Como culminación a una labor que empezó su andadura tres años atrás con la digitalización, restauración y negociación de derechos de aproximadamente 700 de las películas más destacadas del cine de y sobre África, M-Net consigue con la African Film Library poner a disposición de cualquiera con conexión a Internet e independientemente de donde se […]
Como culminación a una labor que empezó su andadura tres años atrás con la digitalización, restauración y negociación de derechos de aproximadamente 700 de las películas más destacadas del cine de y sobre África, M-Net consigue con la African Film Library poner a disposición de cualquiera con conexión a Internet e independientemente de donde se encuentre, una selección de obras sin precedente hasta la fecha.
Con este proyecto, la emisora, productora y distribuidora sudafricana M-Net pone en marcha una plataforma envidiable para acceder a las mejores producciones audiovisuales africanas. A través del servicio VOD (video on demand) se establece un acceso fácil y asequible de alquiler a través de descarga digital: 5$ por película con la posibilidad de múltiples visionados durante un período de 36 horas.
Con el objetivo principal de ayudar a cinéfilos y africanos en la diáspora a acercarse a la realidad del continente, tan manipulada y malinterpretada por los medios generales, la African Film Library arranca con 110 títulos a la espera de que otros 600 se vayan incluyendo en fechas cercanas. Mike Dearham, curador de African Film Library y director del departamento de ventas y adquisiciones de M-Net afirma: «Este programa de alquiler de películas online es una oportunidad maravillosa y única tanto para miembros de la diáspora africana como para los amantes de la cultura y el cine africanos de experimentar la riqueza del continente». En efecto la oferta es jugosa: como reflejo de la variedad de producciones que se engloban dentro del concepto de «cines africanos» se recogen una multiplicidad de géneros y formatos que van del drama a la comedia, pasando por el musical y la ciencia ficción, sin olvidar la ebullición tanto del documental como del cortometraje de temática o procedencia africana.
La vitalidad y diversidad de obras, autores y generaciones de la producción cinematográfica africana encuentra su eco en esta primera etapa de la African Film Library en un menú que incluye obras clásicas y películas recientes. Grandes alicientes son los filmes de pioneros del cine africano como el senegalés Sembène Ousmane considerado «el padre del cine africano» con 14 títulos de su autoría o a él dedicados, o la magnífica Hyenas (1992) de su compatriota Djibril Diop Mambety. Muchos son los autores que podríamos destacar de los momentos fundacionales de los cines africanos, entre ellos el gran creador egipcio Yousef Chahine, el burkinabé Idrissa Ouedraogo, o el controvertido Jean Rouch. Estas producciones clásicas tienen su complemento en películas contemporáneas, en una selección de obras abaladas por ser éxitos de público, crítica y festivales como Lumumba (2000) del haitiano Raoul Peck, Au Nom du Christ (1992) del cineasta de Costa de Marfil Roger Gnoam M-Bala, los melodramas de base musical Tableau Ferraille (1995) y Madamme Brouette (2002) de Moussa Sène Absa (Senegal), los relatos épicos del etíope afincado en Washington DC Haile Gerima, los documentales irreverentes del camerunés Jean-Marie Teno, las comedias del director de Guinea Bissau Flora Gomes y tantas otras obras de temática, autoría e intención diversa. Las reconocidas cineastas Fanta Régina Nacro (Burkina Faso) y Moufida Tatli (Túnez) encuentran su espacio del mismo modo que la amplia población africana en la Diáspora se ve retratada por directores tales como el franco-senegalés Alain Gomis o el congoleño Mweze Ngangura, nacidos o residentes fuera del continente. Wolof, zulú, árabe, inglés, francés o portugués son algunos de los idiomas que escucharemos, elementos que componen junto a una riquísima variedad de culturas, lenguajes artísticos, temas, personajes e historias un mosaico cinematográfico africano único y tristemente desconocido. A través de este valioso instrumento audiovisual estamos más cerca de desmontar una imagen del continente mantenida por los Mass Media e incapaz de transmitir la vitalidad y la efervescencia creativa que proviene de las cuatro esquinas de África.
Para facilitar el buceo de estos 110 títulos en la página Web, se ha optado por una herramienta de consulta que organiza la videoteca en cuatro secciones según género, idioma, director y país de cada film. Todavía en estado embrionario, sería interesante que la African Film Library considerase el incluir en su página enlaces o contenidos que permitan al usuario alcanzar un conocimiento más profundo y matizado sobre la realidad cinematográfica africana en sus vertientes diacrónica y sincrónica.
a apertura de la African Film Library es motivo de doble de celebración. No sólo se consigue poner en circulación una cuidada selección de títulos africanos de manera cómoda y barata, sino que el ambicioso proyecto nace dentro de las fronteras del continente. Hasta fechas muy recientes, EEUU y Francia habían conseguido monopolizar la distribución de los cines africanos. Autores y obras veían cómo caían en manos de empresas como La Médiathèque des Trois Mondes gala o la americana California Newsreel. Sin menospreciar el inestimable trabajo de difusión de éstas en la promoción de los cines africanos, M-Net llega para colmar un vacío lacerante y oponer una alternativa local al monopolio que de la cultura se sigue haciendo desde Occidente. De nuevo desde Sudáfrica, país del que provienen en los últimos años la mayoría de las iniciativas más originales y comprometidas de difusión y promoción del cine africano, M-Net ofrece una amplia selección de títulos sin imponer limitaciones económicas o legales de distribución independientemente de dónde se halle el espectador. De este modo se da un paso enorme en el reconocimiento de la producción artística africana sin tener que recurrir a subvenciones exógenas. Considerando el cambio en la legislación anti piratería y los hábitos de consumo de un espectador que se ha acostumbrado a ver películas en las pantallas de un ordenador o teléfono móvil, y que ha renunciado a encontrar en su cine de barrio producciones alternativas al circuito comercial, no cabe duda de que plataformas digitales como M-Net están llamadas a inundar los servidores. La amplia trayectoria de M-Net desde 1986 cuando se convirtió en el primer canal de pay-per-view en Sudáfrica, hasta el lanzamiento en 2006 del DStv y M-Mobile, herramientas tecnológicas avanzadas que permiten a sus usuarios acceder desde sus celulares a una amplia programación en directo ó on-demand, avala la actuación de M-Net situándola como abanderada de una forma nueva de difusión de contenidos audiovisuales con vocación de dejar de ser considerados minoritarios. Sin duda, la ampliación de las posibilidades de acceso a la información, la generalización de un ocio y cultura audiovisuales, la diversificación de los gustos y la ascendente pujanza de África, son todos aspectos claves que permiten augurar el éxito de esta propuesta.
Fuente: http://africaencine.com/2012/03/24/african-film-library-cine-africano-al-alcance-de-cualquiera/