El II Encuentro para la Paz en Colombia, realizado en Madrid, España el 26 de abril de 2014 demanda a todos los Estados y organismos internacionales un compromiso y denuncia a las graves violaciones del Derecho Internacional Humanitario y del Derecho Internacional de los Derechos Humanos en Colombia que evidencian los informes de organizaciones nacionales […]
El II Encuentro para la Paz en Colombia, realizado en Madrid, España el 26 de abril de 2014 demanda a todos los Estados y organismos internacionales un compromiso y denuncia a las graves violaciones del Derecho Internacional Humanitario y del Derecho Internacional de los Derechos Humanos en Colombia que evidencian los informes de organizaciones nacionales e internacionales especialistas. Estas violaciones se concretan en las medidas jurídicas represivas, en la impunidad de los crímenes de líderes populares, agrarios, sindicales y políticos con la participación activa o tolerancia de funcionarios del Estado colombiano, en la ausencia de garantías políticas para la oposición y en la grave situación de los presos políticos.
El II Encuentro para la Paz en Colombia resalta y saluda la amplia convocatoria del Encuentro Internacional de Víctimas de Estado, celebrado los días 24, 25 y 26 de abril en Bogotá, y la amplia pluralidad de participantes. Manifestamos nuestro apoyo a la propuesta del MOVICE de creación de una Comisión de la Verdad con competencias cuasi judiciales que investigue los crímenes cometidos durante el conflicto y que esta propuesta sea recogida por los acuerdos de paz, siendo garantes de su cumplimiento instituciones de integración regional como UNASUR, ALBA o CELAC. Esa Comisión para la Verdad determinará las violaciones del DIH y del Derecho Internacional de los Derechos Humanos, los crímenes de lesa humanidad y recoger explícitamente la violencia ejercida contra las mujeres así como la realidad del exilio.
Saludamos así mismo la convocatoria del paro nacional agrario, manifestamos nuestro apoyo a sus justas reivindicaciones y rechazamos cualquier acto de represión contra sus convocantes y participantes.
El II Encuentro para la Paz en Colombia denuncia que las causas que han creado el exilio y la migración económica colombiana han sido la persecución política criminal contra la oposición y líderes populares, la degradación del conflicto social y armado, la inequidad económica, la injusticia social y la violación generalizada de los derechos humanos. Así mismo, denuncia que el gobierno colombiano no se ha preocupado por quienes han tenido que optar por el exilio ni por sus migrantes, como sí lo han hecho otros gobiernos de América Latina, y señala que debe avanzarse en la concreción del derecho al retorno con garantías de seguridad, protección y dignidad.
El II Encuentro por la Paz en Colombia denuncia la práctica negación del derecho de asilo en España y en la Unión Europea, pues cada vez existen menos concesiones de estatuto de refugiados, y denuncia las políticas discriminatorias y de racismo institucional así como la violación generalizada de los derechos humanos de los inmigrantes expresada en redadas policiales discriminadas, detenciones arbitrarias e ilegales, expulsiones y deportaciones masivas, restricción y exclusión del derecho a la salud, existencia de internamiento en campos de concentración como son en la práctica los Centros de Internamiento para Extranjeros (CIES), etc.
El II Encuentro reafirma el rechazo al Tratado de Libre Comercio firmado entre la UE y el gobierno de Colombia por cuanto profundizará el deterioro socio-económico de campesinos, indígenas y productores del campo; ignora las graves violaciones a los derechos humanos perpetradas por agentes del Estado y va en contravía a los propósitos de una solución política al largo conflicto social y armado. Denunciamos la responsabilidad de las multinacionales europeas en hechos de violaciones a los derechos humanos en regiones donde realizan grandes inversiones y ejecutan megaproyectos como en Buenaventura, en la construcción de la represa de El Quimbo y la explotación de carbón en El Cerrejón, entre muchas otras. Convocamos a apoyar la Campaña por la derogatoria del TLC y por un comercio justo y alternativo y otros llamamientos que se realizan desde Colombia y la comunidad internacional. Así como las trabajadoras y los trabajadores del Estado español no pueden pagar la crisis que no han generado con la pérdida de sus derechos, tampoco deben pagarla los trabajadores y trabajadoras de países como Colombia por culpa de la voracidad de las multinacionales y la servil postura de sus gobiernos.
El II Encuentro para la Paz en Colombia declara su compromiso de trabajo conjunto con los movimientos sociales, las organizaciones populares y las comunidades colombianas que luchan por la transformación social y por la consecución de la Paz con Justicia Social. Así mismo, manifiesta su voluntad de compartir este trabajo con el exilio y la migración colombiana en el Estado Español. Saludamos, los avances que se están realizando en el campo popular para reactivar la Ruta Social Común para la Paz en Colombia, como mejor instrumento para lograr el objetivo de participar activamente en la construcción de la paz.
Declaramos nuestro apoyo a los diálogos de paz de La Habana entre el gobierno colombiano y las FARC y creemos necesario su ampliación a los otros grupos insurgentes como el ELN y el EPL. Reclamamos el cambio de estrategia de negociar en medio del conflicto y acordar el cese de fuego bilateral. Exigimos la implicación decidida de las instituciones españolas y de la Unión Europea para acompañar y facilitar estos diálogos de Paz, así como su apoyo a los esfuerzos de la sociedad colombiana por participar activamente en la construcción colectiva de una paz duradera para Colombia.
Apostamos por la mejora de la coordinación del trabajo con las organizaciones en Colombia, de las vías de comunicación con las organizaciones del Estado Español, así como en nuestra propia coordinación. Todo ello para ganar en eficacia en nuestro compromiso solidario. Con estos propósitos, hemos acordado estrategias e instrumentos concretos para fortalecer nuestro trabajo de difusión de la realidad colombiana, de denuncia de las graves vulneraciones a los derechos humanos que soportan las organizaciones populares y sus líderes, de las propuestas que se construyen desde las organizaciones populares y también mejorar nuestra actividad de incidencia en la opinión pública española y en sus instituciones; nuestro trabajo, en definitiva, de solidaridad internacionalista con el pueblo colombiano.
Madrid, 26 de abril de 2014
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