Desde Italia a Canadá. Desde Suecia hasta Argentina. Desde Stella Calloni a Noam Chomsky, desde James Cockroft a Frei Betto, pasando por el italiano Gianni Minà. De intelectuales israelíes como Meir Margalit o Jeff Halper a Hernando Calvo Ospina, el periodista de Le Monde diplomatique, probablemente el máximo esperto de paramilitarismo en el mundo, Intelectuales, […]
Desde Italia a Canadá. Desde Suecia hasta Argentina. Desde Stella Calloni a Noam Chomsky, desde James Cockroft a Frei Betto, pasando por el italiano Gianni Minà. De intelectuales israelíes como Meir Margalit o Jeff Halper a Hernando Calvo Ospina, el periodista de Le Monde diplomatique, probablemente el máximo esperto de paramilitarismo en el mundo, Intelectuales, artistas, simplemente personas sensibles, se están movilizando en estas horas con una gran preocupación: que la tragedia colombiana no sea recordada en el mundo sólo por Ingrid Betancourt y que quién siembra paz no se quede solo.
El pasado 6 de marzo, cientos de miles de personas marcharon contra el Terrorismo de Estado en Colombia. Entre ellos los ex rehenes de las FARC, y con la adhesión de todos los familiares, incluyendo los de la misma Betancourt. Desde aquel momento ya cuatro organizadores de la marcha fueron asesinados. Otros dos fueron secuestrados y el mensaje que los paramilitares le entregaron fue siniestro: «los golpearemos uno a uno y no vamos a permitir que la sociedad civil colombiana levante la cabeza». Decenas de otros, empezando por Iván Cepeda del MOVICE, fueron amenazados de muerte. La sociedad civil colombiana exige que el gobierno garantice la vida y seguridad y pide las dimisiones del concejal del presidente Álvaro Uribe, José Obdulio Gaviria, que ha repetidamente definido las cientos de asociaciones para los derechos humanos que participaron a la marcha del 6 de marzo como pro-FARC. En realidad Gaviria mismo, como el 35% del parlamento colombiano, es acusado por ser orgánico al paramilitarismo y narcotráfico.
Nace así un fuerte llamado para apoyar las asociaciones en defensa de los dd.hh. colombianas y exigir a los gobiernos de la Unión Europea y de América latina que presiones urgentemente al gobierno de Bogotá para garantizar la seguridad de las decenas de amenazados y asegurar los culpables a la justicia.
Nace también para recordar al mundo la más olvidada de las guerras, el país con más refugiados, cuatro millones, donde más sindicalistas se asesinan (70 sólo en el año 2006) y donde, según Amnistía Internacional, actualmente 15.000 personas están desaparecidas.
Nace promovido por cuatro intelectuales italianos, Annalisa Melandri, Gennaro Carotenuto (Periodismo partecipativo), Guido Piccoli y Stella Spinelli (Peacereporter), para romper el cerco del silencio y de la desinformación sobre un país, Colombia, del cual demasiados intereses, políticos y económicos no quieren que se hable.
Acá el texto en castellano del Llamado urgente en defensa de las asociaciones para los DDHH en Colombia y las instrucciones para adherirse.
A questo link in italiano: Appello urgente in difesa delle associazioni per i diritti umani in Colombia .