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Cronología de represión y muerte en la comunidad colombiana de Paz de San José

Fuentes: Rebelión

Está cronología casi diaria del acoso y la represión al que los paramilitares someten a la comunidad de Paz de San José en la región colombiana de Apartadó puede dar una idea del sufrimiento de los colombianos y de la impunidad con la que operan los paramilitares La Comunidad de Paz de San José de […]

Está cronología casi diaria del acoso y la represión al que los paramilitares someten a la comunidad de Paz de San José en la región colombiana de Apartadó puede dar una idea del sufrimiento de los colombianos y de la impunidad con la que operan los paramilitares

La Comunidad de Paz de San José de Apartadó quiere nuevamente dejar constancia de acciones de terror y muerte en contra de la Comunidad. Los hechos que ponemos a consideración de la historia y de la humanidad son:


– El día 23 de julio, hacia las 10 a.m., el señor Wilmar Durango se encontraba en la Terminal de Transporte Público y manifestó a varias personas de la comunidad, que estaban allí esperando carro para subir a San José, que estaban buscando el momento para asesinar o judicializar a los líderes; que él personalmente estaba haciendo parte de todo eso y que lo tuviera bien claro la gente, que podían hacer las denuncias que se quisieran, que todas le llegaban a él y solo le daban risa ya que él trabajaba con el ejército.

– El día 24 de julio el señor Wilmar Durango envió dos cartas a la comunidad; en ellas acusaba a los líderes y acompañantes de trabajar con la guerrilla y de haber planeado asesinatos.


– El día 30 de julio a las 6 p.m. en el barrio Mangolo, ubicado en la salida de Apartadó en la vía hacia San José, fue asesinado el señor LEONEL SÁNCHEZ OSPINA de 54 años en momentos en que bajaba de San José en su camioneta. El señor SANCHEZ OSPINA transportaba y vendía en San José agua en bolsas. Un grupo de paramilitares con arma corta y de civil lo hicieron bajar de la camioneta y lo llevaron a un lado de la carretera donde lo asesinaron.

– El día 31 de Julio paramilitares amenazaron a las personas que subieron la gasolina para la planta eléctrica que se utiliza en el curso de la Universidad que se está desarrollando actualmente. Los paramilitares afirmaron que dicha gasolina era para la guerrilla. El mismo día, hacia las 2 p.m. en el retén de la Balsa, miembros del ejército preguntaron por esa misma persona, diciendo que tenían información de que trabajaba para la guerrilla.

– El día 2 de agosto hacia las 12 del día un grupo de paramilitares reunió en el terminal a varias personas de San José; allí les dijeron que iban a comenzar de nuevo un bloqueo contra la h.p. comunidad, que todavía no habían podido acabar con esa comunidad pero que de nuevo iban a ver si cerrándoles los espacios aguantaban. Además dijeron que tenían localizados a los líderes y lo único era decidir si se les mataba en San José o donde dieran oportunidad. Amenazaron con que si se sabía matar a los líderes que eran se podía desestabilizar la comunidad y así se tomarían San José.

– El día 3 de agosto hacia las 7 p.m. fue asesinado el señor JOAQUIN RODRÍGUEZ DAVID en el barrio San Fernando de Apartadó, por parte de paramilitares que tenían arma corta y vestían de civil. El señor RODRIGUEZ DAVID vivía en la Victoria una vereda ubicada entre Apartadó y San José, allí tenía una tienda. Cuando lo asesinaron dijeron que ya habían comenzado con lo sentenciado.

– El día 6 de agosto hacia las 8 a.m. los paramilitares mandaron decir con un conductor de servicio público al conductor de un camión con madera que se encuentra en San José que tenía que llevarles la madera. De lo contrario, entraban ellos a San José por la madera y lo asesinaban. También amenazaron al resto de los comerciantes que trabajan en San José.

Indudablemente se evidencian las acciones de muerte contra la comunidad y los asesinatos confirman las amenazas. De nuevo comienza el bloqueo hacia la comunidad y el plan de extermino contra líderes y acompañantes de la comunidad, manifestado anteriormente por paramilitares y confirmado por los militares. Se muestra el descaro y la burla de los diálogos de dos que han andado juntos: los paras y el Estado; la llamada tregua, simplemente son acciones que pretenden desviar la atención de las acciones de muerte a la que se esta sometiendo a las comunidades y entre ellas nuestro caminar.

Pretenden acabarnos y asesinarnos, ya han comenzado nuevamente con personas que comercializan con la comunidad para comenzar un nuevo bloqueo. Pedimos la solidaridad nacional e internacional para exigirle al Estado respeto a uestro proceso y que se paren las amenazas y violaciones contra nuestra comunidad



COMUNIDAD DE PAZ DE SAN JOSE DE APARTADO

Agosto 6 de 2004