Buenas noticias. Desde Caracas el gobierno de Colombia y la guerrilla del Ejército de Liberación Nacional, ELN, acaban de anunciar que instalarán en Quito -el próximo 27 de octubre- la mesa pública de conversaciones abordando el tema de «Participación de la Sociedad en la construcción de la Paz», precedida de acciones humanitarias de las partes […]
Buenas noticias. Desde Caracas el gobierno de Colombia y la guerrilla del Ejército de Liberación Nacional, ELN, acaban de anunciar que instalarán en Quito -el próximo 27 de octubre- la mesa pública de conversaciones abordando el tema de «Participación de la Sociedad en la construcción de la Paz», precedida de acciones humanitarias de las partes para ambientar los diálogos hacia el fin del conflicto con esta insurgencia a la que también se le reconoce como sujeto político, fuerza beligerante. Los países garantes que serán sede de las conversaciones son: Venezuela, Ecuador, Cuba, Chile y Brasil. Noruega es garante pero no albergará los diálogos.
El ELN nació en 1965 en Simacota, Departamento de Santander y es en esa región nororiental fronteriza con Venezuela visitada por la XII Delegación Asturiana en marzo de este año, donde tiene su mayor fuerza: Arauca, Norte de Santander, Boyacá, Casanare, aunque también se despliega en los departamentos de Chocó, Bolívar, Cauca y Nariño. El inicio de las conversaciones con el ELN es un avance importante junto con el Acuerdo firmado con las FARC que debe entrar en la fase de implementación.
Los diálogos con el ELN abordarán seis temas: 1 – Participación de la sociedad mediante p ropuestas para construir visión común de paz. 2 – Democracia para la paz: el papel de la sociedad en las decisiones que la afectan; el derecho de movilización, la situación jurídica de las personas prisioneras políticas por ejercerlo. 3 – Transformaciones para la paz: en materia política y en lo social y en lo económico, con el propósito de lograr la equidad dando espacio a los planes alternativos de vida de las comunidades en los territorios. 4 – Víctimas: reconocerles sus derechos a la verdad, la justicia, la reparación y garantías de no repetición y no olvido como premisas para el perdón y la reconciliación. 5 – Fin del conflicto: garantías para la vida y para la libertad que permitan a la guerrilla dejar las armas y hacer el tránsito a la actividad política legal. 6 – Implementación de lo acordado: firmado el acuerdo se adelantará un plan verificable por la sociedad civil, el Gobierno, el ELN y la comunidad internacional.
Mantenemos nuestra esperanza y el activismo internacional por el fin del conflicto armado interno en Colombia con todas las guerrillas y en todo el país.
Exigimos al Presidente Santos, Nobel de la Paz que le ahorre tiempo y sufrimientos a nuestras gentes declarando de inmediato el cese del fuego con el ELN, e iniciando diálogos con el Ejército Popular de Liberación, EPL, que opera en una zona de la frontera con Venezuela.
Colectivo de Colombianos Refugiados en Asturias «Luciano Romero Molina».