Este 22 de septiembre en diferentes puertos del país se conmemoró, por cuarto año consecutivo, el Día del Trabajador Portuario instaurado por los propios obreros, específicamente de Talcahuano y San Vicente. Este 2014 contó con reconocimiento legal, expresándose en la suspensión nacional de las faenas en los terminales del país donde sus trabajadores están adscritos […]
Este 22 de septiembre en diferentes puertos del país se conmemoró, por cuarto año consecutivo, el Día del Trabajador Portuario instaurado por los propios obreros, específicamente de Talcahuano y San Vicente. Este 2014 contó con reconocimiento legal, expresándose en la suspensión nacional de las faenas en los terminales del país donde sus trabajadores están adscritos a la Unión Portuaria de Chile.
¿Por qué el 22?
Eran las 10 de la mañana del 22 de Septiembre de 1973, militares bajo las órdenes de Manuel Contreras (Mamo), llegaron a la sede del Sindicato de Estibadores del Puerto de San Antonio para detener a un dirigente, y luego dirigirse a los domicilios de tres de ellos. El motivo fue el estar acusados de haber intentado paralizar el puerto de San Antonio y desobedecer las órdenes de la autoridad designada. Cerca del lugar, ya detenidos, fueron asesinados por una patrulla militar Héctor Rojo, Samuel Núñez, Armando Jiménez y Guillermo Álvarez, todos obreros y sindicalistas portuarios.
Desafíos
Este 22 de septiembre tuvo lugar en medio de una serie de intentos de parte del empresariado por hacer retraer a los portuarios en sus planes de lucha. En los recientes años, éstos han demostrado que la fuerza sindical no está en el apego a formalidades y, ni siquiera, en la posesión de contratos indefinidos, sino que en la organización y la disposición a conflictuar.
Con paralizaciones no amparadas en ninguna reglamentación y con una organización interempresarial por rama productiva, los portuarios han alcanzado conquistas que ningún otro sector ha logrado, tales como jubilaciones anticipadas con rentas vitalicias para quienes alcanzan los 53 años, un salario por turno superior al promedio nacional, entre otras reivindicaciones. Esto ha ido convirtiendo al gremio en un referente y sus métodos podrían ser replicados por otros, más aun cuando la Unión Portuaria del Bío Bío, junto a otras, se ha incorporado a la lucha por el Fin de las AFP y del negocio de las Mutuales de Seguridad.
Esta progresiva intervención en la realidad nacional ha activado la alerta del empresariado que ahora impulsa una estrategia para debilitar su organización, buscando arrebatarles el derecho a nombrada, es decir, el derecho a decidir quien puede trabajar en un puerto con el cual se haya suscrito un convenio de provisión de mano de obra. En este sentido, empresas portuarias de Iquique, San Antonio y Coronel (Puertos Cabo Froward) buscan llenar las plazas de empleo con trabajadores contratados, desplazando a los eventuales.
En el caso del Puerto Cabo Froward de Coronel el sindicato de contratados ha caído en un servilismo despreciable aceptando los puestos de empleo disponibles luego del cese del convenio con los obreros eventuales. Por su parte, la Unión Portuaria del Bío Bío ha negado toda la faramalla con la cual las empresas buscan imponer y extender esta medida. Aquí Resumen reproduce su declaración pública:
Declaración pública
Hoy 22 de septiembre conmemoramos el día nacional del trabajador portuario, donde recordamos el martirio de 4 dirigentes de San Antonio que en igual fecha de 1973 fueron brutalmente asesinados por el crimen de luchar por un mejor pasar para sus compañeros. Este año, la ley 20.773, conocida como la Ley Corta Portuaria, reconoce oficialmente ese día.Ahora, con suma preocupación hemos estado observando los acontecimientos que han estado sucediendo en algunos puertos del país donde por decisiones gerenciales, proveniente de los directorios, se han generado conflictos entre nuestros compañeros contratados y eventuales, como son los casos en los puertos Iquique, San Antonio y Schwager. Más aún nos generan mucha inquietud las declaraciones que se han vertido a la prensa donde se expresa el interés de eliminar la eventualidad, argumentando que ello sería mucho mejor para los trabajadores por acceso a vacaciones y préstamos, aunque saliera más caro, lo que nos parece extraño dado que hace unas pocas semanas eran los mismos que se negaban a que los trabajadores pudieran tomar colación en sus jornadas. De igual manera nos incomoda de sobremanera el cómo se han referido al hecho que los sindicatos sean quienes nombran a los trabajadores solicitados por cada empresa, dando a entender que ello no permite que se le de trabajo equitativamente a todos y que genera múltiples procesos de injusticias, hasta de corrupción.
Pues bien, queremos dejar claro que como Unión Portuaria del Biobio, no aceptaremos que el empresariado busque eliminar una forma de contrato por otra, pues nuestra experiencia como trabajadores es que es imposible sostener por mucho tiempo una «aventura empresarial» de esas, ya que cada vez que se ha realizado ésta lo único que ha generado (y asumimos, por lo tanto, que es la real razón de hacerlo) es el cierre de los sindicatos eventuales y después de un tiempo mucha cesantía donde los trabajadores más luchadores por sus derechos son los primeros en ser desvinculado.
La competencia generada entre los puertos, producto de la forma como la industria está estructurada, provoca que las líneas de buques se cambien continuamente de un puerto a otro, dejando gran cantidad de personal demás en cada terminal, con un único futuro que es el desempleo. Claro ejemplo es lo que sucedió hace 2 años en el puerto de San Vicente que con el traslado de la línea MSC al puerto de Coronel dejó a 120 trabajadores cesantes. Por lo mismo, lo que estamos generando es una propuesta de trabajo portuario donde ambos modos de contrato salgan favorecidos en derechos y estabilidad, potenciando lo bueno de cada uno y disminuyendo lo negativo que puedan tener, estando acorde a un modelo laboral moderno y socialmente sustentable. Por lo mismo, es que hasta que no tengamos nuestra propuesta concluida, estos movimientos empresariales deberán terminar en beneficio de una paz social actual y futura. No queremos tener que movilizarnos, menos en una fecha donde las exportaciones de temporada empiezan, con el consiguiente daño al país.
Por otra parte, la existencia de las nombradas en los sindicatos, que tanto parece molestar a las empresas, es producto de las injusticias que muchas de ellas generan cuando son éstas las que nombran, debido a que obtienen un control único sobre la vida del trabajador, el cual no puede expresarse ni oponerse a lo que el empleador le ordene, aunque ello atente contra su propia seguridad. Conocidas son las listas negras en puertos como Valparaíso, Mejillones y Arica, por nombrar algunos casos, donde la empresa simplemente castiga con no darle más trabajo a quien se «atreva» a expresar algún descontento en el trato laboral.
Mucho mito se ha dicho sobre el poder que se le da a los dirigentes con el sistema de nombrada sindical, pero queremos dejar en claro que el sistema en nuestra región se basa en los principios de equidad, transparencia y participación donde todo el poder está en las asambleas de socios trabajadores quienes solo buscan terminar con los abusos de las empresas. Es cierto que aún puede optimizarse aún más y en eso nos encontramos en este momento, pero ello es y siempre será realizado por los mismos trabajadores, quienes democráticamente aprobarán dichos perfeccionamientos.
Así es, como organización buscamos que las mejoras laborales se hagan bien y de forma seria, respetando a todos quienes trabajan, perfeccionando lo bueno y eliminando lo malo, que no solo sean guiados por beneficios de corto plazo sino que den estabilidad social a quienes laboramos en el sector en un largo periodo. Por lo mismo, lo que las empresas han estado realizando vemos que no va por ese camino y si insisten en seguir por ahí, solo contribuirán a que nunca se logre la ansiada estabilidad y tranquilidad producto de los continuos enfrentamientos entre las partes, que es hacia lo que nos están empujando.
Nosotros apostamos no sólo por un resultado de corto plazo, sino por un proyecto que entregue beneficios a todos, de forma estable, en un clima de paz, por siempre.
Unión Portuaria del Bío Bío