Este 8 de julio ya fui libre de las restricciones que me impuso Facebook, más que presuntamente por reportes de las llamadas ciberclarias.
Tales “criollos bichos” son más o menos describibles de este modo:”…se llama así a quienes en el ciberespacio son, por su actuar no ético y acosador, comparables a las clarias: éste es un pez que fue introducido en las represas cubanas para aumentar la producción de carne de pescado, tras las carencias causadas por la virtual extinción de la otrora poderosa flota pesquera de altura…pero el remedio fue peor que la enfermedad: el tambièn llamado pez gato se expandió de manera incontrolada y provocó serios estragos en la fauna y vegetación acuática, el equilibrio ecológico y la vida doméstica, porque arrasa con tilapias y ranas y puede introducirse en cuevas subterráneas, alcantarillados y tuberías caseras”.
Las ciberclarias, que en las redes sociales por regla ocultan su identidad y por tanto ¿hay ética?, parecen obsesas por lograr la censura de economistas o periodistas especializados en las ciencias económicas, en 90% partidarios de la Revolución los que publicamos en el prestigioso blog “Cuba y la Economía“.
La bitácora del colega y amigo Humberto Herrera Carles, ya referencial en las ciencias económicas criollas, ha sido a lo largo del año agredida, tanto en su página web como en las redes sociales.
Por mi lado, ya libre del «castigo», compartí en mis redes el artículo “Cuba, la transición del socialismo desarrollado al neocapitalismo de los oportunistas, una piñata en apogeo y la economía de los timbiriches“, ciertamente crítico hacia la alta jerarquía criolla.
Llama la atención que hubo un “sepulcral silencio” respecto a los denunciados ataques informáticos al blog de “El Humber” -matemáticamente demostrados-; o a mí, mientras que inmediatamente “se alzó la ceja de la suspicacia” acerca de un artículo que poco nuevo dice desde el lado crítico hacia el proyecto socialista cubano.
Si apunta verdades, o no, que la Contraloría General de la República y demás órganos pertinentes se encarguen de investigar: ¿o el pueblo no les paga?
Aquí un botón de muestra de qué apunta el ejercicio: “Al contrario de lo que muchos adversos ideológicos al socialismo piensan, incluidos ciudadanos cubanos, unos confundidos (porque han sido vilmente engañados) y otros con marcada formación neoliberal, el desastre económico y comercial que se ha puesto en práctica en Cuba no es fruto de la históricamente perfilada propaganda y pretendida inoperancia del sistema, sino que responde a un plan puesto en marcha desde el poder para desmantelar el modelo”.
Se las trae que aparezcan desde la izquierda párrafos como ése , mientras los cibercláricos “inquisidores de la Fe” reportan y logran sanción por mi artículo “Fidel Castro: reine la verdad y no la mentira y la hipocresía“, el cual trata sobre un Fidel que provervialmente honró a la veracidad…ante todo un pueblo.
La imagen de Facebook ilustra sobre cómo se promueve semejante censura, definida por Carlos Marx como “poder sin principios“.
¿A cuáles mentirosos habrá molestado recordarles que Fidel Castro jamás mintió a su pueblo?
En el segundo caso, mi artículo “Cuba ante el debate Biden -Trump“, dos anécdotas: resultó el más leído de la semana en “Cuba y la Economía” ¡a sólo dos días de publicarse!; también, a su deseo, intercambié con un alto directivo de la comunicación social respecto al proceso electoral en Estados Unidos. Pero el ataque fue virulento y Facebook “me castigó”…
“Cuba, la transición..”, sí es un ejercicio notablemente crítico hacia la dirección partidista y gubernamental cubana, desde una más o menos aceptable perspectiva comunista. Pero ¿qué tiene de inusual en el escenario informativo de Internet y redes sociales, en el que cualquier “hijo de vecino” se informa según desee y accede a fuentes contrapuestas, incluso financiadas por la política de Estados Unidos hacia Cuba? ¿Alguien piensa que la visión de Cuba en Rusia es la malamente difundida por la prensa criolla y no una multicolor? ¿No hay facciones con peso en la política rusa cuya apreciación de la realidad cubana es la de ese artículo?
¿Acaso porque proviene de Rusia es la suerte de estupor, lo cual verifiqué mediante un viejo amigo moscovita, quien dice que morirá comunista?
Una de las primeras objeciones al ejercicio fue la presunta dependencia de URSS Noticias de los servicios especiales estadounidenses. Quien se tome la molestia de explorar notará que el mismo, en lo muy principal, reproduce notas del servicio noticioso ruso Noticiero News, que más pro-Putin imposible.
No creo que esos servicios lleguen tan lejos como para promover a Vladimir Vladimirovich por tal o más cual “jueguito operativo”.
Vale recordar al gran periodista comunista polaco Ryszard Kapuściński, por cuya célebre cita hasta me suscribí a Noticiero News. Cualquiera puede hacerlo, y el apotegma del no se olvide, comunista, es éste: Si entre las muchas verdades persigues una sola, ella se convertirá en falsedad y tú en un fanático.
Máxima también muy importante es que el periodista “primero informa“. Vengan después dimes y diretes, pero primero se informa, y lo que es noticia lo es venga de donde venga. Si alguien piensa que no confirmo, confirmo y confirmo, con el debido respeto, «vaya a freír tusas».
El Internet tiene entre sus virtudes la de poder hacer, conservar y rescatar amigos. Más o menos por 1977, el Ingeniero Geodesta soviético Yuri Vasilievich… – protejo fuentes, derecho que ampara el Código de Ética de la Union de Periodistas de Cuba-, ayudó a este entonces Contador a diseñar una contabilidad de costos para el sistema geodésico criollo. Ahí nació una amistad que se ha cultivado por décadas, hoy a “golpe de click”.
Pues bien, mundo chico: mi apreciado Yuri es camarada político y amigo personal del director de Noticiero News, en Facebook también mediante URSS Noticias.
Por simple interés o suspicacia, se está pidiendo el nombre del autor del artículo de marras: URSS Noticias y Noticiero News no los difunden, en ejercicio del idéntico derecho con que el sitio cubano Razones de Cuba publica numerosas notas y artículos sin firma, acreditando los mismos a “Redacción Razones de Cuba”.
¿Desde cuándo la verdad depende de nombres y apellidos, y no de la prueba mediante la praxis, apuntó Carlos Marx en sus Tesis sobre Feuerbach?
Quizás vienen al caso un par de las Diez Estrategias de Manipulación Mediática de Noam Chomsky. Aquí van:
1. La estrategia de la distracción. “El elemento primordial del control social es la estrategia de la distracción que consiste en desviar la atención del público de los problemas importantes y de los cambios decididos por las élites políticas y económicas, mediante la técnica del diluvio o inundación de continuas distracciones y de informaciones insignificantes”.
Cuando se lee la prensa criolla o se ve el Noticiero Nacional de Televisión, ¿no parece como que no se reporta “lo que es noticia”?
Por ejemplo, es infaltable la nota sobre la visita de Fulano o Mengano al municipio de Remanganua de la Tuerca , mientras se desconoce ya por cuarto mes el estado del proceso penal que se sigue al ex- vicepremier Alejandro Gil Fernández, acusado de corrupción.
“Señor escándalo” en cualquier país; pero en Cuba impera un chiste que protagoniza Napoleón: “si hubiera tenido el diario ‘que tú conoces’…, nadie se hubiera enterado de que perdí la Batalla de Waterloo”.
2. La estrategia de la gradualidad. “Para hacer que se acepte una medida inaceptable, basta aplicarla gradualmente, a cuentagotas, por años consecutivos…”
Se sufre en Cuba una reducción paulatina del salario y las pensiones reales, mientras parece que se “deja correr” la inflación y el mercado cambiario informal sin adecuada intervención del Estado…”cambios que hubieran provocado una revolución si hubiesen sido aplicados de una sola vez”.
¿Cómo se explica que la cartilla de racionamiento (libreta) esté experimentando una aguda e inquietante disminución en sus suministros, puro atentado contra los eufemísticamente llamados vulnerables –en verdad pobres en miseria– mientras por mínimo un quinquenio las inversiones asociadas al turismo han promediado alrededor de 30% del total – sin resultados a la vista-, mientras que las destinadas a la agricultura no llegan al 6%? Según el muy reconocido economista Julio Carranza, son en muy mayoría con recursos nacionales.
¿No da la impresión de que se aplica una estrategia para eliminar la libreta sin que exista una oferta a tenor de un digno Índice de Desarrollo Humano, por cierto en “caída libre” en este “hervorio caribeño de las ninfas”? De paso, ¡ que no me olvide de mencionar al “eticamente inaceptable” bloqueo yankee – que lo es – pero en “pecado capital” incurro de no hacerlo!
Quien fue mi mejor jefe en la Seguridad del Estado cubano – hoy ambos honrosamente jubilados – se caracteriza por lo sentencioso; uno de sus decirles es “La ‘paranoia’ es mala… pero a veces ayuda”.
¿Será buena frase para concluir este ejercicio?
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