Recomiendo:
0

Respuesta a Francisco Umpiérrez

Acerca de los pretendidos Errores de la izquierda radical (2)

Fuentes: Rebelión

«La izquierda radical, muy aquejada de extremismo y absolutismo, no sabe que es necesario apoyarse en las fuerzas del contrario para derribarlo; táctica que hay que emplear sobre todo cuando las fuerzas propias son pocas y fragmentadas» (Francisco Umpiérrez Sánchez, http://www.rebelion.org/noticia.php?id=16708). Si tenemos en cuenta su discurso en este trabajo y anteriores, interpreta esa idea […]

«La izquierda radical, muy aquejada de extremismo y absolutismo, no sabe que es necesario apoyarse en las fuerzas del contrario para derribarlo; táctica que hay que emplear sobre todo cuando las fuerzas propias son pocas y fragmentadas» (Francisco Umpiérrez Sánchez, http://www.rebelion.org/noticia.php?id=16708).

Si tenemos en cuenta su discurso en este trabajo y anteriores, interpreta esa idea de Lenin no revolucionariamente como figura en «La Enfermedad Infantil del Izquierdismo en el Comunismo», donde nos enseña como instrumentalizar las instituciones del Estado burgués, para aprovechar sus tribunas y poder realizar agitación comunista. En esa obra Lenin parte de que se da por supuesto la comprensión del Estado alternativo proletario al burgués que era el Soviet, una utilización que no pretende perfeccionar la maquinaria estatal burguesa sino destruirla, y por supuesto coincidiendo con Marx, no cuelga en el cielo al Estado, cosa muy religiosamente asumida por el compañero Francisco, que no cree en el sujeto histórico llamado a ser protagonista del proceso revolucionario, ni en la unidad dialéctica existente en todo proceso revolucionario del factor objetivo y subjetivo, cree en la realidad económica del capitalismo, en los valores de la dinámica económica capitalista como factores de cambio y como formas que se darán en el socialismo. Con esa frase mal interpretada de Lenin nos quiere decir, no debemos generar nuestras propias fuerzas, ya que como somos pocos y además fragmentados, imposible ganar al enemigo, que aunque sea una clase social minoritaria, tiene mucha economía, y eso es sagrado, tenemos que ganarnos nuestra propia bendición económica tácticamente. Lo mejor es confiar en las fuerzas del enemigo, ser tácticos cuando nos atacan nos colamos dentro la oficina del atacador, entramos en la bolsa, o en el banco si este el que nos ataca, cogemos sus ordenadores, los trastocamos y empezamos a dar duros por pesetas. En un par de días los explotados todos ricos y los minoritarios explotadores convertidos en pobres. Si nos atacan con tanquetas, sigilosamente nos introducimos dentro de la tanqueta, sustituimos al guardia tirador y disparamos contra el explotador, como además aunque sean dueños de las tanquetas son muy poquitos sus dueños, los matamos rápidamente a todos.

«1. Naturaleza del Estado y sistema de gobierno. Mucha gente de la izquierda radical sigue confundiendo la naturaleza de clase del Estado con el sistema de gobierno. Es más: cuando habla del socialismo, sólo habla de la naturaleza de clase del Estado y se olvida del sistema de gobierno. El Estado español es un Estado capitalista, no porque la clase dominante sea la capitalista, sino porque el modo de producción predominante es el capitalista. Y el hecho de que el modo de producción capitalista sea el predominante, hace que la clase capitalista sea la dominante. El carácter de dictadura estriba en que tanto bajo el punto de vista constitucional como bajo el punto de vista económico, dicho Estado asegura que el capitalismo sea el modo de producción predominante. El reconocimiento de la propiedad privada sobre los medios de producción es la expresión ideológica de esa dictadura. Pero esto no quita que bajo el punto de vista del sistema de gobierno el Estado español sea una democracia. Será todo lo formal que se quiera y todo lo burguesa que se pretenda, pero como sistema de gobierno es una democracia. Desgraciadamente mucha gente de la izquierda radical sólo se preocupa de destacar el carácter de dictadura del Estado socialista, el hecho de que sea la clase obrera la clase dominante, pero se olvida por completo del sistema de gobierno. No ve que la dictadura del Estado socialista significa que este Estado asegura el predominio de la propiedad pública sobre los medios de producción. Pero predominio no significa dominio absoluto. En la primera fase del socialismo, de acuerdo con la experiencia real del socialismo, será necesario la economía mercantil, el pequeño capital y el capitalismo de Estado. De manera que será también necesario, bajo el punto de vista del sistema de gobierno, el pluripartidismo. Es más, la clase obrera no es una clase homogénea, tiene muchos sectores y distintas capas. De manera que lo natural sea que la representación de esa clase no la ostente un solo partido, sino dos o más»

Esa separación entre «Estado natural» y gobierno, la verdad es que no la habíamos oído pronunciar anteriormente a ningún marxista. O sea que el Estado Burgués no esta constituido por tres poderes, el legislativo, el judicial y el administrativo o gubernativo, más ese otro, que los más izquierdosos denominan cuarto poder. Vamos que los gobiernos no son parte del estado. El amigo Francisco nos viene a decir: en el Estado con naturaleza propia si la producción es socialista entonces es socialista, si produce de forma capitalista es capitalista. Nos dice que los medios de producción de propiedad privada solo es una manifestación ideológica, que nada tiene que ver con la naturaleza clasista del Estado. Su estructura no tiene que cambiar, la maquinaria estatal burguesa puede servir para hacer socialismo o capitalismo. Marx por lo que nos dice nuestro compañero se equivocó cuando pretendió que se mandara al basurero de la historia a la vieja maquinaria estatal burguesa y defendió como forma alternativa estatal la de la Comuna, donde el poder legislativo y ejecutivo eran un todo, se legislaba y se ejecutaba al mismo tiempo, sin tener que recurrir a la división de poderes del Estado Burgués. No se da cuenta que con esa división clasista en lo económico del Estado burgués, se perpetua la división política de la sociedad en clase política y sociedad civil. En los reyes y tribunos tan denostados cuando cantamos la Internacional, cuando al mismo tiempo su letra defiende que seamos nosotros mismos los llamados a protagonizar el proceso liberador, ya organizados como clase dominante con nuestro propio estado comunal. A lo mejor Francisco no conoce la letra y si la conoce no le dice nada, es un canto sin significado revolucionario.

«Pero esto no quita que bajo el punto de vista del sistema de gobierno el Estado español sea una democracia. Será todo lo formal que se quiera y todo lo burguesa que se pretenda, pero como sistema de gobierno es una democracia«.

Viva ZP, muera Franco le bastó decir. Es una lastima que Francisco no pueda darnos una sola cita de Marx, Engels o Lenin en la que poder sustentar esa sintética frase, fruto de su interpretación marxista sobre la función histórica del Estado y la Democracia.

Pero como ya conocemos la concepción religiosa que nuestro compañero Francisco hace del Estado, entendemos por qué lo dice. Si el estado para él es algo colgado del cielo, no debemos confundirlo con los gobiernos que es otra cosa más cercana, más real, que se ve. Se ve a Aznar, a ZP, a Chirac con su República, a Franco con su dictadura. Cada uno con su forma de gobernar, nos quiere decir que no ejercían la dictadura de clase burguesa contra la clase social antagónica, contra los trabajadores. No predomina la clase capitalista con su forma de dominio que la situación histórica determina en cada momento, nos dice, es el sistema productivo el que es capitalista, no sirve a la clase en el poder, sirve a… no se quién. Los conceptos abstractos sin contenido material dan lugar a esas idealidades gubernativas y estatalistas. Es la forma superficial lo que se admite como concepto dictadura, el fondo para qué tocarlo, las dictaduras de clase no existen, solo si los gobiernos actúan dictatorialmente en vez de «democráticamente». Franco era un dictador, no porque sirviese a los intereses oligárquicos, sino por la forma de defenderlos, sin embargo Chirac no ejerce el papel dictatorial sobre la clase explotada, es un «demócrata», ¿a que dictadura de clase sirve?. A lo mejor es que con su interpretación del desarrollismo capitalista, las contradicciones van desapareciendo, y llegará el momento que al dejar de existir clases sociales antagónicas, todos en armonía democrática podremos vivir sin necesidad de revolución, sin tener que mandar al basurero de la historia, al caduco Estado capitalista.

El estado esclavista siguiendo su interpretación histórica de la economía, era el mismo estado de ahora, solo que era esclavista porque producía esclavisticamente, si la producción hubiese sido capitalisticamente sería capitalista. La relación dialéctica con la naturaleza y la evolución material del proceso productivo y del propio ser humano, son cosas filosóficas que nada tienen que ver con la visión economicista y estatalista con la que interpreta el marxismo.

«2. Estado y sociedad civil. Hay sectores de la izquierda radical que siguen pensando que el Estado socialista es un Estado cualitativamente nuevo respecto del Estado capitalista y muy superior bajo el punto de vista democrático. Pero la experiencia del socialismo real nos dice que esto no es así. Al igual que la primera fase del socialismo hereda muchas cosas económicas del capitalismo, supone sus condiciones de partida, en el terreno del Estado ocurre lo mismo. El Estado socialista tiene que heredar el Estado de derecho y el Estado democrático, la democracia representativa y multipartidista, de la sociedad burguesa. El socialismo no se construye sobre sus propias premisas, sino sobre los resultados del capitalismo. Dicho de forma más dialéctica: los resultados del capitalismo son los puntos de partida del socialismo. El socialismo podrá acabar de momento con una buena parte de la división social de los hombres en clases, pero no podrá acabar con la división social del trabajo, como la existente entre el ciudadano socialista, que se ocupa de sus intereses particulares, y el político, el representante de los intereses generales. El Estado socialista no debe tratar a los hombres según su pertenencia a determinada clase social, como hacía la Banda de los Cuatro en China, sino como ciudadanos de un Estado de derecho. La división entre Estado y sociedad no podrá ser superado por el socialismo en su primera fase. Y que las sociedades socialistas son más democráticas que las sociedades capitalistas es algo que está todavía por demostrar».

Como el estado es una entelequia, la sociedad civil es lo concreto como dios nos hizo, imposible ser de otra forma. El Estado Socialista cualitativamente tampoco es nuevo, la maquinaria divina del estado no cambia, lo del basurero histórico de las viejas maquinarias estatales de épocas anteriores que nos dijera Marx son simples expresiones izquierdistas que no se corresponde con la moderna realidad estatal, tan democrática ella. Cuba nos viene a decir que también tiene que demostrar que es más democrática que EE.UU. A lo mejor se olvidó de Cuba, o si la tiene en cuenta, es por su visión consumista innata que tiene del ser humano, por su idolatría hacia el mercado. Si en Usalandía existen McDonalds a tu ti plen, y en Cuba no, ¿quién es más democrático?. Claro que como «buen» economista marxista no se le ocurrirá nunca investigar en cual de los dos países las desigualdades sociales son más grandes, ni cuantos inquilinos pueblan las cárceles de uno y otro país, en cual de los dos el índice de muerte por natalidad es mayor. Aunque pudiéramos pensar que lo dice para justificar la defensa que hace del socialismo chino, ante las recientes imágenes servidas por TV, donde matones chinos apaleaban a pobres campesinos para obligarles a abandonar sus tierras.

Compañero Francisco el llamado socialismo real no era socialismo real, heredó todo lo bueno que nos recomiendas del estado capitalista, en su origen aquellos comunistas quisieron construir el socialismo para el pueblo sin el pueblo organizado como clase dominante, esa dinámica en su desarrollo se convirtió en dictadura burocrática de los viejos comunistas. Aquellos buenos tribunos también se olvidaron de la letra de la Internacional.

Qué es esa entelequia socialista que podrá…, (de su punto 2) ¿son seres productivos organizados como clase dominante, o divinos tribunos uncidos del alo divino de dios que se encargarán de llevarnos al paraíso socialista?.

Lo siento no puedo continuar, solo de pensar en el Estado de Derecho de Francisco y del bueno de Llamazares, me pongo malo.