Llegada a Madrid de la Brigada Internacional. _____________________________________ Una mañana de un mes frío, de un mes agonizante, manchado por el lodo y por el humo, un mes sin rodillas, un triste mes de sitio y desventura, cuando a través de los cristales mojados de mi casa se oían los chacales africanos aullar con los […]
Llegada a Madrid de la Brigada Internacional.
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Una mañana de un mes frío,
de un mes agonizante, manchado por el lodo y por el humo,
un mes sin rodillas, un triste mes de sitio y desventura,
cuando a través de los cristales mojados de mi casa se oían los
chacales africanos
aullar con los rifles y los dientes llenos de sangre, entonces,
cuando no teníamos más esperanza que un sueño de pólvora,
cuando ya creíamos
que el mundo estaba lleno sólo de monstruos devoradores y de
furias,
entonces, quebrando la escarcha del mes de frío de Madrid, en la
niebla
del alba
he visto con estos ojos que tengo, con este corazón que mira,
he visto llegar a los claros, a los dominadores combatientes
de la delgada y dura y madura y ardiente brigada de piedra.
…
«España en el corazón. Himno a las glorias del pueblo en guerra»
Pablo Neruda.
Era un ejército nuevo, nunca se había conocido una cosa semejante, era la primera vez que trabajadores de cualquier lugar del mundo, acudían en masa para ayudar a los trabajadores de un país en una guerra de clases. Llegaron a España desde los rincones más alejados del mundo, chinos, neocelandeses, de Islandia, … venían de 53 países. Aquí llegaron dispuestos a luchar contra el nazismo, el fascismo y el falangismo, entregaban desinteresadamente su vida al pueblo español. Artur London, en «Se levantaron antes del alba» transcribe el juramento que hacían para pasar a formar parte de las Brigadas:
«Estoy aquí porque soy voluntario y daré, si es necesario, hasta la última gota de mi sangre para salvar la libertad de España, la libertad del mundo entero»
Entre estos voluntarios contra Hitler y sus generalísimos se debe subrayar la participación de cientos de alemanes e italianos y algunos judíos. En España se libraba la primera batalla de la Segunda Guerra Mundial. Aquél ejército de trabajadores se denominó Brigadas Internacionales.
El germen de las Brigadas Internacionales estuvo en el golpe de Estado que los militares fascistas dieron el 17 de Julio de 1936. En Barcelona se iban a inaugurar las llamadas «Espartaquiadas. Olimpiadas Populares.» También llamada «Espartaquiada Internacional» Las Espartaquiadas eran las Olimpiadas antinazis, de protesta y alternativas a las Olimpiadas que la Alemania nazi inauguraba en Berlín con Hitler de anfitrión, y a las que acudían la mayoría de los gobiernos con sus representaciones. Sin embargo los participantes en las Espartaquiadas eran deportistas contrarios al nazi-fascismo. La consecuencia del golpe militar contra la República fue que buena parte de aquellos deportistas se sumaron a la resistencia popular que repelía la agresión fascista. Tras aquellos primeros voluntarios vinieron a España hasta 35.000 mujeres y hombres, de los cuales el 80% eran obreros.
En el mes de Octubre el gobierno democrático republicano, a través de Martínez Barrios, permitió que se entrenasen en Albacete. Empezaron a llegar a aquel campamento el 14 de Octubre, 8 días después, el día 22 formaron 4 batallones, 14 días después, el 5 de Noviembre serían llamados a Madrid. Con apenas dos semanas de entrenamiento aquellas mujeres y aquellos hombres, que recibieron una enseñanza militar mínima, el 8 de Noviembre acudieron al llamamiento de los defensores de la capital sitiada. El pueblo madrileño dirigido en primer término por el general Vicente Rojo, tras la huida del gobierno republicano, había resistido la primera embestida fascista, el día 9 los Internacionales organizados en 3 batallones, uno de franco-belgas, otro de alemanes, y otro de polacos, que constituyeron la XI Brigada, entraron en combate.
La población trabajadora al verlos desfilar por la Gran Vía camino del frente en la Ciudad Universitaria no daba crédito a sus ojos, se agolpaba en las aceras, se abrazaban a ellos, les daban vivas entusiastas, las mujeres tiraban los chales y los hombres las boinas al alto, habían llegado por la carretera de Valencia a Madrid y se recuerda su entrada en la capital en «Campo abierto», de Max Aub:
«…llega una enorme fila de camiones. En ellos, apretujados, hombres y hombres uniformados. Las caras brillantes al último sol de la tarde, cantando. ¿En qué idioma cantan? No son españoles. ¡No son españoles! ¿De dónde vienen? El chofer grita:
-¡Son franceses! ¡Los franceses! ¡Ya decía yo que Francia no nos podía dejar en la estacada!
Camiones y más camiones.
¿Qué cantan? ¿En qué idioma cantan? En francés, sí. Pero estos otros, no. Estos, en italiano. No hay duda. ¿Pero aquéllos? ¿En ruso, en alemán, en checo? ¡Y éstos, en inglés!
Julián Templado -por primera vez en su vida- tiene que hacer un esfuerzo para contener sus lágrimas. Y abraza a sus compañeros de viaje, a quienes apenas conoce, hasta hacerles daño.
Siente que todo su ser le grita que vamos a ganar. ¡A ganar! Porque el mundo entero se ha dado cuenta de la justicia de nuestra causa.
…
Los soldados de las Brigadas Internacionales suben hacia Madrid»
Desde el primer día el pueblo de Madrid, primer lugar en el que combatieron, supo de su entrega por la República bajo la consigna «Ni un paso atrás».
Gracias, Brigadas Internacionales.
Pásalo.
Más información en Asociación de Amigos de las Brigadas Internacionales, correo electrónico: [email protected]
Bibliografía:
«Monográfico sobre la Guerra Civil y las Brigadas Internacionales en Albacete» Manuel Requena Gallego. Editorial Al-Basit, Noviembre de 1966.
«La llamada española. Homenaje a las Brigadas Internacionales, 1936-1939» José Esteban, Francisco Gómez-Porro y Manuel Requena. Universidad de Castilla La Mancha- Centro de Estudios y Documentación de las Brigadas Internacionales, y, Cortes de Castilla La Mancha, 1966.
«Historia política y militar de las Brigadas Internacionales» Santiago Álvarez. Editorial Compañía Literaria.
«La brigada Holliwood». Guerra española y cine americano» Javier Coma. Ediciones Flor de Viento.
«Nuestros hermanos los internacionales» Teresa Noce.
«¡No pasarán! Un relato del sitio de Madrid» Upton Beal Sinclair.
«El único camino» Dolores Ibárruri.
«Por vuestra libertad y la nuestra. Andanzas y reflexiones de un combatiente republicano (1936-1939) Pedro Mateo Merino. Madrid, Disenso, 1986.
«Defensa de Madrid» Geoffrey Cox.
«Así fue la defensa de Madrid» Vicente Rojo.
«Las Brigadas Internacionales» Varios autores. r ayer nº56 Revista de Historia Contemporánea.
«Se levantaron antes del alba. Memorias de un combatiente checo de las Brigadas Internacionales en la Guerra Civil» Artur London. Editorial Península.
«Corresponsal en la Guerra Civil Española» Ilya Ehrenburg. Ediciones Júcar.
«Diario de la guerra española» Mijail Koltsov. Akal Editor.
«Las Brigadas Internacionales: una revisión histórica y bibliográfica» Enrique Moradiellos. Cáceres, Universidad de Extremadura.2000.
«Norman Bethune. El crimen de la carretera Málaga-Almería (febrero 1937)» Jesús Majada Neila. Benalmádena, Málaga, Caligrama Ediciones, 2004.
«Por quién doblan las campanas» Ernest Hemingway.