El presidente Daniel Ortega dijo el jueves tener pruebas de que el presidente de Colombia, Alvaro Uribe, intenta asesinar a dos mujeres colombianas y una mexicana sobrevivientes del ataque a un campamento guerrillero colombiano en Ecuador. «Presidente Uribe, cuídese de intentar asesinar estas muchachas en Nicaragua. No se le ocurra intentar asesinarlas en Nicaragua», dijo […]
El presidente Daniel Ortega dijo el jueves tener pruebas de que el presidente de Colombia, Alvaro Uribe, intenta asesinar a dos mujeres colombianas y una mexicana sobrevivientes del ataque a un campamento guerrillero colombiano en Ecuador.
«Presidente Uribe, cuídese de intentar asesinar estas muchachas en Nicaragua. No se le ocurra intentar asesinarlas en Nicaragua», dijo Ortega, quien les ha dado protección.
Agrego que las tres mujeres «son testigos de cargo» para un futuro juicio contra Uribe por crímenes de lesa humanidad.
«Las mafias tratan de asesinar al testigo y eso explica la declaración oficial del gobierno colombiano que dijo que las iba a tener de cerca», dijo Ortega.
El mandatario acusó de asesinos a los dueños de los rotativos La Prensa, El Nuevo Diario y el Canal 2 de la televisión local, los que según dijo «orientados por los yanquis las han llamado terroristas y se han dado a la tarea de localizar el sitio donde están refugiadas, para que sean asesinadas».
«Ellos hacen el trabajo sucio al imperio yanqui y con el pretexto del periodismo van a investigar donde están, para que después vengan a asesinarlas a ellas y todo esto dirigido desde la embajada yanqui aquí. Tenemos pruebas, tenemos pruebas», aseguró.
Ortega anunció sorpresivamente que ya no condecorará al saliente embajador de Estados Unidos, Paul Trivelli, con la orden José de Marcoleta, dándosela en cambio a las tres mujeres, a quienes calificó como «heroínas».
«No le estoy dando ninguna orden al embajador yanqui, porque ha ejercitado una política injerencista, irrespetuosa en contra del pueblo nicaragüense», dijo. «No hay orden para el embajador yanqui. No hay orden. Eso que quede completamente claro».
El mandatario presentó a la mexicana Lucía Morett y a las colombianas Doris y Martha Pérez Gutiérrez ante un congreso de mujeres sandinistas, diciendo que «son víctimas del terrorismo de estado del gobierno de Uribe, que dirige la guerra en Colombia so pretexto de la lucha contra el narcotráfico».
Las tres dijeron ser víctimas de terrorismo de Estado de parte del gobierno colombiano.
«Terrorismo de estado fue el que hizo el gobierno yanqui, que es el que dirige la guerra en Colombia, so pretexto de la lucha contra el narcotráfico», dijo Ortega.
Pérez dijo que formaba parte de un grupo de estudiantes que trataban de conocer sobre los trabajos de paz que realiza la guerrilla, para entre otras cosas liberar a la candidato presidencial colombiana Ingrid Betancourt, en tanto que la mexicana informaba que otros cuatro muchachos mexicanos murieron durante el ataque.
Pérez dijo que durante el ataque murieron unos 20 soldados y a algunos de ellos los remataron en el suelo. Además, acusó al ejército de Colombia de masacrar familias y matar a niños cortándoles la cabeza con motosierras.