Después de reunirse el jueves con el presidente Santos por cerca de tres horas, los líderes de la Cumbre Agraria caracterizaron el modelo de negociaciones que ya lleva más de un año como «un fracaso» y llamaron a que las organizaciones «se empiecen a movilizar por acuerdos incumplidos en temas estructurales y de política social». […]
Después de reunirse el jueves con el presidente Santos por cerca de tres horas, los líderes de la Cumbre Agraria caracterizaron el modelo de negociaciones que ya lleva más de un año como «un fracaso» y llamaron a que las organizaciones «se empiecen a movilizar por acuerdos incumplidos en temas estructurales y de política social».
La reunión que sostuvo la delegación de la Cumbre con el primer mandatario, contó además con la presencia del Ministro del Interior, Ministro de Agricultura, el Asesor Presidencial para los Derechos Humanos, los Viceministros de Minas y Defensa; un delegado del Departamento Nacional de Planeación y el Vicefiscal General de la Nación. El encuentro tuvo como propósito revisar el estado de la negociación del pliego de exigencias y el cumplimiento de los acuerdos asumidos por el gobierno nacional, de igual forma, abordó la situación de derechos humanos de las comunidades y las garantías para la movilización. Jimmy Moreno, vocero nacional del Congreso de los Pueblos e integrante de la Cumbre Agraria, explicó «Le expresamos al presidente nuestra preocupación por la poca voluntad política asumida por su gabinete para la solución del pliego y el cumplimiento de los acuerdos pactados desde el año pasado».
«Esta fue la oportunidad para reiterarle a Santos que las políticas reflejadas en el Plan Nacional de Desarrollo, la agenda legislativa propuesta por su gobierno, la violación sistemática de derechos humanos y la falta de garantías, van en contravía del pliego construido por las organizaciones inscritas en la cumbre y de la paz que tanto anhelamos los colombianos», resaltó Moreno.
Frente al tema de garantías para la movilización y derechos humanos, los delegados de la cumbre fueron enfáticos. Mientras el modelo siga actuando de manera agresiva, el número de violaciones de derechos humanos seguirá creciendo en el país. Por lo pronto se solicitó agilizar los procesos de investigación por las 19 personas asesinadas durante las jornadas de paro del año anterior, así mismo, proceder con el esclarecimiento de distintas amenazas a las comunidades y a varios dirigentes sociales. Finalmente, se pactó un compromiso para buscar fórmulas que desentraben los procesos judiciales de las personas detenidas durante las protestas de los años 2013 y 2014.
Con relación al Fondo de Fomento Agropecuario, recurso que se acordó luego de las negociaciones del Paro Nacional Agrario, el presidente Santos se comprometió con garantizar los doscientos cincuenta mil millones de pesos para la viabilidad y ejecución de los proyectos formulados por los procesos y organizaciones sociales.
Otro tema crucial en la discusión con el gobierno central tuvo que ver con el fracaso del modelo de negociación del pliego de exigencias asumido después del Paro Agrario del 2014. Jimmy Moreno explicó que hasta el momento, el equipo de negociación del gobierno no ha expresado voluntad política para cumplir los acuerdos, comportándose en las reuniones con una actitud dilatoria y de poco compromiso hacia las comunidades. Ante esta situación, se creará una comisión entre delegados del gobierno, delegados de la Cumbre Agraria con mediación de la Organización de las Naciones Unidad -ONU-, para construir una nueva metodología que permita avanzar de forma diligente en los ocho puntos del pliego. «Si bien se ha avanzado en dos puntos (Minero energético y economía propia), hay una serie de propuestas a las que no se le ha dado respuesta. Por tal situación, se les dio un tiempo de quince días a un mes para que nos respondan las inquietudes que han salido en relación a estos puntos», explicó Moreno.
La movilización no dará espera
La cumbre es clara en este tema y su asamblea así lo definió. Se insistirá en la negociación con el gobierno, pero ese escenario no limitará a las organizaciones para convocar a futuras movilizaciones; toda vez que se vienen implementando una serie de políticas como el Plan Nacional de Desarrollo, no cesan las amenazas, la militarización y el despojo de los territorios. «Necesitamos que las organizaciones se empiecen a movilizar por una serie de acuerdos incumplidos en temas estructurales y política social. Hacemos un llamado a las comunidades y a las distintas mesas regionales para que nos sumemos a partir de agosto a los procesos de movilización, protesta y exigencia de nuestros derechos», concluyó Moreno.