El gobierno colombiano y el Ejército de Liberación Nacional (ELN) decidieron continuar en abril venidero la Fase Formal Exploratoria, iniciada en diciembre pasado, para analizar la posibilidad de iniciar un proceso de paz entre las partes. En un comunicado conjunto firmado en La Habana, Cuba, el gobierno y el ELN acordaron realizar la tercera ronda […]
El gobierno colombiano y el Ejército de Liberación Nacional (ELN) decidieron continuar en abril venidero la Fase Formal Exploratoria, iniciada en diciembre pasado, para analizar la posibilidad de iniciar un proceso de paz entre las partes.
En un comunicado conjunto firmado en La Habana, Cuba, el gobierno y el ELN acordaron realizar la tercera ronda de conversaciones bilaterales a comienzo de abril próximo, en la capital cubana.
Tras señalar que culminaron satisfactoriamente la segunda ronda de la Fase Formal Exploratoria, el texto señala que cumplieron los objetivos propuestos.
Las partes presentaron en la mesa una primera reflexión sobre los componentes esenciales del diseño general del proceso y construcción de la agenda, los cuales serán profundizados en la siguiente ronda, indica el comunicado conjunto.
Añade que el Gobierno y el ELN agradecen a los gobiernos de Cuba y Venezuela por el apoyo brindado a los esfuerzos de paz que se adelantan, así como a los de España, Noruega y Suiza, por su participación y acompañamiento.
También, destacaron la participación y aportes de diversos sectores de la sociedad colombiana en la reunión conjunta que tuvo lugar el pasado 17 de febrero, con motivo de la iniciación de las conversaciones.
El comunicado aparece firmado por el Alto Comisionado para la Paz, Luis Carlos Restrepo, por el Ejecutivo colombiano, y el comandante Antonio García, por el Comando Central del ELN.
En declaraciones desde La Habana a la emisora colombiana Caracol Radio, García se refirió a la decisión del gobierno de reconocer políticamente a los negociadores de la guerrilla en el proceso de conversaciones.
Eso, sostuvo, significa que en adelante esa posición le da flexibilidad y maniobrabilidad a las conversaciones frente a la clase política del país y a la Comunidad Internacional.