La dirección de la estación católica insistió ayer en su propuesta para terminar el desacuerdo, la que sin embargo fue nuevamente rechazada por el sindicato, dado ofrece un bono de fin de conflicto que sólo llega a 175 mil pesos, mientras ellos piden 600 mil. Además, descarta una cláusula colectiva ante la eventual venta del […]
La dirección de la estación católica insistió ayer en su propuesta para terminar el desacuerdo, la que sin embargo fue nuevamente rechazada por el sindicato, dado ofrece un bono de fin de conflicto que sólo llega a 175 mil pesos, mientras ellos piden 600 mil. Además, descarta una cláusula colectiva ante la eventual venta del medio.
Mientras desde las cero horas de hoy comienza a regir el estado de huelga legal entre los trabajadores de Canal 13 por falta de acuerdo en el marco de la negociación colectiva, los funcionarios no sindicalizados tendrán la posibilidad de acceder en buses hasta las dependencias de la estación televisiva.
La medida adoptada por la dirección del medio de comunicación de la Pontificia Universidad Católica pretende evitar problemas en la entrada del edificio ubicado en Inés Matte Urrejola 0848 entre los trabajadores pertenecientes del sindicato y aquellos que por no estar afiliados, deben realizar sus labores como cualquier día normal.
Sin embargo, no podrá mermar la falta de cerca de la mitad de funcionarios de toda la estación que paralizan sus actividades, lo que eventualmente podría amenazar la normal puesta al aire de algunos programas.
Los buses de acercamiento que dispondrá la estación televisiva se ubicarán en tres puntos de la ciudad: en las cercanías del edificio de la Telefónica -Plaza Italia-, a un costado del Liceo Lastarria -ubicado en Providencia con Miguel Claro- y en el metro Salvador.
Durante el día de ayer, según informó el presidente del sindicato, Leonel Cajas, recibieron una carta del director ejecutivo de canal, Enrique García. No obstante, en la misiva la estación insistía en su última oferta; es decir, un bono de fin conflicto de 175 mil pesos y la posibilidad para los funcionaros a acceder a una cláusula de protección especial en caso de venta de la estación, pero negociable individualmente.
En cambio, los trabajadores piden un bono que asciende a los 500 mil pesos y que la cláusula por venta del canal sea negociada colectivamente. Además, los empleados pretenden repactar préstamos de dineros que actualmente le deben a la estación.
Hasta ahora la carta de García habría sido el único intento de la dirección para solucionar el conflicto, después que el jueves pasado el sindicato ratificara la huelga, movilización que en principio se haría efectiva el martes pasada. Por parte de los trabajadores, sin embargo las puertas siguen abiertas para encontrar una solución al desacuerdo.
El conflicto entre la dirección y los trabajadores de Canal 13, se desató en medio de la negociación colectiva anual cuando fue públicamente conocido el interés del empresario mexicano del sector telecomunicaciones Ángel González, quien controla Red Televisión, de comprar la estación católica.
Ayer, La Federación de Trabajadores de la Televisión Chilena (Fetra) respaldó la huelga, señalando en una declaración pública que «los trabajadores de Canal 13 han sacrificado beneficios y remuneraciones, durante los últimos cuatro años para, de buena fe, contribuir al saneamiento de la empresa», situación que hoy la estación televisiva «no está reconociendo».