Los jefes paramilitares colombianos del sureño departamento del Putumayo obligaban a sus hombres a comer carne y beber sangre humana, según ha confesado un desmovilizado de esos grupos ultraderechistas a través de un vídeo, han revelado hoy fuentes del Congreso colombiano. La grabación ha sido presentada en un debate que ha analizado los alcances, logros […]
Los jefes paramilitares colombianos del sureño departamento del Putumayo obligaban a sus hombres a comer carne y beber sangre humana, según ha confesado un desmovilizado de esos grupos ultraderechistas a través de un vídeo, han revelado hoy fuentes del Congreso colombiano.
La grabación ha sido presentada en un debate que ha analizado los alcances, logros y tropiezos de la Ley de Justicia y Paz, marco legal de la desmovilización de grupos armados, que se ha celebrado en la Cámara de Representantes. Según Robinson, un ex miembro de esos escuadrones, los jefes paramilitares obligaban a sus combatientes a consumir carne y sangre de sus víctimas.
El vídeo ha sido presentado por el representante del departamento de Putumayo en la Cámara, Guillermo Rivera, en el debate en el que el Partido Liberal ha criticado los alcances y resultados de la citada ley. En el mismo análisis, el Gobierno, por medio de los ministro del Interior y de Justicia Carlos Holguín, y de Defensa, Juan Manuel Santos, ha defendido ese proceso «pionero y que ha servido de ejemplo mundial».
Robinson ha dicho que la prueba de fuego en la facción era asesinar y descuartizar al mejor amigo, y eso representaba recibir felicitaciones de los comandantes. «Cuando no había carne ordenaban sacarla de los cadáveres para comerla», ha dicho el paramilitar, quien ha confesado haberlo hecho una vez, pero que regularmente lo hacían varios, entre ellos el comandante alias Muela Rica.
Críticas a la ley de Uribe
Germán Olano, otro legislador, ha criticado la campaña gubernamental para aplicar a los paramilitares una consideración política a sus delitos y se preguntó si «esos antropófagos» serán los legisladores del mañana. Olano y Rivera han cuestionado si su extradición será perdonada y si serán condenados, ya que si consiguen el indulto los ex paramilitares podrían aspirar a cargos públicos.
Tanto el ministro Holguín como el titular de Defensa, sin embargo, han defendido la Ley de Justicia y Paz y han señalado que por primera vez, en el mundo, se tenían en cuenta los principios de verdad, justicia y reparación de las víctimas.
Entre 2003 y abril de 2006 más de 31.000 paramilitares de las Autodefensas Unidas de Colombia se desmovilizaron en el marco de un proceso de paz con el gobierno del presidente Álvaro Uribe, pero cerca de 19.000 de ellos aguardan la definición de su situación jurídica. Uribe anunció la presentación de un proyecto de ley para resolver la situación de los paramilitares que se acogieron a la Ley de Justicia y Paz con la premisa de que sus delitos serían considerados políticos.