El ex congresista indígena Gerardo Jumí solicitó hoy a Naciones Unidas garantizar una investigación sobre la posible participación de la Fuerza Pública colombiana en el asesinato de cinco aborígenes Awá en el suroeste departamento de Nariño. La masacre ocurrió anoche en la localidad de Altaquer, en el municipio de Ricaurte, en ese territorio colombiano, precisamente […]
El ex congresista indígena Gerardo Jumí solicitó hoy a Naciones Unidas garantizar una investigación sobre la posible participación de la Fuerza Pública colombiana en el asesinato de cinco aborígenes Awá en el suroeste departamento de Nariño.
La masacre ocurrió anoche en la localidad de Altaquer, en el municipio de Ricaurte, en ese territorio colombiano, precisamente unas horas antes de celebrarse hoy el Día Internacional de las Poblaciones Indígenas.
Jumí señaló a la prensa que la zona donde se produjeron los crímenes estaba bajo control de las autoridades del Estado, y agregó que los aborígenes asesinados fueron acusados de ser auxiliadores de la guerrilla por parte del comando que los ultimó.
«Por información que ha suministrado la misma comunidad, nos hemos visto en la obligación de solicitarle a la ONU que le exija al gobierno del presidente Alvaro Uribe, que se investigue una presunta participación de la fuerza pública en el asesinato de estos indígenas de la comunidad Awá», apuntó el líder indígena.
A propósito de ese hecho, el director de la Organización Nacional Indígena Colombiana, Luis Evelis Andrade, reveló que entre los meses de enero y junio de 2006, un total de 32 aborígenes de diferentes etnias han sido asesinados.
Asimismo, prosiguió, cinco mil 731 han sido desplazados de sus territorios ancestrales por la violencia. 28 han sido víctimas de desaparición forzada y 33 mil bienes de estas comunidades han sido atacados por parte de grupos armados.
Andrade indicó que en los últimos seis meses más de 63 mil indígenas están confinados en su propio territorio, donde denunció- se presentan combates y detenciones arbitrarias, con el señalamiento de ser presuntos auxiliadores de la guerrilla.