguía dando seguimiento a materias de derechos humanos como el Plan de Búsqueda de detenidos desaparecidos y atento al acontecer internacional y nacional.
Profundo pesar causó la información del fallecimiento del abogado de derechos humanos y militante comunista, Eduardo Contreras Mella, originario de su querida Chillán, y que tenía 84 años.
Es larga e inmensa la trayectoria de Eduardo Francisco Contreras Mella, lleno de episodios gravitantes, luchas políticas, batallas judiciales, aportes a la cultura, trabajos notables en el exilio en Cuba y México, labor legislativa y su compromiso eterno con la defensa de los derechos humanos y la búsqueda y consagración de la justicia.
Uno de los hechos que lo ponía orgulloso fue el haber presentado, junto a la lideresa del Partido Comunista, Gladys Marín, la primera querella criminal contra el dictador Augusto Pinochet y las consecuencias en la detención en Londres, Reino Unido, del exmilitar.
Fue diputado por Chillán, ciudad de la cual fue alcalde y regidor. Militante desde inicios de los sesenta y miembro del Comité Central del PC durante muchos años. Destacado jurista, subdirector de El Siglo, columnista de varios medios de prensa nacionales y extranjeros. Profesor universitario en México y Chile, integrante de varias organizaciones de derechos humanos de Chile y otros países, embajador de Chile en Uruguay, egresado de la Universidad de Chile. En 1976 realizó un posgrado en Teoría del Estado en la Universidad de La Habana, Cuba, y en ese país trabajó en el Ministerio de Justicia; fue director de la Escuela de Derecho de la Universidad de Ciencias y Artes Sociales (ARCIS) y director de la Casa Chile en México. En 2022 publicó su libro “Habitante de dos siglos: memorias de un hombre feliz”.
Eduardo Contreras era un amante del tango, de la literatura, de las tertulias, del debate, con enorme sentido del humor, riguroso y apasionado en las múltiples causas de derechos humanos que llevó adelante.
Durante el período dictatorial, tanto en Chile como en el exterior, realizó delicadas tareas encomendadas por su partido. Tuvo relaciones cercanas con dirigentes políticos cubanos y mexicanos y mantuvo lazos de trabajo y coordinación con destacados juristas de países europeos y latinoamericanos.
Durante el último tiempo seguía dando seguimiento a materias de derechos humanos como el Plan de Búsqueda de detenidos desaparecidos y atento al acontecer internacional y nacional.
Se velatorio se realiza en la Casa Museo Michocán de los Guindos («La Michoacana») en la comuna de La Reina, mientras se expresan muestras de tristeza por su fallecimiento y el reconocimiento a su destacada trayectoria como militante comunista y abogado.