Entre los años 1996 y 1998 la empresa Arauco del empresario Anacleto Angelini pretendió la instalación de un ducto para evacuar sus desechos líquidos al mar. La opción del ducto ya había sido tomada, y esto significaba la descarga de los efluentes líquidos al mar, en el sector de la bahía de Maiquillahue, localidad de […]
Entre los años 1996 y 1998 la empresa Arauco del empresario Anacleto Angelini pretendió la instalación de un ducto para evacuar sus desechos líquidos al mar. La opción del ducto ya había sido tomada, y esto significaba la descarga de los efluentes líquidos al mar, en el sector de la bahía de Maiquillahue, localidad de Mehuín, a través de una tubería subterránea de un metro de diámetro y treinta y cinco kilómetros de longitud, y finalmente la descarga de los riles mediante un emisario submarino de un kilómetro y cuarenta y cinco metros que se internaría a unos quince metros de profundidad. Sin embargo, ante la resistencia y permanente movilización de diversos sectores ambientalistas, pobladores, pescadores artesanales y comunidades Mapuche, finalmente el proyecto se desechó y Maiquillahue de Mehuín logró salvarse. Ante esa situación, la Comisión Regional del Medio Ambiente (COREMA) sugirió entonces a la empresa instalar una planta de tratamiento terciario de los residuos o, bien, la construcción de un ducto para eliminarlos en otra fuente de agua. La planta contaba con el apoyo público de las autoridades nacionales y regionales de la época, instalándose finalmente en el río cruces lo que acarreó el ecocidio de dicho santuario de la naturaleza y serios trastornos ambientales, sociales y económicos a las comunidades y población del sector.
Ante el inminente cierre de la planta, el presidente del Celco, el demócrata cristiano Alberto Etchegaray, ex Ministro de la vivienda, en una reciente entrevista realizada por el periodista Andrés Venegas del diario capitalino la Segunda, reconoció que una de las formas de terminar con la crisis ambiental del río cruces es con una salida al mar, reabriendo nuevamente los archivos del conflicto de Mehuín, causando la alerta en el lafquen Mapu (territorio Mapuche de la costa) y sus comunidades, ya que se pretendería instalar en los límites costeros de la novena y décima región, según a trascendido.
En dicha entrevista, el periodista preguntaba a Etchegaray ante la intención de salir al mar lo siguiente: ¿Saliendo por la caleta de Mehuín, pese al rechazo de sus pescadores artesanales?, a lo que responde – «No necesariamente. Posibilidades de salir al mar en el área de la provincia de Valdivia hay muchas. Tenemos mucho respeto por lo que sucedió la otra vez, donde una comunidad entera se organizó contra la salida de ese ducto. Sería suicida volver a insistir en que Mehuín sea la única salida posible. Hay que buscar otras alternativas». Agregaba, «Como es sabido, a comienzos de enero el Presidente Lagos invitó a don Anacleto Angelini – controlador del grupo- a una reunión en La Moneda donde le manifestó su preocupación. Lo que gatilló este tema fue el hecho de que se había aprobado un estudio de impacto ambiental, con ciertas condiciones para una determinada producción 6 años atrás (550 mil toneladas de celulosa), y los proyectos que se estaban desarrollando tenían una potencialidad de producción superior (685 mil toneladas). ¿Por qué se produce eso? Cuando uno cotiza y entrega la idea de lo que hará, le entregan un automóvil del ’96, que tiene cierta cilindrada y potencia, pero cuando ya llega a comprarlo el 2002 el auto cambió. Y si hay algo que cambió en el mundo fue la industria de la celulosa, con la salvedad de que no contaminaba más desde el punto de vista de los gases ni de los efluentes».
Prosigue: «La empresa, el 13 de enero, tuvo una sesión extraordinaria de directorio, y planteó al Presidente de la República que en Itata y en Valdivia la solución definitiva era una salida al mar. Esa oferta aún está vigente. Al día siguiente, el 14 de enero, la empresa empezó con sus técnicos a estudiar por dónde salir. Hay mucha ingeniería avanzada, muchas posibilidades, muchos estudios concretos». – ¿Por dónde concretamente? Preguntaba el periodista, a lo que respondió …»No se los puedo dar a conocer ahora, porque se lo tengo que presentar primero a la autoridad. En la VIII Región salimos por el río Itata, no sabemos si en la ribera sur o norte, pero tenemos ya conversado incluso con la gente de Vialidad todo el tema de los caminos, hemos conversado con los 9 alcaldes de la zona»….
Y Mehuín tenía la razón.
La crítica situación del río cruces que ocurre en la actualidad, finalmente le dio la plena razón a la Resistencia de la Comunidad de Mehuín y Maiquillahue frente al intento de construcción de un Ducto para la Evacuación de Desechos Industriales entre los años 1996 y 1998. Les hablaron de progreso, de desarrollo, de beneficios, de alta tecnología. Aún así, no la compraron, no la creyeron…. Tenían a casi todos en contra, a los congresistas, a las Municipalidades del sector, incluida la de Valdivia, sectores ciudadanos, al gobierno, gremios, en fin, a muchos encima, pero resistieron, se mantuvieron firmes, no tranzaron.
El Ministro del Interior de la época en el gobierno de Frei, Carlos Figueroa, en noviembre del 96 señalaba «Están exaltados sin razón» y el Intendente de la décima región, Rabindranath, decía «Hay oposición por oponerse» . Hasta los tribunales de justicia fallaba en contra de sus intereses, cuando la Corte de apelaciones de Valdivia les rechazó un recurso de protección en febrero de 1997. Aún así, perseveraron, se movilizaron permanentemente, a pesar que el propio Senador Gabriel Valdés (DC) se reunía con Eduardo Frei para pedir su directa intervención, ante lo que denominó «la oposición ilegal» al proyecto. El propio Frei una y otra vez reafirmaba su público apoyo a la planta de celulosa.
1996 al 1998 duró la guerra de Mehuín. Angelini finalmente anunció su retirada del proyecto de descargas al mar. Se habló de aplazamiento y volvió, sigilosamente, pero esta vez en el río cruces. Las consecuencias están a la vista. Lo del santuario a la naturaleza le dio la razón a las comunidades de Mehuín y Maiquillahue. No le creyeron a la empresa, no le creyeron al Gobierno ni a los políticos ¿Porqué habría que creerles ahora?.
Alerta Mapuche ante posible descarga en el mar
En un reciente encuentro de representantes de organizaciones e identidades territoriales realizado en Chiloé, se manifestó la preocupación por este anuncio, adelantando que no se permitirá una nueva destrucción a los ecosistemas, en este caso a las comunidades Mapuche Lafkenche (población mapuche de la costa) y que la alerta será permanente, entregando un completo respaldo a la coordinadora Identidad Lafkenche ante un eventual conflicto con la empresa Arauco.
Por su parte, la agrupación Konapewman de Temuco, señaló sobre este hecho «Es muy valorable y ejemplar la reacción ciudadana en torno al conflicto ambiental en Valdivia producto de la contaminación del río cruces a causa de la planta de celulosa. Es de esperar, que con el mismo ímpetu y responsabilidad, las organizaciones involucradas no se desentiendan de posibles conflictos a otros sectores a causa del traslado del ducto de la planta, como se pretende hacer hacia el mar»… Agrega «No se trata de tapar un hoyo para abrir uno nuevo y que las cargas de este conflicto la tengan que asumir otros, en este caso comunidades Lafkenche. La solución es el cierre definitivo de la planta»….
Río Cruces: No solo de cisnes se trata
El ecocidio del río cruces se conoció local e internacionalmente por la muerte de miles de cisnes ocasionado por los desechos de la planta de celulosa Celco de empresa Arauco. La planta ubicada en el predio Las Rosas y Traiguén, a seis kilómetros al sureste de la localidad de San José de la Mariquina, provincia de Valdivia, X Región, a quinientos metros de la ribera sur del río Cruces y a unos treinta y dos kilómetros aguas arriba del Santuario de la Naturaleza «Carlos Anwandter», recientemente fue responsabilizada de dicha destrucción en un informe científico de la Universidad Austral de Valdivia, quien, entre otros puntos, concluyó, «que las actividades de la Planta Valdivia de CELCO han incidido de forma significativa en los cambios ambientales que han ocurrido en el humedal del río Cruces durante el último año»…. Agrega el informe… «Para el caso de la avifauna, se tiene que tres de las aproximadamente 30 especies conocidas para el humedal se han visto afectadas, ya sea por mortalidad o emigración (el Cisne de cuello negro, la Tagua y la Taguita)»…. Continúa en otro punto ….»el diagnóstico aquí presentado, solo se refiere a la situación actual y no puede utilizarse para argumentar que cambios futuros no puedan ocurrir a más largo plazo, como producto de los cambios, por ejemplo, en la calidad del agua del río Cruces que han ocurrido en el último tiempo»….
Además de esta situación, la población del sector, donde hay varias comunidades Mapuche, ha tenido serios problemas de salud y corre serio riesgos a futuro, según señaló un experto en toxicología de la Universidad de Chile, Dr. Andrei Tchernitchin ante la contaminación con dioxina del río cruces …. «La ingesta de aguas con dioxinas o la exposición a temprana edad produce infertilidad, produce una feminización y demasculinización de individuos de sexo masculino, además de alteraciones conductuales neurológicas. Para ser más claro, lo mismo que todo el mundo vió en los cisnes con daño neurológico se va a producir en los seres humanos», alertó el miembro del directorio del Colegio Médico», indicó en abril a Aldea comunicaciones.
El toxicólogo explicó a Aldea Comunicaciones, en una visita a la ciudad de Valdivia, que la preocupación no sólo debe ser por contaminación del agua. También es por los gases que emanan de la producción de celulosa, que durante la noche el viento lleva hacia Valdivia y durante el día hacia Loncoche, donde está gran parte de la producción lechera y láctea del país, por lo tanto, indicó, va a haber contaminación de estos productos con dioxinas que producirán daños a la salud de quienes consuman estos productos y podría perjudicar las exportaciones y el posterior desarrollo económico de la región.
En efecto, los problemas evidentes en los animales son las alteraciones y disminución de la reproducción, alteraciones neurológicas, baja de peso, alteraciones en la conducta, nacimiento de fetos muertos como algunos de los efectos que produce la contaminación por dioxinas y organoclorados provenientes de la producción de celulosa y que se hizo mucho más notorio en los cisnes de cuello negro.
Otro de los severos problemas causados, ha sido el daño económico a las comunidades Mapuche. Según informó el mismo medio en marzo pasado, ochenta familias mapuche del sector rural Tralcao, aspiraban a mejorar su calidad de vida a través de un proyecto de ecoturismo y agroturismo donde había inversiones públicas y privadas para atraer visitantes nacionales y extranjeros. Habían construido hasta un mirador de cisnes. Sin embargo, hoy los puestos de trabajo quedaron sepultados por la tragedia económica y ambiental del río cruces.
Informe completo Universidad Austral sobre responsabilidad planta celco en daño río cruces:
http://www.conama.cl/portal/1255/articles-31832_InformeFinal.pdf