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Comunicado a la opinión pública

Abuso de autoridad, negligencia y violaciones sistemáticas de los derechos humanos de la población privada de la libertad

Fuentes: Equipo Jurídico Pueblos

Los internos del complejo penitenciario y carcelario Metropolitano de Cúcuta, por medio del presente nos permitimos poner en conocimiento de toda la ciudadanía, las actuaciones cargadas de ilegalidad e inconstitucionalidad, como abuso de autoridad, negligencia, violaciones sistemáticas de los derechos humanos de la población privada de la libertad. Además de cometer delitos graves contra la […]

Los internos del complejo penitenciario y carcelario Metropolitano de Cúcuta, por medio del presente nos permitimos poner en conocimiento de toda la ciudadanía, las actuaciones cargadas de ilegalidad e inconstitucionalidad, como abuso de autoridad, negligencia, violaciones sistemáticas de los derechos humanos de la población privada de la libertad.

Además de cometer delitos graves contra la administración pública, contemplados en el régimen penal colombiano y el código disciplinario único, por parte de la señora, doctora BEATRIZ HELENA SEPÚLVEDA GRISALES y la señora comandante del cuerpo de custodia y vigilancia, Mayor NANCY PÉREZ.

Hacemos desde ya la invitación a los organismos de control como Defensoría del pueblo, seccional Cúcuta, Norte de Santander, Procuraduría General de la nación, regional- Cúcuta- Norte de Santander. Igualmente a las autoridades judiciales y Policía judicial INPEC, (P.J) Fiscalía General de la Nación, Policía Nacional, para que hagan presencia en este complejo penitenciario, con el fin de investigar una serie de casos insólitos, ocurridos a los internos de la cárcel de Cúcuta en lo que va corrido de este mes, con desenlaces fatales en los internos. Señores EDINSON JAVIER ACOSTA CASTRO, CARLOS ENDER CAMACHO GÓMEZ, quiénes fallecieron por falta de una oportuna atención médica, porque si hubiera existido una pronta atención se había podido realizar las respectivas terapias de la medicina alópata o tradicional, prolongando con esto la vida de éstos señores y evitando así el dolor y el sufrimiento de sus familiares y seres queridos por la partida absurda de un ser amado.

No conformes con ésta serie de irregularidades, la gota que llenó la Copa, sucedió con el accidente de alta complejidad sufrido por el señor amigo y compañero nuestro HERNAN GARAVITO SALAZAR, puesto que quedo gravemente herido por la explosión de un transformador de alta tensión que se encuentra en la subestación de energía que se haya en el interior de la cárcel.

Teniendo en cuenta que para un interno, poder desplazarse hasta este sitio debe traspasar varios puestos de control de los miembros del cuerpo de custodia y vigilancia, entonces de manera que para podernos desplazar hasta este punto, se debió de contar con el permiso o autorización por parte de la Directora, de este complejo BEATRIZ HELENA SEPÚLVEDA GRISALES y la autorización de la comandante del cuerpo de custodia y vigilancia de este complejo, Mayor NANCY PÉREZ .

Quién autorizó que un interno de la cárcel de Cúcuta, sin más conocimiento que el deseo de ayudar y colaborar, haya sido expuesto de una manera tan miserable, sin los dispositivos de protección y sin el conocimiento técnico, que se requiere para el desarrollo de éste tipo de actividades. El señor HERNÁN GARAVITO SALAZAR, sufrió quemaduras de primero, segundo y tercer grado en la cara y diferentes partes de cuerpo, es posible la pérdida de un ojo y amputaciones parciales de los miembros superiores.

Hacemos responsables a la señora directora del complejo penitenciario y carcelario Metropolitano de Cúcuta, BEATRIZ HELENA SEPÚLVEDA GRISALES igualmente a la comandante del cuerpo de custodia y vigilancia, Mayor NANCY PÉREZ.

Exhortamos a la clase política y dirigente de este departamento, revisar cuidadosamente las hojas de vida y antecedentes psicológicos y psiquiátricos de las personas que van a nombrar en diferentes cargos, también la personalidad, que sean seres humanos con capacidades para respetar los derechos humanos de las personas privadas de la libertad, que si bien es cierto que hemos cometido un delito, merecemos que nuestros derechos humanos, dignidad y vida sean respetados.

Atentamente Movimiento Nacional Carcelario
Complejo carcelario de Cúcuta.