La instalación de la industria perteneciente al grupo LPC (Reino Unido), y otras como las planta de biodiesel, de polisilicio, etc. en el campo de Gibraltar (Cádiz) ha hecho aumentar el cáncer y otras enfermedades, produciendo más muertes que en el resto de España, debido al levado número de plantas químicas, centrales eléctricas y refinerías […]
La instalación de la industria perteneciente al grupo LPC (Reino Unido), y otras como las planta de biodiesel, de polisilicio, etc. en el campo de Gibraltar (Cádiz) ha hecho aumentar el cáncer y otras enfermedades, produciendo más muertes que en el resto de España, debido al levado número de plantas químicas, centrales eléctricas y refinerías con carbón.
Esta película muestra a través de noticias e imágenes, cómo los intereses políticos y económicos de una minoría, priman sobre los intereses de los ciudadanos, cómo los discursos políticos están vacíos de contenido y plagados de demagogia, cómo la indiferencia de los políticos merma las inquietudes de los ciudadanos, cómo destruyen el medio ambiente en favor de las industrias multinacionales por la ineptitud y ambición de nuestros gobernantes y la complicidad de algunos sindicatos y organizaciones sociales, cómo ante la protesta se nos infunden miedos recordándonos el paro y las deslocalizaciones, cómo se amenaza, coacciona y amedrenta a los que luchan y protestan, cómo el poder político intenta manipular e instrumentalizar a los medios de comunicación e información, cómo un pueblo se ha convertido en una gran parcela donde invertir instalando establecimientos de comida rápida, grandes superficies comerciales, ahorcando al pequeño comercio en beneficio de empresas transnacionales, cómo una cadena de favores y complicidades mantienen a los políticos en el poder, convirtiendo a las administraciones y a sus colaboradores en depósitos de funcionarios y empleados sordos, ciegos y mudos con manuales de ética profesional en blanco, cómo la comarca del Campo de Gibraltar se ve afectada por una crisis de salud pública que la administración autonómica y estatal se niega a reconocer y lo que es peor se niega a abordar.