El miércoles 28 de febrero por la tarde, en la Plaza de Armas de Santiago, se efectuó una contundente manifestación de solidaridad por la libertad del Machi Celestino Córdova, único condenado a 18 años de cárcel por el caso Luchsinger-Mackay, donde fallecieron el empresario Werner Luchsinger y Vivianne Mackay. En la movilización estuvo presente el […]
El miércoles 28 de febrero por la tarde, en la Plaza de Armas de Santiago, se efectuó una contundente manifestación de solidaridad por la libertad del Machi Celestino Córdova, único condenado a 18 años de cárcel por el caso Luchsinger-Mackay, donde fallecieron el empresario Werner Luchsinger y Vivianne Mackay.
En la movilización estuvo presente el werken (vocero) de Celestino, Jimmy Marilao, quien indicó que, «Nuestro Machi lleva casi 50 días en huelga de hambre para pedir a gendarmería que le permita ir hasta su Rahue durante 48 horas, con el fin de que pueda renovar el compromiso con su espiritualidad. Asimismo, el objetivo de la huelga busca que el Estado, dentro y fuera del penal en el que está recluido, puede ejercer libremente su espiritualidad. Eso está resguardado por el derecho a Libertad de Culto. Cada día que pasa es mayor la presión de las comunidades en solidaridad con Celestino».
Por su parte, el abogado del Machi en huelga, Jorge Guzmán Tapia, señaló que «Celestino fue acusado el 2013 de cometer el asesinato de dos latifundistas de la zona, Werner Luchsinger y Vivianne Mackay, un hecho que tuvo conmoción nacional. Se trató de un incendio profusamente cubierto por los medios de comunicación tradicionales. Celestino fue detenido el mismo día de los acontecimientos ocurridos el 4 de enero de 2013. Él había sido baleado en las afueras del lugar. Entonces los medios aventuraron que el incendio se produjo a raíz de una recuperación territorial mapuche», y añadió que, «Celestino era vecino de la zona y en esos momentos estaba realizando actividades tradicionales propias de su condición de Machi del pueblo mapuche, en las proximidades del cerro Rahue y los esteros cercanos. En ese contexto, los carabineros estaban persiguiendo a quienes habían cometido el incendio mientras que a Celestino le impactó una bala loca que permitió su detención por los uniformados».
El werken Jimmy Marilao recordó que, «Estamos viendo los montajes que utiliza el Estado chileno en contra de las reivindicaciones del pueblo mapuche. En el llamado «caso Huracán», ya es de amplio conocimiento el accionar de agentes del Estado. Se continúa aplicando la política de la negación del pueblo mapuche, de la persecución y de la violencia, en vez de sentarse a dialogar con las comunidades que actualmente están en procesos de recuperación territorial».
«Celestino siempre ha sostenido su inocencia»
-¿Cuál es su estado de salud actualmente?
«Desde que cayó encarcelado, Celestino viene sufriendo un deterioro físico y psicológico. Por su condición de machi, debe permanecer vinculado a su Rahue y próximo a su comunidad. Con la huelga de hambre el riesgo de que pierda la vida se ha multiplicado. Su deterioro orgánico es progresivo.
Celestino siempre ha sostenido su inocencia. Ello se evidencia por la naturaleza de las trazas de bala que impactaron en su cuerpo: los Luchsinger-Mackay empleaban balas niqueladas y las que dieron con Celestino eran de cobre, entre otras pruebas que no fueron consideradas por la Fiscalía hace 5 años, ni fueron adecuadamente relevadas por la defensa que tuvo entonces».
La manifestación se realizó en la Plaza de Armas metropolitana y luego se convirtió en una marcha que se condujo por el Paseo Ahumada hasta llegar a la Alameda, principal avenida capitalina, para luego disolverse pacíficamente.
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