Por medios de prensa, la Delegación de Paz de las FARC-EP ha tenido noticia sobre los sucesos graves y lamentables ocurridos en el corregimiento de San Francisco, municipio de Toribío, departamento del Cauca, que informan sobre la muerte de los guardias indígenas, Antonio Tumiñá y Daniel Coicué. Nuestras primeras averiguaciones indican que los hechos se […]
Por medios de prensa, la Delegación de Paz de las FARC-EP ha tenido noticia sobre los sucesos graves y lamentables ocurridos en el corregimiento de San Francisco, municipio de Toribío, departamento del Cauca, que informan sobre la muerte de los guardias indígenas, Antonio Tumiñá y Daniel Coicué.
Nuestras primeras averiguaciones indican que los hechos se originaron cuando milicianos indígenas quienes colocaban pendones alusivos al tercer aniversario del asesinato del comandante Alfonso Cano, fueron presionados por un grupo de la comunidad Nasa encabezado por el gobernador del Cabildo, Esneider Gómez, que no solo se oponía a dicha actividad, sino que pretendió desarmar a los milicianos, luego de que estos ya se habían replegado del lugar.
Ante el desenlace luctuoso de un hecho que no merecía tal exacerbación, y que pudo resolverse mediante el diálogo, expresamos nuestro sentimiento de pesar y preocupación.
A las FARC-EP las inspiran un profundo respeto, tanto por nuestros pueblos originarios como por el conjunto de nuestros combatientes, muchos de los cuales también son indígenas; circunstancia que nos obliga a marchar en el rumbo de mantener las mejores relaciones de hermandad y convivencia empeñando todos nuestros esfuerzos.
Quisiéramos aclarar que el comunicado aparecido en la noche del viernes donde se amenaza a líderes indígenas, atribuido a las FARC, es un comunicado apócrifo.
Con sentimiento de patria y esperanza en la paz para Colombia,
DELEGACIÓN DE PAZ DE LAS FARC-EP