En 2019 el Gobierno ratificó su fidelidad del lado del 1% de los súper ricos, rumbo rechazado por el multitudinario estallido social, que le abre campo a las esperanzas de cambio para Colombia en el nuevo año. El mal Gobierno que sufre el país niega las mínimas garantías de vida y trabajo a la gente, […]
En 2019 el Gobierno ratificó su fidelidad del lado del 1% de los súper ricos, rumbo rechazado por el multitudinario estallido social, que le abre campo a las esperanzas de cambio para Colombia en el nuevo año.
El mal Gobierno que sufre el país niega las mínimas garantías de vida y trabajo a la gente, que la obliga a ejercer el derecho a la rebelión, dado que las élites dominantes ensimismadas en sus privilegios, se niegan a dialogar y a negociar los cambios básicos urgentes que demanda la sociedad.
Los sectores movilizados confluyen alrededor de una Agenda que en 13 Puntos sintetizan las transformaciones indispensables, por las que luchan en las calles millones de colombianas y colombianos.
La unidad programática lograda en esta Agenda, permite al Comité Nacional de Paro liderar la lucha masiva que está en desarrollo en Colombia; cohesión y determinación que con certeza arrancará importantes conquistas al viejo régimen de exclusión violenta y empobrecimiento generalizado.
La democracia de la calle es la solución que ha encontrado la sociedad colombiana ante la ruina de una democracia que no representa a las mayorías nacionales; porque son la participación y la movilización popular las que abren el camino de la democratización del país.
La vida nueva que merece Colombia es de una paz con justicia social, que saque la violencia de la política, un modelo económico amable con la Madre Tierra, unas relaciones internaciones dignas y de cooperación con los pueblos vecinos, y una visión de seguridad que deje de considerar como objetivo militar a la oposición y a la protesta social.
El gran líder que fue Jorge Eliécer Gaitán enseña que «el pueblo es superior a sus dirigentes», lo que exige un nuevo liderazgo a la altura del salto cualitativo dado por la movilización de las mayorías, empeñadas en dignificar la vida nacional, por medio de una lucha sin miedo, sin odio, con ingenio y con grandeza.
Desde el Ejército de Liberación Nacional reconocemos y animamos a los millones de compatriotas que persisten en la lucha por las transformaciones, la paz y la dignidad nacional; a la vez que nos sumamos a este esfuerzo por concretar soluciones políticas a los conflictos colombianos.
Estamos convencidos que la esperanza de lograr un futuro mejor entre todos, tendrá avances decisivos en 2020, gracias a la unidad que potencia la lucha popular y social.